Dimiten nueve dirigentes de Podemos en la Comunidad de Madrid afines a Errejón

Se agrava la crisis de Podemos en la Comunidad de Madrid. Después de que el pasado lunes dimitiese el secretario de Organización regional, Emilio Delgado, este miércoles fueron otros nueve miembros del Consejo Ciudadano autonómico los que presentaron su renuncia de manera conjunta. Todos son afines al número dos de Podemos, Íñigo Errejón, y entre ellos se cuentan los diputados autonómicos Jazmín Beirak, Olga Abasolo, Pablo Padilla y Clara Serra.

Los nueve dirigentes, miembros del Consejo Ciudadano de la Comunidad de Madrid –el máximo órgano del partido en la comunidad entre congresos–, hicieron pública su renuncia en una carta conjunta que difundieron a través de las redes sociales. Después de que este lunes Delgado dimitiera entre críticas al secretario general regional, Luis Alegre –al que acusó de "desaparecer de la vida de la organización"–, los nueve dirigentes que renunciaron este miércoles también coincidieron en denunciar la "deriva" que, a su juicio, ha sufrido la dirección autonómica en los últimos meses.

Pese a que el número de dimisiones no sirve por sí mismo para forzar la disolución del Consejo Ciudadano en la Comunidad de Madrid, fuentes del partido afirman que la renuncia colectiva busca "forzar la imposición de una gestora por la vía de la crisis". No obstante, los ya exdirigentes autonómicos no abandonan Podemos: "Nuestras diferencias respecto a la dirección política de la Comunidad de Madrid no ponen en duda nuestro compromiso con el proyecto, ni tienen relación alguna con supuestas divisiones ficticias de dimensión estatal", sostiene la carta.

"La mayoría de nosotros llevamos implicados en Podemos desde los comienzos, seguimos comprometidos con los principios, los valores y la acción política de un proyecto que se ha consolidado como la mejor herrameinta de la gente para recuperar las instituciones y cambiar nuestro país", señala el comunicado difundido por los nueve exdirigentes autonómicos, que aseguran que su renuncia no implica la existencia de una "división" en Podemos a nivel estatal. "Somos una organización democrática y plural donde toda discrepancia entre compañeros es pública y perfectamente normal", sostiene la misiva, en la que sin embargo los nueve dirigentes lanzan un dardo a la dirección autonómica al afirmar que seguirán "trabajando" en "los muchos espacios donde sí" pueden "aportar".

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Mucho más duro se mostró en su dimisión Emilio Delgado, que afirmó en un comunicado que "la ausencia de dirección política del órgano autonómico es paralizante". Delgado acusó directamente a Alegre de no haber "sido capaz de convocar una sola vez, por sí mismo, a todos los secretarios generales municipales de la Comunidad", así como de no estar "a la altura del nivel de exigencia de la última campaña electoral a las elecciones generales", haber "sido incapaz de trabajar una hoja de ruta estrategica para aterrizar la línea política a la realidad" madrileña y generar "descoordinación y desconfianza con el Grupo Parlamentario". "La situación me parece hoy completamente irreformable en los órganos de Madrid", lamentaba Delgado.

El Consejo de Coordinación –la ejecutiva– autonómico reaccionó cerca de una hora después de que se conocieran las dimisiones. No obstante, el órgano se limitó a expresar que "acepta" y "respeta" las renuncias y lamentó que se hayan producido "antes de de la realización del debate político y organizativo que se aprobó en el último Consejo Ciudadano". "Este Consejo de Coordinación de la Comunidad de Madrid no va a favorecer la distracción de atención de las necesarias negociaciones y debates sobre la conformación de Gobierno de cambio a nivel estatal", zanja su breve comunicado.

No obstante, los líderes estatales de Podemos quisieron mostrar una imagen de unidad poco después de conocerse las renuncias. El secretario general, Pablo Iglesias, bromeó en Twitter con la supuesta división existente en la cúpula del partido, e Íñigo Errejón aseguró que está "hombro con hombro" con Iglesias.