El Ministerio de Cultura ha enviado este miércoles una carta a los responsables de San Sebastián 2016 en la que expresa su "preocupación" por el hecho de que hayan calificado la violencia de ETA de "fenómeno político, militar y cultural" en el marco del proyecto Tratado de Paz. El Ministerio, uno de los patronos públicos de la fundación que gestiona la capitalidad europea de la cultura, pide a los organizadores "especial cuidado" al respecto, como ha recogido la agencia Europa Press. "No nos lo tomamos como una regañina", ha aclarado Fernando Álvarez Busca, director de Comunicación del proyecto, a preguntas de infoLibre. La organización aún no había recibido la misiva el miércoles por la tarde, pero sí había recibido la confirmación de envío por parte de Cultura.
Según han explicado fuentes del Ministerio a esta agencia, con esta misiva emplazan a la Fundación San Sebastián 2016 (en la que participan tanto el Ayuntamiento, como la Diputación, el Gobierno vasco y el propio Ministerio) a que pongan "especial cuidado" en los términos empleados en el dossier de prensa ante "temas tan delicados, aunque sea desde un plano artístico". El proyecto Tratado de Paz (a partir del 18 de junio), uno de los ejes de la capitalidad, fue presentado el martes en el Museo del Prado y reúne más de 400 obras de 21 museos (además de conferencias, publicaciones y seminarios) que reflexionan sobre los conflictos políticos y, ante todo, sobre los procesos de acuerdo que los cierran.
En concreto, Cultura hace alusión a la descripción de la muestra 1989. Tras las conversaciones de Argel. Delirio y tregua. Esta exposición forma parte de los ocho casos de estudio que se analizan dentro de la muestra, desde las Paces de Urtubia (1513) a la Sociedad de Naciones (1936). Esta es la descripción íntegra de la muestra que ha provocado el conflicto, tal y como aparece en el dossier: "El exorcismo cultural de ETA, tal como han bautizado algunos medios la revisión de un período histórico marcado por la actividad terrorista, requiere descomponer la violencia y alejarse del binarismo que ha impedido todo intento de reflexión acerca de este fenómeno, a la vez, político, militar y cultural. Desde 1958 hasta nuestros días ETA representa el epítome de un conflicto total que ha movilizado hasta la última partícula de la sociedad".
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"Nos parece adecuada y normal [la actuación del Ministerio]. Cuando se cita a ETA, los pelos se erizan, y es lógico", señala Álvarez Busca a este periódico, "No está de mal tener cuidado al hablar del tema. Solemos tenerlo, porque nuestro proyecto tiene como idea central la convivencia". La organización de San Sebastián 2016, por tanto, quita importancia al acto del Ministerio, que podría leerse como una reprimenda: "Lo consideramos normal, no porque sea un juicio a nuestra actuación, sino porque suele ocurrir que cada vez que sale este tema provoca unos subrayados muy intensos de la posición de cada uno".
Álvarez Busca niega que la descripción que acompaña la muestra 1989. Tras las conversaciones de Argel. Delirio y tregua sea un "posicionamiento político", y que este sea el "posicionamiento político de la Fundación": "Son discursos de artistas que, desde ese ámbito, desarrollan un trabajo que tratan en una exposición". El director de Comunicación comenta igualmente unas declaraciones del artista Pedro G. Romero, comisario general de Tratado de Paz, que recogía el diario El País. En ellas, Romero sostenía que la iniciativa pretende "hablar de las treguas de ETA y no tanto de la violencia de ETA". "Lo que Pedro G. Romero quería decir", señala el portavoz, "es que tanto esta exposición, como las demás, está centrada en la paz, y no en la guerra-paz como dicotomía".
El comisario de esta muestra es Carles Guerra, artista, crítico de arte y director de la Fundación Antoni Tàpies, y la exposición ha sido organizada por Donostia/San Sebastián 2016 Capital Europea de la Cultura, Artium Centro-Museo Vasco de Arte Contemporáneo y la Fundación Antoni Tàpies. El director general de San Sebastián 2016 es el gestor cultural Pablo Berástegui. Pero si hay un nombre que ha sonado en el asunto es el de Santiago Eraso, impulsor de la iniciativa (fue director de San Sebastián 2016 entre 2009 y 2011, y siguió trabajando en Tratado de Paz hasta su finalización en 2015) y actual director de contenidos de la empresa municipal Madrid Destino, nombrado por la alcaldesa Manuela Carmena (Ahora Madrid).
El Ministerio de Cultura ha enviado este miércoles una carta a los responsables de San Sebastián 2016 en la que expresa su "preocupación" por el hecho de que hayan calificado la violencia de ETA de "fenómeno político, militar y cultural" en el marco del proyecto Tratado de Paz. El Ministerio, uno de los patronos públicos de la fundación que gestiona la capitalidad europea de la cultura, pide a los organizadores "especial cuidado" al respecto, como ha recogido la agencia Europa Press. "No nos lo tomamos como una regañina", ha aclarado Fernando Álvarez Busca, director de Comunicación del proyecto, a preguntas de infoLibre. La organización aún no había recibido la misiva el miércoles por la tarde, pero sí había recibido la confirmación de envío por parte de Cultura.