República Checa acogerá a 153 refugiados cristianos que huyen de las zonas controladas por Estado Islámico en Irak, ha señalado este lunes el primer ministro del país centroeuropeo, el socialdemócrata Bohuslav Sobotka.
"Se trata de personas que pertenecen a la minoría cristiana iraquí y que se han visto obligadas a escapar de la influencia de Estado Islámico en Mosul, una región en la que han vivido durante generaciones", ha aclarado Sobotka después de la sesión ordinaria del Gobierno.
Las 37 familias cristianas llegarán a República Checa en cuatro grupos desde enero hasta abril. Los refugiados serán trasladados desde la zona controlada por los kurdos en el norte de Irak y un campamento de Líbano, ha precisado el primer ministro.
El presidente Milos Zeman, también del Partido Socialdemócrata checo, –que ha advertido frecuentemente de la amenaza de los milicianos islamistas–, señaló este verano su preferencia por los "refugiados cristianos", mientras una mayoría musulmana cruza el continente europeo con destino a los países del norte, generalmente Alemania.
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Miles de personas, la mayoría musulmanes, han cruzado el territorio checo este año siguiendo la mayor ruta migratoria del sureste de Europa. Muchos de ellos han denunciado ante organismos internacionales, como Naciones Unidas, su reclusión en instalaciones de carácter penitenciario bajo condiciones insalubres.
Praga se ha opuesto a las cuotas acordadas por la Unión Europea para redistribuir a los refugiados. Las encuestas realizadas en el país muestran cómo la mayoría de los checos rechazan esta medida, incluso aunque se trate de acoger a personas que huyen de zonas en conflicto. República Checa, con 10,5 millones de habitantes, registró hacia finales de octubre 1.245 peticiones de asilo, de las cuales solo ha aceptado 52, según datos del Ministerio del Interior.
Berlín y París han solicitado la creación de un cuerpo que actúe sin la solicitud previa de los estados miembro para controlar las fronteras del espacio Schengen. Se espera que cerca de un millón de refugiados llegue a la Unión Europea este año, la mayoría a través de Grecia e Italia.
República Checa acogerá a 153 refugiados cristianos que huyen de las zonas controladas por Estado Islámico en Irak, ha señalado este lunes el primer ministro del país centroeuropeo, el socialdemócrata Bohuslav Sobotka.