Melilla ha registrado a primeras horas de este lunes un intento de salto por la doble valla que separa de España y Marruecos de unos 400 inmigrantes de origen subsahariano, que fueron rechazados en su mayoría por el dispositivo de seguridad de la Guardia Civil y la Policía Nacional española y las Fuerzas Auxiliares y la Gendarmería marroquíes, salvo "unos cuatro", que lograron acceder.
Uno de ellos ha quedado detenido por atentado a la autoridad por "morder" y "arañar" a dos guardias civiles que resultaron "heridos leves".
Según ha informado a Europa Press una portavoz de la Delegación del Gobierno en Melilla, el suceso se ha producido sobre las 6,10 horas de la mañana de este lunes por una zona próxima al puesto fronterizo de Beni Enzar.
La citada fuente ha indicado que al ver dirigirse a unos 400 inmigrantes a la carrera hacia la frontera, Marruecos ha activado su protocolo y por la parte española de la alambrada se ha reforzado la presencia de la Guardia Civil en la valla y ha pedido apoyo a Cuerpo Nacional de Policía.
Un grupo de unos 200 inmigrantes entran en Ceuta a la carrera por la frontera del Tarajal
La portavoz gubernamental ha detallado que "el grueso del grupo es controlado por Marruecos aunque unos 60 han logrado aproximarse al vallado y se calcula que cuatro han logrado entrar tras superar dispositivo anti intrusión".
En este sentido, ha confirmado que uno de ellos ha quedado detenido "por mordeduras y arañazos a dos guardias que intentaban interceptarlo y que sufren heridas leves como consecuencia de la reacción del inmigrante".
El delegado del Gobierno en Melilla, Abdelmalik El Barkani, ha transmitido "una vez más su apoyo a la Guardia Civil por su difícil labor de vigilancia y custodia de la frontera sur de Europa" y ha expresado su solidaridad a los dos guardias heridos.
Melilla ha registrado a primeras horas de este lunes un intento de salto por la doble valla que separa de España y Marruecos de unos 400 inmigrantes de origen subsahariano, que fueron rechazados en su mayoría por el dispositivo de seguridad de la Guardia Civil y la Policía Nacional española y las Fuerzas Auxiliares y la Gendarmería marroquíes, salvo "unos cuatro", que lograron acceder.