Gloria ya ha abandonado el litoral mediterráneo. Este jueves, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) confirmó que la inestabilidad comenzó a desplazarse desde el noreste peninsular al suroeste. No obstante, las lluvias que azotarán esa zona durante este fin de semana ya no serán consecuencia de la misma borrasca. Y tampoco serán tan intensas, tal y como informó Aemet a infoLibre. La noticia, por tanto, continuará estando en las comunidades de Baleares, Cataluña, la Comunitat Valenciana, Murcia y Andalucía,las zonas más afectadas por el temporal que, desde el domingo, ha dejado 13 fallecidos y cuatro personas desaparecidas.
Al balance final del paso de Gloria, no obstante, también hay que sumar pérdidas materiales. Una vez pasadas las lluvias, las tormentas y el viento, toca hacer inventario y cuantificar las pérdidas consecuencia de las inundaciones y los desbordamientos. No sólo a nivel de la ciudad o el municipio, sino también a nivel personal. Porque la pregunta que surge después de una catástrofe natural siempre es la misma: ¿cómo se arreglan los destrozos? Y sobre todo, ¿quién los paga? Lo cierto es que los afectados tienen dos opciones: por un lado, recibir las ayudas públicas y, por otro, las indemnizaciones del Consorcio de Compensación de Seguros (CCS), una entidad dependiente del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital.
No es, ni mucho menos, la primera vez que una catástrofe natural se ceba con alguna localidad o región española. La última experiencia, de hecho, tuvo lugar el pasado mes de septiembre. La intensas lluvias provocadas por la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) azotaron, en esta ocasión, el sureste peninsular. Dejaron a su paso siete personas fallecidas, inundaciones, desbordamientos, coches arrastrados, miles de evacuaciones, vías cortadas, etc. Sobre todo en la Comunitat Valenciana y Murcia, dos de las comunidades más afectadas por este nuevo temporal. La fotografía, por tanto, fue muy similar a la que dejó Gloria esta semana. Y la pregunta fue la misma. La respuesta del Ejecutivo, por su parte, también. "El Gobierno de España no escatimará recursos", dijo entonces el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que este jueves anunció que el Gobierno activará "inmediatamente" los mecanismos para conceder ayudas a los damnificados.
Numerosas localidades solicitaron entonces la declaración de zona catastrófica, un título que otorga el Consejo de Ministros y que da la posibilidad de obtener las ayudas públicas para reconstruir un territorio devastado por una catástrofe natural. No obstante, aunque coloquialmente se conozca de esta manera, lo cierto es que desde el año 2015 la zona catastrófica se denomina zona afectada gravemente por una emergencia. Así lo establece el artículo 23 de la Ley 17/2015 del Sistema Nacional de Protección Civil, que recoge que la declaración "se efectuará por acuerdo de Consejo de Ministros, a propuesta de los ministros de Hacienda y Administraciones Públicas y del Interior y, en su caso, de los titulares de los demás ministerios concernidos, e incluirá, en todo caso, la delimitación del área afectada. Dicha declaración podrá ser solicitada por las administraciones públicas interesadas".
Una vez hecho, el Consejo de Ministros aprobó un real decreto con las indemnizaciones que se destinarían a paliar los efectos de la DANA. El texto, además, incluía una partida destinada a reparar las catástrofes naturales que habían asolado el país desde el mes de junio. El importe acordado ascendió a 774 millones de euros.
Sin embargo, tal y como informaron a infoLibre fuentes de las delegaciones del Gobierno en la Región de Murcia y en la Comunitat Valenciana, las zonas más afectadas por aquel temporal, las ayudas todavía no han llegado. En ambos casos, confirman las fuentes de estos dos organismos, el procedimiento se encuentra en la misma fase: el Gobierno tiene que verificar la información remitida —el plazo para hacerlo acabó el pasado 20 de noviembre— para, después, proceder a la transferencia. En la Comunitat Valenciana, no obstante, se recibieron las ayudas de primera necesidad, añaden las mismas fuentes.
El pasado martes, el Gobierno volvió a aprobar ayudas. Esta vez de tres millones y sólo para la Comunitat Valenciana. infoLibre trató de contrastar esta información con el Gobierno, pero a última hora del viernes todavía no había obtenido respuesta.
El río Ter desbordado en el barrio de Sant Ponç de la ciudad de Girona. | EFE
El Gobierno es consciente de que frecuentemente se retrasan los pagos por las dificultades para evaluar los daños. Por eso estudia cambiar el sistema de ayudas para atender las consecuencias de temporales como Gloria. Es lo que trascendió de la reunión ministerial que Sánchez presidió este viernes con el objetivo de marcar los pasos a seguir para reconstruir las zonas afectadas.
Hasta el momento, el presidente de la Generalitat, Quim Torra, declaró luto oficial en toda Cataluña. Además, decidió suspender todos los actos oficiales hasta el sábado. El líder del Ejecutivo valenciano, Ximo Puig, reclamó "decisiones rápidas" al Gobierno y un cambio de estrategia frente a fenómenos meteorológicos extremos. Numerosas localidades han asegurado ya que pedirán la declaración de zona catastrófica. Barcelona es una de ellas. La alcaldesa de la ciudad, Ada Colau, estimó este viernes que los estragos que ha dejado el paso de la borrasca Gloria por la capital catalana se cifran en alrededor de 12 millones de euros, aunque no descartan aumentar esa cifra. "Los daños seguramente serán mayores. Ha habido una pérdida de arena que ciframos en tres millones, la caída de árboles en dos millones y la afectación en el Port Fórum, que ha sido muy importante, en cinco millones de euros", precisó. Otros municipios como Cullera, Deltebre y Alcanar y otras ciudades como València harán lo propio.
No sólo hay ayudas públicas: cuando entra en juego el CCS
Cuando se produce una catástrofe natural, ya sea una inundación, lluvias torrenciales o un terremoto, entra en juego el Consorcio de Compensación de Seguros, un organismo dependiente del Ministerio de Asuntos Económicos y Tranformación Digital que se encarga de indemnizar a toda persona que, previamente a lo sucedido, tenía contratado un seguro privado. Tal y como explicó a infoLibre, "en España, las aseguradoras privadas se ocupan de los riesgos 'estándar' y el CCS de los riesgos 'extraordinarios', que están relacionados en la propia legislación de seguros", como por ejemplo inundaciones, tornados, terremotos o erupciones volcánicas. "Se podría decir", explicó el organismo, "que cuando el asegurado sufre daños en su persona o en sus bienes por un riesgo extraordinario, el CCS 'sustituye' a su aseguradora privada y se ocupa de gestionar la indemnización".
Una nevada producida por la borrasca Gloria cubrió el norte de Castellón. En la imagen, Morella. | EFE
Lo hacen, explicaron, enviando un equipo de peritos para hacer un reconocimiento de urgencia de las zonas dañadas para que hagan una estimación de los daños y de lo que costará. El CCS ha confirmado a infoLibre que, por ahora, no han informado de cuánto costará reparar los efectos de Gloria aunque, no obstante, el organismo ya se encuentra en la fase de obtener esos datos.
Según la información remitida a este diario por la institución, en septiembre, cuando pasó la DANA, se recibieron más de 59.000 solicitudes de indemnización. Y la mayoría llegaron de Murcia: la comunidad envió casi 30.000 solicitudes. Y ya se han abonado "bastantes", según la Delegación del Gobierno en la Región.
Crisis climática y fenómenos extremos cada vez más frecuentes
Según predice Rubén del Campo, portavoz de Aemet, este fin de semana persistirán las lluvias. Pero en la parte "opuesta" de la Península y con bastante menos intensidad. Y esto no es fruto de la simple casualidad. Al contrario, tiene una explicación. Lo extraño, añade, es que un temporal como Gloria haya tenido lugar en pleno invierno. "Estos temporales tan intensos suelen tener lugar en otoño. En esa época el aire frío llega y se encuentra con un Mediterráneo muy cálido. Ese contraste favorece la aparición de tormentas", dice. Pero también tiene que ver con la orografía de la zona. "En esa zona hay sistemas montañosos muy cerca del mar que a veces hacen de parapeto y anclan las nubes haciendo que llueva durante varios días", añade.
Por tanto, que ocurra lo que ha ocurrido durante esta semana es normal. "Es una constante de nuestro clima", explica. El problema es que estos fenómenos extremos son cada vez más frecuentes. Y ahí la culpable es la crisis climática. "Ahora estos temporales son más frecuentes y se producen fuera de su época habitual, que es el otoño. En los últimos nueve meses hemos tenido tres temporales muy intensos: uno en Semana Santa, otro en septiembre y otro ahora", recuerda. "Tres temporales tan seguidos y tan adversos indica algo. Quizá tengamos que acostumbrarnos a que la frecuencia esté en aumento", añade.
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Greenpeace quiso advertir este jueves sobre lo mismo. "El derretimiento de los hielos del planeta y el calentamiento de los océanos están generando una subida del nivel del mar y una sobrecarga de energía, que se descarga en forma de temporales cada vez más violentos y que penetran más en la costa provocando, junto a otros factores, mayores daños", indicaron a través de un comunicado recogido por Europa Press. En el caso del Mediterráneo, añadió la organización, el aumento de la temperatura, entre otros factores, permite que los temporales de invierno estén siendo más intensos y recurrentes, agravándose el impacto en zonas habitadas como, por ejemplo, la Comunitat Valenciana, donde el 74% del litoral ya está urbanizado.
Por eso, tal y como informó Europa Press, geólogos e ingenieros de caminos, canales y puertos han reclamado cambios en la planificación del litoral para evitar o minimizar los efectos de temporales. Porque zonas como la Delta del Ebro, que este miércoles desapareció por la crecida del mar, corren peligro.
El antes y el después del Delta del Ebro tras el paso del Gloria. | EFE
Gloria ya ha abandonado el litoral mediterráneo. Este jueves, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) confirmó que la inestabilidad comenzó a desplazarse desde el noreste peninsular al suroeste. No obstante, las lluvias que azotarán esa zona durante este fin de semana ya no serán consecuencia de la misma borrasca. Y tampoco serán tan intensas, tal y como informó Aemet a infoLibre. La noticia, por tanto, continuará estando en las comunidades de Baleares, Cataluña, la Comunitat Valenciana, Murcia y Andalucía,las zonas más afectadas por el temporal que, desde el domingo, ha dejado 13 fallecidos y cuatro personas desaparecidas.