Telediario - 8 horas - 08/12/15
Los informativos de TVE se han visto obligados en este martes festivo, ausente de grandes noticias, a dedicar parte de su apertura al debate en Atresmedia. La verdad es que la dirección lo tenía difícil: obviar el asunto, omnipresente en redes sociales y medios de comunicación, era volver la espalda a la realidad; destacar las informaciones sobre él era asumir la negligencia de no haber optado a realizar un espacio similar en la televisión pública, tal y como reclamaban sus trabajadores y una buena parte de la sociedad.
TVE vuelve al bipartidismo en los telediarios
Ante este auténtico dilema, el TD1 ha optado por "envolver" la patata caliente dentro del bloque electoral que ha abierto el informativo: primero –siguiendo fielmente las pautas de la Junta Electoral– el PP con un Mariano Rajoy argumentando "estamos mejor", mientras se destacaba que "en esta campaña el PP elige actos menos multitudinarios, para acercarse más a la gente y escuchar sus opiniones", afirmación que podría ser creíble, pero que también podría deberse a que, a continuación, y en el espacio dedicado al PSOE, Pedro Sánchez apareciera en una tribuna mitineando ante una muchedumbre de fieles (de cifras no hablamos, pues al tratarse de imágenes suministradas por los partidos las cámaras solo captan los planos más favorables).
Sin embargo, tras PP y PSOE, TVE se sintió obligada a a destacar una actualidad "marcada por el debate" –dijo la presentadora– y dar paso a impresiones de los partidos sobre ganadores y perdedores. Eso sí, a continuación recogió las quejas de Herzog (UPyD) y Garzón (IU-UP) por haber no haber sido incluidos en la convocatoria. Ambos sí estarán en la realizada por TVE para este miércoles, o quizás sería más riguroso decir jueves, ya que la mayor parte del tiempo previsto corresponderá a la madrugada de ese día. Una ubicación horaria que se une al retraso en la emisión de La 2 Noticias, y demuestra a las claras donde le gustaría a la dirección situar la información de la cadena pública: lo más escondida posible para paliar las denuncias y críticas por manipulación, y otras malas prácticas, recibidas desde que el PP situase en los puestos de dirección a sus peones.
¿Queda alguna duda sobre la necesidad imperiosa de unos medios públicos de comunicación independientes del poder político? ¿Soportará la ciudadanía, tras el 20-D que el deterioro de credibilidad, y la ausencia de pluralismo siga presidiendo RTVE?