Yolanda Díaz asegura que Sumar será "la llave para abrir una nueva década progresista" porque su fuerza es "imparable", pese a que todavía quedan muchas incógnitas por despejar sobre sus planes. El proyecto de la vicepresidenta segunda no es, teóricamente, una plataforma electoral, y Díaz tampoco ha desvelado si se presentará como candidata a las próximas elecciones generales, aunque fuentes de su entorno no dudan que la decisión ya está tomada.
Díaz siempre ha defendido que el papel de los partidos en Sumar debe ser secundario, pero lo cierto es que el sistema de representación parlamentaria en España obliga a tejer una red de candidaturas provinciales e implica una organización territorial que involucra, directamente, a los partidos. Una red de la que Yolanda Díaz carece y que tendría que desplegar en un tiempo récord si realmente aspira a ofrecer una propuesta electoral alternativa a la de organizaciones más clásicas como Izquierda Unida o Podemos, que sí que cuentan ya con esa implantación en la mayor parte del territorio.
Los comunes de Ada Colau parecen dispuestos a ceder a Díaz sus cuadros orgánicos en Cataluña. Algunos dirigentes de la formación llevan meses involucrados en la puesta en marcha de Sumar. Es el caso del ministro de Universidades, Joan Subirats, que es miembro del equipo relator del proceso de escucha, encargado de elaborar las conclusiones del proyecto. En este grupo también está Josep Vendrell, jefe de Gabinete de la vicepresidenta, su hombre fuerte en las negociaciones de mayor calado político, es también exdiputado de este espacio e histórico de ICV. Y Rodrigo Amirola, asesor de Díaz, fue jefe de gabinete de Jéssica Albiach, presidenta de En Comú Podem.
La Izquierda Unida de Alberto Garzón también quiere colaborar con Sumar, pero sin renunciar a sus siglas. IU reclama a Díaz la celebración de unas "primarias proporcionales, con censo específico y por circunscripciones” de cara a las generales. La formación quiere constituir una mesa conjunta de partidos que apuesten por participar en el proceso de confluencia de Sumar. El papel del diputado de la formación y líder del PCE Enrique Santiago, persona cercana a la vicepresidenta, podría ser decisivo, si bien hasta ahora se ha mantenido al margen de la puesta en marcha de Sumar. Asimismo, la fuerza de IU bebe del municipalismo y de algunos territorios como Andalucía, pero a nivel autonómico tienen menor peso que otras formaciones como Podemos.
Aunque Díaz no quiere abrir esta pantalla y trata de esquivar el debate sobre la estructura orgánica de Sumar, aludiendo a que la ciudadanía no quiere hablar de "fórmulas jurídicas”, una idea en la que trabaja su equipo es la de crear una suerte de paraguas que cobije a formaciones políticas diversas, donde esté Podemos pero también algunas de las confluencias que formaron parte de la marca Unidas Podemos en el pasado, como Compromís o Más País. Sin embargo, ninguna de estas tres formaciones está dispuesta a diluirse en Sumar ni tienen intención de delegar en una superestructura estatal la decisión sobre su representación institucional.
Sintonía de Podemos en Cataluña, Asturias, Extremadura y Euskadi
La vicepresidenta segunda asegura que su relación con los partidos políticos es excelente, a pesar de las evidentes tensiones con la cúpula de Podemos, que se reivindica como el "motor" del espacio. Díaz defiende que en los actos de Sumar siempre se avisa a la militancia y a los cargos de la formación morada y se cuenta con ellos para la organización de los actos. Sin embargo, voces de Podemos aseguran que su papel es "mínimo" y que sus cargos son 'fieles' a la actual dirección, con Ione Belarra a la cabeza.
Lo cierto es que hay algunos territorios en los que Díaz cuenta con apoyos explícitos. Es el caso de Asturias, donde Covadonga Tomé es la persona designada por Podemos para competir el próximo mes de mayo. Tomé pertenece al sector crítico de la formación enfrentado a la dirección que encabeza la diputada nacional Sofía Castañón. Tomé defiende la manera de hacer política de Díaz frente a la de la dirección de Podemos. "Yolanda Díaz a nivel estatal prioriza el programa y los objetivos de transformación", señaló recientemente, al tiempo que pidió a su formación dar más peso al "para qué" en lugar del "para quién" y así evitar "la senda de achicamiento del espacio con egos, expulsiones y aislamiento político".
También exhibe sintonía con Díaz Pilar Garrido, coordinadora general de Podemos en Euskadi, que aseguró que llevaba "mucho tiempo trabajando con discreción" con la vicepresidenta segunda para ayudar "a tejer" nuevas alianzas de cara a "rescatar" a más formaciones y a personas de la sociedad civil. Garrido también aseguró que en Euskadi "a diferencia de otros territorios, sí se dan las condiciones ideales para crear sinergias entre un proceso de construcción propio y el que está llevando a cabo Yolanda Díaz".
Ver másColau asegura que el próximo Gobierno será "más fuerte" con Díaz como primera presidenta
La coordinadora de Podemos en Extremadura, Irene de Miguel, defiende sin ambages que el futuro de la izquierda está en manos de Yolanda Díaz. Es más, la dirigente autonómica ha llegado a defender que su formación debe integrarse dentro de Sumar, un extremo que rechaza Belarra. Hace dos meses, tras la visita de Díaz a Extremadura, la líder de Podemos en Extremadura aseguró que tenía "mucho que aportar" a un nuevo proyecto de país.
València, Murcia, Andalucía y Castilla y León cierran filas con Belarra
Con todo, el camino de Díaz en el resto de territorios no parece fácil. Las direcciones de la Comunitat Valenciana (Pilar Lima), Murcia (Javier Sánchez Serna), Andalucía (Martina Velarde) y Castilla y León (Pablo Fernández) pertenecen al núcleo duro del partido y cierran filas con la estrategia de Podemos. Lima es una persona muy cercana al antiguo secretario general, al igual que Velarde, mientras que Sánchez Serna y Fernández son coportavoces del partido a nivel nacional.
Otros líderes territoriales como Borja San Ramón, coordinador de Podemos en Gali++cia, Jesús Santos (Madrid), Maru Díaz (Aragón), Laura Fuentes (Canarias), Antonia Jover (Baleares), José Luis Gascón (Castilla La Mancha), Aránzazu Carrero (La Rioja), Begoña Alfaro (Navarra), evitan tomar partido: algunos han participado en los actos de Sumar y defendido a Díaz por su labor como ministra, pero también ponen el valor el papel de Belarra y evitan cualquier enfrentamiento con la dirección de su organización.
Yolanda Díaz asegura que Sumar será "la llave para abrir una nueva década progresista" porque su fuerza es "imparable", pese a que todavía quedan muchas incógnitas por despejar sobre sus planes. El proyecto de la vicepresidenta segunda no es, teóricamente, una plataforma electoral, y Díaz tampoco ha desvelado si se presentará como candidata a las próximas elecciones generales, aunque fuentes de su entorno no dudan que la decisión ya está tomada.