La sociedad Savial SL, fundada en 1993 por Esperanza Aguirre y por su marido, adquirió en 2006 y 2007 acciones con cotización en Bolsa por valor de 3.079.421 euros. Así consta en documentos depositados por Savial SL en el Registro Mercantil de Madrid, a los que ha tenido acceso infoLibre. Desde su creación, la compañía ha recibido más de cuatro millones de euros en subvenciones públicas, en su inmensa mayoría procedentes de los fondos que la Unión Europea otorga a explotaciones agrícolas y ganaderas.
Parte de esas acciones las adquirió gracias a préstamos concedidos por el BSCH y por la "caja de Cataluña", según consta en las memorias de la empresa de 2006 y 2007. En dichos documentos no queda claro si esa entidad financiera es Caixa Catalunya –ahora una filial del BBVA– o La Caixa. Resulta muy llamativa la financiación concedida por los bancos a Savial SL para invertir en Bolsa, ya que la compañía tenía desde 2005 fondos propios negativos, una situación que obligaba a reequilibrar el capital o a disolver la empresa. El marido de Aguirre y administrador único de la sociedad, Fernando Ramírez de Haro, no hizo ninguna de las dos cosas. Pero ello no fue obstáculo para que los bancos financiaran generosamente a Savial SL, que en 2011 llegó a declarar deudas con entidades de crédito por importe de 6,88 millones de euros.
Este periódico intentó sin éxito conocer la versión sobre estos hechos de Esperanza Aguirre, quien en aquellos años ya era presidenta de la Comunidad de Madrid, cargo que ocupó entre noviembre de 2003 y septiembre de 2012. Cuando infoLibre desveló en mayo de 2015 que Savial SL se había embolsado millonarias subvenciones de la UE, la dirigente del PP declaró que había donado a su marido las participaciones que tenía en la compañía. Dicha supuesta donación se produjo en 2005. Aguirre no ha mostrado, ni entonces ni ahora, ningún documento que respalde su versión.
infoLibre también contactó con portavoces del Banco Santander –heredero del BSCH–, del BBVA –que absorbió a Caixa Catalunya– y de La Caixa. Todos ellos declinaron hacer declaraciones con el argumento de que no facilitan "información sobre clientes". Fuentes no oficiales de la antigua Caixa Catalunya y de La Caixa insistieron en que ellas no eran la "caja de Cataluña" a la que se refiere Savial SL en sus memorias.
Las cuentas de Savial
Savial SL fue constituida en 1993 con un capital social de 3.005 euros, que es el que mantiene en la actualidad. Su sede social está en un palacete en el centro de Madrid donde residen Esperanza Aguirre y su marido. El objeto social de la empresa es la explotación agrícola y ganadera; de hecho, es dueña de importantes latifundios en Ávila y Guadalajara. La sociedad fue creada por tres personas: Fernando Ramírez de Haro, nombrado administrador único y que suscribió el 51% de las participaciones; Aguirre, que en aquel momento era concejal en el Ayuntamiento de Madrid y que se quedó con el 39% del capital; y un cuñado de la dirigente del PP, Juan Ramírez de Haro (fallecido en 2009), que recibió el 10% de las participaciones.
En 2005, cuando Aguirre dice que donó su parte de Savial SL, la empresa entró en fondos propios negativos, que se situaron en -116.750 euros. El nivel de fondos propios determina la solvencia de una empresa y, por ello, la ley obliga a reequilibrar la situación patrimonial o a disolver la compañía. En aquel momento estaba vigente la Ley 2/1995, de 23 de marzo, de Sociedades de Responsabilidad Limitada, que en su artículo 104.1.e) establecía lo siguiente: “La sociedad de responsabilidad limitada se disolverá por consecuencia de pérdidas que dejen reducido el patrimonio contable a menos de la mitad del capital social, a no ser que éste se reduzca o se aumente en la medida suficiente”.
El problema en Savial SL no sólo era el desequilibrio patrimonial. Ese año 2005 declaró oficialmente unas pérdidas de 139.228 euros, las mayores hasta aquel momento en la historia de la sociedad. Pero no era una situación nueva: en tres de los cuatro años anteriores también había sufrido pérdidas. La situación ha ido empeorando con el tiempo, hasta el punto de que al cierre de 2014 las pérdidas acumuladas oficialmente por la compañía ascendían a 1,78 millones de euros.
Al menos desde 2002, el principal banco financiador de Savial SL era la "caja de Cataluña". En 2005, la entidad financiera catalana asumía la mayor parte de la deuda a largo plazo de la empresa creada por el matrimonio Ramírez de Haro-Aguirre, que al final de dicho ejercicio superaba los dos millones de euros. La sociedad declaró aquel año un importe neto de su cifra de negocios de 602.736 euros.
Esa era la situación oficial de Savial SL cuando se inició el ejercicio 2006: había perdido dinero en cuatro de los cinco últimos años, acumulaba una deuda importante, su capital era de sólo 3.005 euros y tenía la obligación legal de reequilibrar su patrimonio o disolverse. En lugar de cumplir con la ley, el marido de Aguirre lo que hizo fue ampliar sus deudas financieras en casi dos millones de euros e invertir importantes cantidades en Bolsa.
La compra de las acciones
En la memoria de la compañía correspondiente a 2006, Savial SL detalla un importante incremento en sus inversiones financieras: "Ha habido un aumento por la compra de acciones con cotización en bolsa por valor de 1.979.421,19 euros", se lee en el documento, depositado en su día en el Registro Mercantil de Madrid. Esa inversión se recoge también en el balance abreviado, puesto que las inmovilizaciones financieras pasan de 422.450 euros en 2005 a 2.401.871 euros a finales de 2006. La diferencia es, al céntimo, el valor que la compañía concede a sus inversiones en Bolsa.
El marido de Aguirre no se preocupó aquel año por reequilibrar el patrimonio de la sociedad, pese al millonario préstamo recibido. De hecho, Savial SL siguió con fondos propios negativos, que se situaron en -111.444 euros. Y declaró unos magros beneficios de 5.305 euros.
En 2007, Fernando Ramírez de Haro ahondó en su estrategia. En la memoria de Savial SL correspondiente a aquel ejercicio se puede leer lo siguiente en el capítulo de inversiones financieras: "Ha habido un aumento por la compra de acciones con cotización en bolsa por valor de 3.079.421,19 euros". Es decir, la empresa compró acciones por 1,1 millones de euros. Se produjo el consiguiente aumento de las inmovilizaciones financieras, que se situaron en 3.501.871 euros.
Aquel año tuvo lugar además un cambio en la principal entidad financiadora de Savial SL. En el capítulo de deudas ya no aparece la "caja de Cataluña", sino el Banco Santander Central Hispano (BSCH), con quien la empresa declara tener préstamos "con valor residual superior a cinco años" por valor de tres millones de euros.
La compañía continuó con fondos propios negativos, que en 2007 ascendieron a -101.669 euros. Los beneficios se incrementaron ligeramente hasta alcanzar los 9.775 euros. Una cantidad ciertamente raquítica si se tiene en cuenta que los ingresos de Savial SL en 2007 superaron el millón de euros, sumando la actividad ganadera y agrícola propia de la sociedad y las subvenciones públicas recibidas.
Al año siguiente, 2008, el marido de Aguirre decidió que lo mejor era no presentar las cuentas en el Registro Mercantil de Madrid, a pesar de que es una obligación legal de toda sociedad. Así estuvo durante siete años, tal y como desveló infoLibre. En 2016, tras la denuncia de este periódico, presentó de golpe las cuentas correspondientes a 2012, 2013 y 2014, poniéndose así al día respecto a la obligación legal de depositar sus balances contables en el Registro Mercantil.
Las actividades del marido de Aguirre
Esperanza Aguirre, que dejó la presidencia del PP de Madrid cercada por los escándalos de sus más estrechos colaboradores, siempre ha presumido de que ella jamás será imputada por corrupta. Su desparpajo al hablar sobre ciertos asuntos de corrupción –llegó a afirmar que había destapado el caso Gürtel– se convierte sin embargo en mutismo a la hora de hablar de los negocios y las actividades de su marido. Dirigentes de su partido están convencidos de que ese es precisamente el gran talón de Aquiles de Aguirre.
Como desveló infoLibre, Fernando Ramírez de Haro no solo es empresario ganadero. Al menos en 2014 también trabajó como lobista para la empresa Herrero y Asociados (H&A), una de las principales agencias españolas de servicios de gestión de la propiedad industrial e intelectual. Su tarifa como lobista: una comisión del 10% sobre la facturación conseguida gracias a sus gestiones. Parte de las empresas contactadas por el esposo de Aguirre dependían directa o indirectamente de la Comunidad de Madrid o habían recibido importantes adjudicaciones del Gobierno madrileño.
El contacto de Ramírez de Haro en H&A es José Miguel Sagnier –a quien sus amigos conocen como Rufo–, que es socio y director de Relaciones Institucionales de la empresa. Este periódico comprobó que, al menos en una ocasión, la dirigente del PP ayudó a Sagnier: fue ella quien lo puso en contacto con José Antonio Sánchez, entonces director general de Telemadrid. Directivos de H&A se entrevistaron con Sánchez para ofrecerle los servicios de su agencia. Al conocerse este asunto y ser preguntada por los periodistas, en mayo de 2015, Aguirre aseguró que no tenía "ninguna" relación con H&A, pero evitó explicar si había ayudado a esa compañía a contactar con clientes.
Y luego está el asunto de lo que, con la terminología de la propia Aguirre, habría que denominar las "mamandurrias" millonarias. Antes de que este periódico informase sobre las subvenciones recibidas por las empresas de su esposo, la portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid se había mostrado muy crítica con quienes perciben ayudas públicas. Entre sus frases más recordadas se encuentra una que pronunció en julio de 2012: “Los subsidios, subvenciones y mamandurrias tienen que acabarse”.
Pues bien, sólo en el periodo que va de 2006 a 2014, las dos principales sociedades administradas por Fernando Ramírez de Haro se embolsaron 2,76 millones de euros en subvenciones comunitarias. Ello supone una media anual de 306.789 euros. En esos nueve años, Savial SL ingresó en subvenciones procedentes de la UE un total de 1.822.323 euros, mientras que la sociedad civil Ganadera Bornos SC se quedó con otros 938.782 euros.
Esas cantidades son sólo una parte del total de subvenciones públicas percibidas por las dos empresas. En el caso de Savial SL, por ejemplo, el dinero público que entró en su caja supera los cuatro millones de euros desde que fue creada en 1993.
Y hay más: además de administrar dos sociedades, Fernando Ramírez de Haro emite en ocasiones facturas como persona física. Por ejemplo, cuando vende ganado del que es propietario. Y lo mismo ocurre con diversos latifundios: la mayoría están a nombre de las dos sociedades, pero también hay determinadas propiedades en las que el titular es el marido de Aguirre. En concreto, posee cuatro grandes fincas rústicas en Pozos de Hinojo (Salamanca) y Gallegos de Sobrinos (Ávila), que tienen una extensión total de 2.250 hectáreas.
La Política Agraria Común (PAC) concede subvenciones tanto a las sociedades como a las personas físicas. Pero sólo se difunden las primeras, después de que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea decidiese en 2010 que la obligación de publicar los nombres de los beneficiarios de las ayudas no era aplicable a las personas físicas. ¿Cuánto ha recibido el marido de Aguirre por este concepto? Es un misterio.
Un enigma casi tan grande como saber qué opina ahora Aguirre sobre esas "mamandurrias" que han fluido de forma constante, desde hace décadas, hacia el palacete del centro de Madrid donde vive con Fernando Ramírez de Haro y donde tienen su sede las empresas que administra su marido.
La sociedad Savial SL, fundada en 1993 por Esperanza Aguirre y por su marido, adquirió en 2006 y 2007 acciones con cotización en Bolsa por valor de 3.079.421 euros. Así consta en documentos depositados por Savial SL en el Registro Mercantil de Madrid, a los que ha tenido acceso infoLibre. Desde su creación, la compañía ha recibido más de cuatro millones de euros en subvenciones públicas, en su inmensa mayoría procedentes de los fondos que la Unión Europea otorga a explotaciones agrícolas y ganaderas.