Más de 322.000 euros. Hasta ahí llegaron las pérdidas contabilizadas en 2004 por Navilot SL, propiedad de Josep Cusí, durante años armador del velero Bribón entre cuyos tripulantes se contaba Juan Carlos I y hoy en la cresta de la ola informativa tras revelar The Telegraph que fue a través de esa compañía como se pagó más de la mitad de la luna de miel de Felipe VI y su esposa.
A Cusí se le considera el amigo leal por definición al rey emérito, hoy en sus horas más bajas desde la abdicación de junio de 2014 tras decidir la Fiscalía investigarle penalmente por las supuestas comisiones derivadas del AVE a la Meca y la supuesta tenencia de fondos opacos en paraísos fiscales y en Suiza. Y desde luego, esas pérdidas de 322.017 euros después de impuestos computadas por la mercantil Navilot SL podrían interpretarse como un auténtico signo de estrechísima cercanía o de simbiosis personal entre Cusí y Juan Carlos de Borbón. Porque, siempre de acuerdo con la información publicada por el citado rotativo británico, la factura completa de aquella luna de miel ascendió a 467.000 dólares. Y de ese total, Navilot desembolsó casi el 60%: exactamente, 269.000 dólares, que al cambio representaban al cierre de 2004 algo más de 197.000 euros. Es decir, casi dos tercios de las pérdidas declaradas por Navilot al acabar ese año coinciden con el importe desembolsado por la propia mercantil para la luna de miel.
Las cuentas depositadas en el Registro Mercantil no permiten saber en qué concepto anotó aquel gasto de 197.000 euros Navilot SL. ¿Fue una liberalidad como las que asumen empresas de muy distinto tenor tratando el gasto como una inversión para el futuro? ¿Fue un simple regalo de bodas que Cusí endosó a una de sus empresas en lugar de aportarlo de sus cuentas personales? ¿Encerraba por el contrario aquella operación una especie de pago por cuenta del rey emérito susceptible según los expertos de considerarse en todo caso un crédito que debería quedar anotado en el apartado de “deudores”? Nada en la memoria abreviada autoriza a extraer conclusiones, aseguran los dos expertos con quienes infoLibre consultó este lunes. Las cuentas de Navilot SL para 2004 no están disponibles online. Pero sí lo están las de 2005, que recogen también los datos pormenorizados del ejercicio anterior. En 2005, la SL pasó ya a tener un beneficio neto después de impuestos de 205.445 euros. En 2004, las pérdidas quedaron traducidas en que Navilot SL se ahorró 137.000 euros en impuestos.
El viaje que Cusí y el rey emérito pagaron a razón de 57% el primero y 43% el segundo llevó a los recién casados por una larga y secreta ruta entre mayo y agosto de 2004. Como se supo más tarde, Felipe y Letizia visitaron lugares como Camboya, las islas Fiji, Samoa, México o EEUU.
Durante su estancia en las islas Fiji, en el lejano Pacífico Sur, los actuales reyes dejaron una nota de agradecimiento: “¡Qué paraíso tan maravilloso y remoto! Hemos tenido una estancia espléndida, lejos del estrés diario y muy bien tratados por un personal siempre sonriente... ¡Ha sido un lugar muy especial para nuestra luna de miel!”. Según The Telegraph, el coste de las cinco noches en el exclusivo resort donde allí se alojaron subió a 33.000 dólares.
Por qué dedicó al principesco viaje de novios tal cantidad una compañía con fines lucrativos que terminó cerrando el año con pérdidas constituye una incógnita. Este periódico no pudo contactar con Navilot SL. Carente de empleados, la empresa tiene el siguiente objeto social según el Registro Mercantil: la “organización y participación de todo tipo de eventos deportivos” así como el “alquiler al por mayor y al detalle de material deportivo”.
Del 'Bribón' al yate de lujo 'Somni'
Desde luego, todos los datos conocidos indican que la relación entre Juan Carlos I y Josep Cusí desborda la de una cortesía amistosa pero vacua y superficial. Navilot SL no solo pagó la luna de miel del entonces heredero al trono. Durante años, la empresa figuró como dueña de la serie de veleros bautizados como BribónBribón. Y según múltiples informaciones de la prensa especializada en la Casa Real, especialmente la mallorquina, Cusí puso a disposición de los Borbón un yate de lujo al menos a partir de 2011: el Somni. Cada verano, y siempre según la secuencia de noticias publicadas, Cusí le ha seguido prestando el Somni a la familia real. La última noticia localizada por este periódico lleva fecha de 19 de julio de 2019. “Lo destacado –se lee en el texto del diario mallorquín Última Hora– además de la llegada de la madre del rey, es que el Aifos 500 Aifos 500con el que Felipe VI participará en la Copa del Rey de Vela Mapfre ya se encuentra amarrada en la base naval, a pocos metros del Norge, el barco real del rey de Noruega. También se encuentra en el agua, la Somni, lancha con la que la reina Sofía y los reyes navegan por aguas de Mallorca”.
Ver másEl Gobierno pide que sea Casa Real quien responda a las preguntas sobre la financiación del viaje de novios de los reyes
De la existencia del yate Somni, “el nuevo trono acuático de Felipe VI” como tituló en 2014 expansion.com, han informado con reiteración la prensa local, la del corazón y la deportiva.
Según publicó Vanitatis en 2014, el coste de adquirir una lancha de similares características a la Somni, con más de quince metros de eslora, puede ascender al medio millón de euros, siempre dependiendo del equipamiento. El yate que Cusí presta cada verano a la Familia Real “cuenta con tres cabinas y dos aseos, con una capacidad total para diez personas”. “Además –añadía la información– es posible alquilar uno similar durante una semana en los muelles de Palma, pero previo desembolso de un importe superior a los 13.000 euros por los siete días, sin contar con el combustible”.
Este periódico preguntó este lunes a la Zarzuela si la Casa del Rey abona algún alquiler por el préstamo del Somni. No hubo respuesta.
Más de 322.000 euros. Hasta ahí llegaron las pérdidas contabilizadas en 2004 por Navilot SL, propiedad de Josep Cusí, durante años armador del velero Bribón entre cuyos tripulantes se contaba Juan Carlos I y hoy en la cresta de la ola informativa tras revelar The Telegraph que fue a través de esa compañía como se pagó más de la mitad de la luna de miel de Felipe VI y su esposa.