El PSOE cierra filas en torno a su secretario de Organización, José Luis Ábalos, frente a la ofensiva política y mediática de la derecha que reclama su cabeza por haber hablado en Barajas con la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, que tiene prohibido entrar en territorio español en virtud de sanciones aprobadas por la Unión Europea. La dirección socialista otorga completa validez a las explicaciones del ministro, según el cual se limitó a saludar la número dos del Gobierno de Nicolás Maduro y a dejar constancia de que no podía entrar en España y considera el foco que “la derecha política y mediática” ha puesto sobre este asunto un ejemplo más de la “agenda ficticia” con la que trata de empañar los primeros días del nuevo Gobierno “convirtiendo en escándalos” asuntos “ qye no son tales”. Ábalos ha sido objeto de un “cuestionamiento injustificado”.
El PP presenta una batería de preguntas en el Congreso para que Ábalos explique su encuentro con la número dos de Maduro
En nombre de los socialistas tomó la palabra la presidenta del partido, Cristina Nerbona, tras la primera reunión que celebra el plenario de la Ejecutiva Federal desde la formación del Gobierno. Narbona consideró “exhaustivas” las explicaciones de Ábalos sen torno a un asunto que, en su opinión, sólo interesa a la derecha y no a los ciudadanos. Y acusó a la derecha no aceptar el resultado de las elecciones en una actitud que le recuerda, dijo, la actitud del PP tras la victoria de José Luis Rodríguez Zapatero en 2004, cuando acusaban a los nuevos ministros de sentarse “encima de 200 cadáveres”, en referencia a los atentados del 11 de marzo en Madrid en vísperas de las elecciones que dieron el triunfo al PSOE.
El PSOE cierra filas en torno a su secretario de Organización, José Luis Ábalos, frente a la ofensiva política y mediática de la derecha que reclama su cabeza por haber hablado en Barajas con la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, que tiene prohibido entrar en territorio español en virtud de sanciones aprobadas por la Unión Europea. La dirección socialista otorga completa validez a las explicaciones del ministro, según el cual se limitó a saludar la número dos del Gobierno de Nicolás Maduro y a dejar constancia de que no podía entrar en España y considera el foco que “la derecha política y mediática” ha puesto sobre este asunto un ejemplo más de la “agenda ficticia” con la que trata de empañar los primeros días del nuevo Gobierno “convirtiendo en escándalos” asuntos “ qye no son tales”. Ábalos ha sido objeto de un “cuestionamiento injustificado”.