Los que quieran lanzarse a la carrera de la sucesión de Tomás Gómez no tendrán mucho tiempo para pensárselo. En sólo diez días tendrán que recoger los 1.500 avales necesarios para pasar a la siguiente fase, la campaña por el voto de los militantes. No habrá más plazo.
El sábado pasado, la gestora del Partido Socialista de Madrid (PSM) cogió por sorpresa a muchos militantes y cuadros al anunciar que convocaba el congreso regional extraordinario para el 31 de julio. Esto es, antes de las elecciones generales, cuando se esperaba que la cita sería después. Con este gesto, Pedro Sánchez se asegura el control de una federación importante (la tercera en número de afiliados, tras Andalucía y Valencia) y siempre convulsa antes de su examen en las urnas. Y lo hará, previsiblemente, a través de Sara Hernández, la recién investida alcaldesa de Getafe, que cuenta con todas las bendiciones de Ferraz y de los poderes del partido en Madrid. Ella logró recuperar para el PSM el bastón de mando de una de las ciudades del cinturón rojo (173.000 habitantes), que pasó a manos del PP en 2011. No es diputada autonómica.
Este lunes, el presidente de la gestora, el diputado nacional Rafael Simancas, explicó la mecánica del congreso regional y las razones que llevan a esta convocatoria antes de las vacaciones de verano en una breve rueda de prensa en la sede del PSM, en la plaza del Callao de la capital.
Desde mañana martes, 30 de junio, hasta el 10 de julio los candidatos a la Secretaría General tendrán de plazo para recoger los avales del 10% del censo de militantes. Esto es, en torno a 1.500 de un listado de 15.000. Para el 14, se habrán resuelto los recursos y se procederá a la proclamación de los aspirantes. Entonces comenzará oficialmente la campaña. El 26, todos los afiliados podrán votar de forma secreta y en urna a su líder en las agrupaciones socialistas –será la primera vez en que podrán hacerlo de forma directa– y elegirán a sus delegados para el cónclave,y el 31 se celebrará el congreso regional extraordinario, que procederá a elegir a la nueva dirección del PSM y los demás órganos colegiados (la Comisión de Garantías, los miembros del Comité Regional y la delegación del PSM al Comité Federal del PSOE). No obstante, cuando pasen las generales y tenga lugar el congreso federal del PSOE, se sucederán en cascada todos los cónclaves ordinarios de los territorios. También en el PSM.
Oficialmente, la gestora no se pronuncia sobre los posibles aspirantes. Ni sobre cuál es el perfil idóneo. Simancas, no obstante, reconoció que parece "razonable" que si hay algún miembro de la gestora que pretenda concurrir, abandone su puesto en el órgano provisional. Es el caso de Sara Hernández, a quien la ejecutiva de Sánchez incorporó a la gestora tras la destitución fulminante de Tomás Gómez como secretario general, el pasado 11 de febrero. Hernández fue la telonera en el mitin de apertura de la campaña del 24-M en Madrid, en el que participaron Ángel Gabilondo, Antonio Miguel Carmona y el propio Pedro Sánchez.
No hay "adelanto", según el PSM
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Simancas negó que se hubiera producido un "adelanto" de la convocatoria del congreso. Recordó que Ferraz dio un mandato de seis meses a la gestora para llevar a cabo, básicamente, cuatro cometidos –confeccionar una candidatura "idónea" para la Comunidad de Madrid, que encabezó el exministro Ángel Gabilondo, dirigir una campaña "eficaz", pilotar la constitución de los grupos socialistas en la Asamblea y en los ayuntamientos y convocar nuevo congreso–, y ese mandato vencía el 11 de agosto. Aunque se podría haber prorrogado. Sí subrayó que la decisión se ha tomado de forma "coordinada" con la ejecutiva federal. Ahora la gestora se erige en comité organizador del cónclave, su función es que este se desarrolle "en las mejores condiciones" y quedará disuelta en cuanto la nueva dirección regional asuma las riendas del PSM, el 31 de julio.
Simancas justificó la convocatoria exprés porque la ciudadanía madrileña necesita "cuanto antes" un PSM "renovado, más grande, fuerte, abierto, participativo y útil en su defensa de los derechos y libertades". El diputado presumió de los resultados conseguidos por el partido el 24-M, ya que consiguió incluso un escaño más que en 2011 (de 36 a 37 parlamentarios) y fue la "única federación" que, de hecho, creció en las pasadas elecciones.
Entre los que no serán con toda seguridad candidatos está el portavoz en la Asamblea, Ángel Gabilondo, porque no es militante del partido. Quien se está planteando competir contra Hernández es Juan Segovia, diputado regional, secretario general del PSM en el distrito de Fuencarral-El Pardo de la capital y uno de los dirigentes más jóvenes.
Los que quieran lanzarse a la carrera de la sucesión de Tomás Gómez no tendrán mucho tiempo para pensárselo. En sólo diez días tendrán que recoger los 1.500 avales necesarios para pasar a la siguiente fase, la campaña por el voto de los militantes. No habrá más plazo.