El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, volvió este sábado a la Comunidad Valenciana, antiguo granero de votos del Partido Popular, para esbozar en un acto de precampaña los que serán los ejes del programa con el que concurrirá a las elecciones generales del 20 de diciembre. Pero ya lo avisó: "Los programas son muy importantes. Pero también son importantes los partidos que sustentan esos programas y las personas". Porque, a su juicio, "se necesita equipo, gente preparada". Y el suyo, a diferencia de otros que no mencionó pero que estaban en la cabeza de todo el auditorio –Ciudadanos y, en menor medida, Podemos– "no es un partido de amigos, es un partido de 800.000 militantes". Eso, por el lado del partido. Porque también hubo para los líderes, para sus rivales.
Rajoy sostuvo ante un auditorio muy entregado que "gobernar no es nada fácil". Que "lo difícil" es decidir, "decidir que España sea rescatada o no", como a él le ocurrió nada más llegar al Gobierno tras ganar por mayoría absoluta en las generales de hace cuatro años. "Gobernar no es improvisar. Al Gobierno se llega aprendido. No puedes llegar de por ahí y colocarte en el Gobierno. Conviene tener un currículum. Haber sido, al menos, concejal", dijo. Esta fue la forma de concentrar en una sola frase la que va a ser la estrategia de los conservadores de cara a las generales del 20-D.
Frente a candidatos más jóvenes y, por tanto, con menos experiencia pública, el PP va a presentar a un Rajoy que ha gobernado en unos años económicamente muy complicados para España y, pese a ello, ha obtenido resultados. Está en juego, sostiene la dirección del partido, que lo que se ha hecho desaparezca, que demos marcha atrás.
Experiencia y gestión frente a candidatos que no han gestionado nada, insisten. Porque, en palabras del presidente-candidato "España no está para experimentos. Que los experimentos los hagan otros en su casa. Pero no con los intereses de todos los españoles".
Pocas medidas concretas
El presidente del Gobierno y del PP esbozó de forma muy general su programa. La intención de su equipo de campaña es la de hacerlo a partir de este domingo en actos sectoriales por varias ciudades y pueblos de España.
Una de sus medidas más concretas tiene que ver con los impuestos. El presidente del PP señaló que cuando llegó al Gobierno el tipo marginal mínimo del IRPF estaba en España en un 24% y durante esta legislatura se ha bajado al 19%. Para el futuro, descenderá al 17%. Al mismo tiempo, el tipo máximo pasará del 45% en estos momentos al 43%.
De los siete bloques en los que los conservadores han dividido su oferta electoral: empleo, cuidado de las personas, economía, defensa de la unidad de España, mejora de la educación, mejora de la administración pública y regeneración de la vida pública, fue este último uno en los que más se detuvo. No en vano, estaba en Valencia, uno de los territorios donde más a sus anchas campó la trama Gürtel.
Corrupción: "Jamás"
"Pondré todo mi empeño en que algunas de las cosas que hemos visto en los últimos años no se vuelvan a repetir jamás en nuestro país". "Jamás", insistió. Hablaba de corrupción.
“Todas estas medidas se pueden aplicar. En muchas de ellas ya hemos dado pasos hacia delante. No nos vamos a sacar conejos de la chistera y buscar titulares que sirvan para un día aunque haya gente que se quiera instalar todo el día en el titular. Tenemos avales y resultados”, añadió antes de recurrir a una frase que está presente en casi todos sus actos de partido. La de que el PP “no es un invento de hace un cuarto de hora, no nació en un plató de TV. Es un partido grande, con historia, con representación en todos los municipios de España”.
"Las decisiones conviene pensarlas bien"
El PP prepara una campaña para “destapar” a Ciudadanos y frenar su ascenso en las generales
El presidente del Gobierno acudirá el lunes a París a participar en la Cumbre del Clima. En esta cita tendrá la oportunidad de conversar con el presidente francés, François Hollande, sobre las posibilidades que tiene España de colaborar contra el yihadismo tras los atentados del 13-N. A día de hoy, nadie niega en el Gobierno que ambos vayan a tener una conversación. Lo que no está claro es que vaya a ser concluyente. "Vamos a seguir luchando contra el terrorismo, pero las decisiones conviene pensarlas bien: hablando con todos los aliados, esperando que se apruebe un plan, viendo los compromisos que puede adquirir cada uno...", subrayó.
A esa hora, miles de personas se manifestaban en diferentes ciudades de España con el lema "No en nuestro nombre" en contra de intervenciones militares en Siria e Irak.
“El peor enemigo que tiene hoy el ser humano, la vida, la libertad y los derechos es el terrorismo”, sostuvo el presidente, antes de repasar todos los escenarios internacionales en los que España ya está trabajando en coaliciones contra este fenómeno. “Ahí estamos luchando ya desde hace tiempo contra el terrorismo y vamos a seguir luchando contra el terrorismo, pero las decisiones conviene pensarlas bien [...] No estamos hablando de más dinero en autopistas o sanidad, estamos hablando de la vida de la gente, la libertad y sus derechos”.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, volvió este sábado a la Comunidad Valenciana, antiguo granero de votos del Partido Popular, para esbozar en un acto de precampaña los que serán los ejes del programa con el que concurrirá a las elecciones generales del 20 de diciembre. Pero ya lo avisó: "Los programas son muy importantes. Pero también son importantes los partidos que sustentan esos programas y las personas". Porque, a su juicio, "se necesita equipo, gente preparada". Y el suyo, a diferencia de otros que no mencionó pero que estaban en la cabeza de todo el auditorio –Ciudadanos y, en menor medida, Podemos– "no es un partido de amigos, es un partido de 800.000 militantes". Eso, por el lado del partido. Porque también hubo para los líderes, para sus rivales.