"No voy a entrar en ese proceso ahora en nada". Con esta frase, Susana Díaz se descartaba definitivamente este sábado como rival de Pedro Sánchez en las primarias abiertas para elegir al candidato a la Moncloa. Ella no estará en la carrera, y todo apunta a que el secretario general no tendrá adversarios y será proclamado como cabeza de lista sin necesidad de abrir las urnas, el 21 de junio.
El Comité Federal de hoy estaba convocado para dos tareas fundamentales: fijar las directrices de la política de pactos y aprobar el calendario de las elecciones primarias. Díaz ya venía diciendo en los últimos días que no le interesaba el proceso. De hecho, cuando se reunió a solas con Sánchez en Ferraz el pasado jueves, él le sacó el tema a relucir para contarle la planificación prevista y ella le cortó, alegando que no es en eso en lo que están los ciudadanos.
Este sábado, Díaz, a la salida del Comité Federal –intervino ante sus compañeros tras el secretario general y al cabo de unas cuantas palabras, se marhó, no aguantó hasta el final–, respondió a los periodistas, preguntada por las primarias, que no tienen ninguna intención de "entrar en ese proceso ahora". "La prioridad es lo que está pasando la gente", el conformar ayuntamientos y gobiernos autonómicos. "Ese tema no me interesa. Estoy en los problemas de la gente. Yo estoy en lo que tengo que estar en estos momentos", remachó.
La pregunta de la prensa era lógica porque Sánchez, en su intervención en abierto, había oficializado su voluntad de concurrir a las elecciones abiertas: "Os anuncio con humildad, con responsabilidad, pero con ilusión, con mucha ilusión, que tengo decidido concurrir a ese proceso de primarias para ser el próximo presidente del Gobierno socialista". Todo el Comité correspondió con un aplauso, al que Díaz se sumó con cierta desgana unos segundos más tarde que el resto.
Si hay más oponentes, a votación el 26 de julio
El calendario de las primarias fue aprobado por la ejecutiva de Sánchez, reunida previamente al Comité Federal. Este lunes, 1 de junio, arranca el plazo de presentación de las precandidaturas. La recogida de avales durará menos de 12 días: comenzará el viernes 5 de junio y concluirá el martes 16 a las 12 de la mañana. Ese mismo día se procederá a la verificación de las firmas y a la proclamación provisional de los candidatos. Entre el 17 y 20 de junio, se deberán resolver los recursos que se eleven. Y el 21 de junio, domingo, será la proclamación definitiva. Si Sánchez, que este sábado confirmó que se presenta a la carrera, no tiene rival o ninguno de sus oponentes recoge los respaldos suficientes (el 5% del censo, unas 9.000 firmas), será investido en esa jornada como aspirante a la Moncloa.
Si en cambio sí tiene adversarios, se abrirá el censo a la ciudadanía. Tendrán para apuntarse desde el 21 de junio al 10 de julio. Justo después empezará la campaña (11-25 de julio). Y la jornada de votación se celebrará, como estaba previsto desde el año pasado, el 26 de julio. La proclamación definitiva de los resultados sería el 31 de julio.
Díaz, a puerta cerrada, y volvió a reiterar su opinión sobre los pactos: que hay que actuar con "prudencia", sin que el PSOE renuncie a lo que es y a sus valores. "No debemos dejar que nadie nos arrastre y no nos reconozca la ciudadanía". La presidenta andaluza, según fuentes de su entorno, recordó que la España de hoy no es la de 1979, cuando Alfonso Guerra por el PSOE y Santiago Carrillo por el PCE firmaron pactos de unidad de la izquierda. Eso no vale ya, porque el escenario es "multipolar", y por eso hay que gestionarlo "con cabeza". "Si nos dejamos arrastrar, si nos desnaturalizamos, si entendemos que en vez de una oportunidad es oportunismo, pues entonces los ciudadanos son sabios, lo saben automáticamente, la gente lo huele".
"Somos los únicos que podemos poner sobre la mesa una hoja de ruta razonable, coherente en todo el territorio español. Nadie puede garantizar, como nosotros, un discurso coherente en todos los territorios de nuestro país", abundó. Para Díaz, el PSOE ha de "saber interpretar la voluntad de los ciudadanos en cada momento", saber dónde le han puesto "en el Gobierno", donde le han dicho que dialogue, dónde le han dicho que pacte y deje a otras fuerzas y dónde le han dicho que debe "corregir y aprender" y volver a intentarlo dentro de cuatro años".
Por su parte, el asturiano Javier Fernández reclamó a los suyos que no se dejen llevar por las prisas. "Sumar sin reflexionar es un error. Que no nos pueda la ansiedad", advirtió. El presidente del Principado puso como ejemplo lo que ocurrió en la Transición, donde todos los partidos tuvieron que renunciar a algo en pos del consenso. "En el 79 todos renunciamos a algo, ahora Pablo Iglesias debería renunciar al populismo", comentó el asturiano, según fuentes socialistas. Fernández calificó de "excelentes" los resultados del PSOE, pero llamó a ser "fríos" y a darse cuenta de que sus "esperanzas de hoy" de tocar el poder de varios Gobiernos autonómicos gracias a los acuerdos con Podemos pueden llevarle a su "derrota" dentro de unos meses, en las generales. "Hoy debemos pactar con los que nos quieren eliminar mañana. Alguien que no se va a doblegar, que seguirá con la misma retórica, desplazando el eje izquierda-derecha por el de arribas-abajo y ciudadanía-casta", argumentó.
Madina rebaja el optimismo
Pero la voz más a la contra de la línea oficial recayó en Eduardo Madina, que ya compitió en el congreso del año pasado contra Sánchez y perdió. Era la primera vez que intervenía en un Comité Federal en esta nueva etapa. El diputado vasco, en una conversación informal con periodistas, relató que ante sus compañeros se alejó de la "euforia", y del análisis más optimista. Recordó que el PSOE ha perdido casi 700.000 votos respecto a 2011, y cayó del 27,79% de entonces –la que era su peor marca– al 25,02% de los sufragios. El peor suelo en unas municipales. No se puede comparar el 24-M con las europeas, como hace la ejecutiva de Sánchez, porque la participación el domingo pasado, del 64,93%, fue casi 20 puntos mayor (45,84% hace un año).
Además, Madina cree que el partido tiene un severo problema en las grandes ciudades. Allí ha sufrido un batacazo: tercera fuerza en Madrid, Valencia o Zaragoza, y quinta en Barcelona. Y existe la percepción de que "Pablo Iglesias ha ganado", dada la victoria de Manuela Carmena, Ada Colau o las mareas atlánticas en Galicia. "El PSOE ha de recuperar la vocación de ser el primer partido de España", no sólo de la izquierda, incidió, de cara a las generales de finales de año.
Sobre los pactos, el parlamentario vasco criticó a Sánchez por haber marcado líneas rojas (ni con el PP ni con Bildu). "Yo no marco líneas rojas, sino contenidos claros". Insistió en todo momento en que el PSOE ha de trenzar pactos que sean entendibles por los ciudadanos, sobre objetivos y programas "claros" que giren en torno al PSOE y a sus propuestas. "Algo que aprendí de Patxi López", el único lehendakari socialista (2009-2012), y ahora en la ejecutiva federal. En resumidas cuentas, que se ha de mantener un "discurso coherente" en el conjunto del país.
Talegón amenaza con irse del PSOE
Madina apuntó que se había sentido "acompañado" en su discurso menos "triunfalista" por lo que habían comentado antes que él en el Comité Federal los presidentes de Andalucía y Asturias, Susana Díaz y Javier Fernández, y en cierta medida por el próximo jefe del Ejecutivo extremeño, Guillermo Fernández Vara.
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Sánchez no contestó a su rival en 2014. "No se puede decir a la dirección que no tenga lo que no ha exhibido nadie", apuntaron fuentes del entorno del secretario general, negando así la "euforia" por los resultados y defendiendo que sólo traslada el estado de ánimo del partido, que es de "optimismo con moderación". El PSOE, añadieron, está "mejor electoral e institucionalmente que hace una semana", como se verá cuando se constituyan ayuntamientos y Gobiernos autonómicos.
Claro que la voz más discordante de todas fue la de Beatriz Talegón, militante de Izquierda Socialista. La exdirigente juvenil amenazó con abandonar el PSOE y avisó de que un grupo de jóvenes descontentos con Ferraz están haciendo movimientos para crear un nuevo partido que se estrene para los generales. Talegón desveló que Podemos le pidió, a través de Jorge Verstrynge, incorporarse a sus filas. Pero no tiene intención de hacerlo, sino de crear una formación que sirva de "puente" hacia Podemos y Equo. También criticó que no se haya asumido la pérdida de votos y que sin los de Pablo Iglesias no sería posible gobernar en muchos territorios. "No sé por qué seguimos aquí, nos vamos a ir más pronto que tarde". Talegón se quejó en Twitter de que nadie aplaudió en el Comité Federal su desahogo.
"No voy a entrar en ese proceso ahora en nada". Con esta frase, Susana Díaz se descartaba definitivamente este sábado como rival de Pedro Sánchez en las primarias abiertas para elegir al candidato a la Moncloa. Ella no estará en la carrera, y todo apunta a que el secretario general no tendrá adversarios y será proclamado como cabeza de lista sin necesidad de abrir las urnas, el 21 de junio.