Tras un curso escolar 2019/2020 que se vio interrumpido en marzo por la crisis del coronavirus poniendo a prueba al sector y dejando al descubierto las carencias de un campo poco preparado para la educación a distancia, el curso 2020/2021 está a punto de arrancar con todavía muchas asignaturas pendientes. Y con pocas certezas. Porque los rebrotes hacen imposible, a día de hoy, poder garantizar que la enseñanza vaya a ser presencial rebrotes .
A dos semanas para que comience el curso lectivo, la vuelta al cole ya se enfrenta a una huelga de profesores, con la Comunidad de Madrid como punta de lanza, mientras las diferentes autonomías –no todas al mismo ritmo– intentan definir sus estrategias. Las comunidades esperan a la convocatoria de una Conferencia de Presidentes que fije unos criterios mínimos para dar por cerrados sus respectivos protocolos. Se espera algo similar a lo que hizo el Ministerio de Sanidad hace casi una semana, cuando la Conferencia Interterritorial de Sanidad fijó unas bases para frenar los contagios que fueron desde la prohibición de fumar en las calles cuando sea imposible guardar las distancias de seguridad al cierre de los establecimientos de ocio nocturno.
La cita, según ha avanzado esta misma semana la ministra de Política Territorial y Función Pública, Carolina Darias, será a "finales de agosto" o "principios de septiembre". En la última Conferencia de Presidentes, celebrada el pasado 31 de julio en San Millán de la Cogolla (La Rioja), Pedro Sánchez se prometió celebrar este mes de agosto un nuevo encuentro centrado en las medidas para el inicio del curso escolar.
Como anticipo, este miércoles, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, instó a los consejeros y consejeras de Sanidad, en un nuevo encuentro en el seno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, a adoptar un nuevo paquete de medidas de salud pública homogéneas de cara al inicio del nuevo curso escolar y también para abordar la temporada de la gripe. En esta reunión se acordó, además, convocar una conferencia sectorial conjunta de Educación y Sanidad el próximo jueves, 27 de agosto.
Si Sánchez no convoca a los presidentes autonómicos a finales de agosto y la deja para septiembre, esta reunión podría coincidir con la primera huelga de profesorado contra un Gobierno autonómico en el contexto del arranque del curso escolar. CCOO, UGT, CGT y STEM han acordado convocar inicialmente huelga en los diferentes días de comienzo del curso lectivo en cada una de las etapas educativas y, además, otra jornada de huelga conjunta de todas las enseñanzas. Las protestas arrancarían el 4 de septiembre en las escuelas infantiles y culminarían, en principio, el 10 de septiembre con ese acto conjunto para todos los niveles.
La "inacción" de Ayuso
Estos sindicatos enmarcan sus acciones en el contexto de "inacción" del Gobierno de la Comunidad de Madrid y de su Consejería de Educación frente al inicio del curso. "Esta gravísima situación pone en peligro a la comunidad educativa y, por tanto, a todo el conjunto de la sociedad madrileña", defienden en un comunicado conjunto.
Las "exigencias fundamentales" de estas movilizaciones van desde la bajada de las ratios de alumnado por aula, desdoblando por grupos para poder respetar las distancias de seguridad, al aumento de las plantillas del profesorado pasando por la dotación en todos los centros de personal de enfermería y de medidas y recursos para la corrección de la brecha digital.
La convocatoria no ha sentado nada bien en la Puerta del Sol, sede del Gobierno regional. La presidenta, Isabel Díaz Ayuso (Partido Popular), pidió "responsabilidad" en un mensaje difundido desde su perfil de Twitter:
"Estamos ante la situación más difícil en décadas. Todas las comunidades autónomas pensamos cómo hacer lo mejor para nuestros alumnos y profesores. Presentaremos próximamente nuestra estrategia, sin embargo ya tenemos la huelga pertinente. Pedimos responsabilidad", puede leerse.
En una línea similar, el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero lamentó que se llame a la huelga cuando todavía no se conocen las medidas a adoptar. "Primero hay que conocer exactamente cuáles van a ser las condiciones de apertura de los colegios", declaró.
Los conservadores, que se opusieron a las dos últimas prórrogas del estado de alarma y que pidieron al Ejecutivo central que dejara la gestión de la pandemia en manos de las comunidades cuanto antes sostienen ahora que los padres, los alumnos y la comunidad educativa no pueden esperar más al Gobierno. Necesitan, señalan, saber cómo se va a organizar la vuelta a las aulas. Si Sánchez no convoca la conferencia de presidentes tal y como se comprometió a finales de julio, volverá a llegar tarde y esta cita está abocada al "fracaso". Como ocurre con la Sanidad, las competencias en materia de Educación están transferidas a las comunidades autónomas.
¿Huelga en otras comunidades?
Mientras que el escenario de una huelga a nivel estatal no parece estar, de momento, sobre la mesa, los sindicatos no descartan que lo anunciado para la Comunidad de Madrid tenga réplica en otras comunidades autónomas.
Como el grueso de las comunidades autónomas gobernadas por el PP, Andalucía reclama a Sánchez unos criterios homogéneos. "Tenemos que tener esa Conferencia [de Presidentes] para que los colegios empecemos todos a la vez, en la misma fecha, y todos con los mismos criterios", sostuvo el presidente, Juanma Moreno. A su juicio, si cada comunidad toma decisiones distintas "al final se rompe la igualdad entre los españoles y se rompe un criterio que es fundamental de coordinación, de planificación y de impulso que tiene que mantener el Gobierno de la Nación", informa Europa Press.
Sin concretar medidas, Moreno subrayó que el Ejecutivo andaluz lleva todo el mes de agosto en conversaciones y videoconferencias con la Consejería de Educación, con los directores de los centros y con algunas entidades "trabajando para ver cómo" se puede hacer la vuelta a las aulas.
Mientras, la Consejería de Educación de Castilla y León explicó que el protocolo en el que se trabaja ante casos de covid-19 en los centros educativos "no es un 'plan B' como tal" para el conjunto de los colegios e institutos, sino que contempla actuar "en función de las necesidades de cada uno". El Ejecutivo que presidente Alfonso Fernández Mañueco apuesta por la presencialidad educativa para el nuevo curso, incluso a partir de tercero de Educación Secundaria Obligatoria (ESO), etapa educativa para la que el Ministerio de Educación daba la opción de la semipresencialidad.
En el caso de Galicia, el presidente de la Xunta en funciones, Alberto Núñez Feijóo, propuso este miércoles que el uso de la mascarilla sea obligatorio en las clases por parte de los profesores y los alumnos a partir de los seis años. En la rueda de prensa posterior a la reunión del comité clínico, Feijóo avanzó que llevará esta propuesta a la Conferencia de Presidentes sobre el inicio de la actividad escolar. "En lo que se refiere a Galicia, nos parece que, salvo que haya algún documento o estudio de investigación que acredite lo contrario, esa medida debe implantarse en el próximo curso", indicó.
Por su parte, el secretario general del PSOE de la Región de Murcia, Diego Conesa, remitió una carta abierta al presidente de la comunidad, Fernando López Miras, en la que le urge a "acordar" medidas para garantizar una "vuelta segura" a las aulas el próximo mes, informaron fuentes del partido en un comunicado. En su misiva, Conesa señala que depende de la "voluntad" de López Miras alcanzar un acuerdo que incluya un "esfuerzo presupuestario extraordinario" para impulsar actuaciones fundamentales a juicio de los socialistas, como son el aumento de la plantilla de docentes y la reducción de las ratios de alumnos.
Este diario ha informado de que la Comunidad Valenciana es la única que tiene un plan de 'vuelta al cole' consensuado con profesores y sindicatos.
Gobierno y autonomías debaten esta semana 'la vuelta al cole' apenas 10 días antes de que arranque el curso escolar
Ver más
Reparto del fondo covid-19
El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó el pasado 22 de julio la orden ministerial de Hacienda que determina el reparto del primer tramo de 6.000 millones del Fondo covid-19, dotado con un total de 16.000 millones de euros para que las comunidades autónomas financien el impacto de la pandemia y se compense la reducción de los ingresos autonómicos por la menor actividad económica. Formado por cuatro tramos, cada uno de ellos tiene en cuenta las necesidades de financiación en materia de sanidad, educación y de merma de ingresos de las regiones.
Tras ese primer tramo, las comunidades autónomas recibirán en septiembre un tramo asociado a la educación con 2.000 millones de euros. El criterio de reparto de estos recursos es en base a la población de 0 a 16 años (80%) y a la población de 17 a 24 años (20%).