El error es un fallo de carácter involuntario que se efectúa sin una intención perversa o voluntaria del sujeto. De ahí que no seamos responsables de nuestros errores y que las consecuencias negativas de ellos no se nos puedan imputar. Cometemos errores por la falta de precisión de los instrumentos que utilizamos, por alteraciones en el medio, etc. En ningún caso somos conocedores de esos problemas y por tanto tampoco lo somos de las consecuencias que provocará nuestra acción basada en esos errores. En consecuencia, error y responsabilidad son incompatibles. La responsabilidad implica conocimiento y voluntad, un acto libre y moral que será considerado positivo si desarrolla algún valor (por ejemplo la justicia) y negativo si va contra dicho valor. El error, al no depender de nuestra voluntad, no es libre y en consecuencia tampoco es moral.
Cuando el señor Rato habla de error quiere hacernos creer que con su preparación y capacidades intelectuales no sabía que el uso de las tarjetas black era ilegal e inmoralblack. O quiere hacernos creer que está arrepentido de sus actos –que sabe inmorales e ilegales–, pide perdón y asume su responsabilidad. En el momento que califica estos actos como errores y si los admitimos como tales, se exime de responsabilidad y culpa.
La entrada en la cárcel del señor Rato nos vuelve a situar en la disyuntiva en la que nos tuvieron los artífices del “milagro económico” mientras se producía. O es sincero cuando dice asumir responsabilidad por un error, dado que no es posible, es un iluso. O nos engaña con su arrepentimiento y los ilusos somos nosotros.
Ver másLa Fiscalía dice que los acusados de Bankia "ocultaron el estado real" del banco y no descarta atribuir falsedad contable
El uso del lenguaje de forma equivoca es una de las técnicas más antiguas de manipulación. Utilizado para el mercadeo y la conversión de la realidad en una masa idéntica en la que no se pueda distinguir lo real de lo ilusorio, lo justo de lo injusto, la libertad de la esclavitud, etc. En la que todos los seres humanos son considerados igualmente culpables para poder ocultar la auténtica culpabilidad de algunos. No es extraño que el señor Rato, uno de los máximos representantes de la sociedad de mercadeo recurra a estas técnicas de venta. Ni tampoco resulta extraño que al entrar en la cárcel recurra al engaño de la asunción de responsabilidad para convertirlo en un acto de soberbia, habiendo intentado hasta el último momento no entrar, nos quiere hacer creer que entra de forma voluntaria.
La entrada del señor Rato en la cárcel no representa para mí ningún acto de asunción de responsabilidad de su persona. Es un acto de aprendizaje, pues al tener una moral heterónoma solo asociará sus actos como negativos por medio de la perdida de reconocimiento social. No parecen capaces estos “grandes economistas” de reconocer que su riqueza se ha labrado sobre la miseria de muchos, su único objetivo es la acumulación personal de riqueza, la vida de los demás es una anécdota que se olvida cuando no se ve. No hay realmente para este tipo de persona un castigo en la pérdida de libertad porque para ellos la libertad no es el máximo valor al que puede aspirar un ser humano. Su máximo castigo sería hacer con ellos lo que ellos hacen con los demás: sumirlos en la miseria. Pero el sistema legal no busca prioritariamente la Justicia, busca la utilidad. ___________
Natividad Pérez es socia de infoLibre
El error es un fallo de carácter involuntario que se efectúa sin una intención perversa o voluntaria del sujeto. De ahí que no seamos responsables de nuestros errores y que las consecuencias negativas de ellos no se nos puedan imputar. Cometemos errores por la falta de precisión de los instrumentos que utilizamos, por alteraciones en el medio, etc. En ningún caso somos conocedores de esos problemas y por tanto tampoco lo somos de las consecuencias que provocará nuestra acción basada en esos errores. En consecuencia, error y responsabilidad son incompatibles. La responsabilidad implica conocimiento y voluntad, un acto libre y moral que será considerado positivo si desarrolla algún valor (por ejemplo la justicia) y negativo si va contra dicho valor. El error, al no depender de nuestra voluntad, no es libre y en consecuencia tampoco es moral.