Literatura
Harry Potter vuelve... con canas
El hijo literario de la escritora británica J. K. Rowling se ha hecho mayor. La última vez que lo vimos fue hace siete años, en las páginas que cerraban la entrega final de su saga, Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, trasladada al cine, como el resto de los libros, en una serie de películas protagonizada por Daniel Radcliffe. .
Por entonces, el audaz mago ya tenía descendientes, y ahora, a sus 34 años, regresa “con vetas blancas” en su cabello, y lo hace en el partido de la final del Mundial de Quidditch.
En un breve texto, de unas 1.500 palabras, publicado en la web para fans Pottermore, donde se pueden continuar de manera virtual las aventuras vividas por la peor pesadilla de Lord Voldemort y sus fieles amigos, Hermione Granger y Ronald Weasley, la autora revive a sus héroes literarios a través de la pluma de la reportera Rita Skeeter.
Rowling ha informado de que este es solo uno de varios textos sobre la Copa de Quidditch, que irá publicando en la web hasta el 11 de julio, y que concluirán con la final de la competición. Ginny Potter, la mujer de Harry y hermana de Ron, cubrirá como periodista ese partido, en el que se enfrentarán las selecciones de Brasil y Bulgaria.
El personaje de Skeeter, que trabaja para el diario El Profeta, firma una crónica rosa en la que da cuenta no solo de las canas de Potter, sino también de cómo este tiene ahora un corte en la mejilla que, según la informadora, podría deberse a algún tipo accidente en su trabajo como Auror para el Ministerio de Magia, donde también trabajan Ron y Hermione.
Estos, por su parte, también han envejecido, aunque ellos lo han hecho juntos, como matrimonio. El pelo de él, dice la chismosa Skeeter, ha empezado a “clarear”; y la chica, siempre formal y muy estudiosa, ostenta un importante cargo en el Departamento de Seguridad Mágica del ministerio que, comenta Skeeter, podría incluso ir a más y llevarla a un cargo de alto nivel.
Otros personajes como el torpe Neville Longbottom o la lunática Luna Lovegood, así como los hijos de los protagonistas, también aparecen mencionados en la jugosa columna de Rita Skeeter.