LA PORTADA DE MAÑANA
Ver
El Gobierno recompone las alianzas con sus socios: salva el paquete fiscal y allana el camino de los presupuestos

Estamos en el tiempo de las no-cosas

1

Albino Prada

No-Cosas

Byung-Chul Han

Taurus (2021)

Mi particular lectura de este breve ensayo de un tan mediático filósofo la resumo así: compartiendo sus fundadas prevenciones sobre el mundo digital (lo que él resume como las no—cosas) frente al mundo de lo tangible, discrepo en que lo digital esté, y acabe, saliendo victorioso.

"Nada es sólido y tangible", afirma Byung-Chul Han al comienzo de su ensayo y lo finaliza sosteniendo que "ahora las cosas están casi muertas". Pues bien, creo que para criticar aspectos sustantivos y preocupantes de lo digital no es buena cosa otorgarle tamaña victoria. Creo que las cosas, y las personas que las valoramos, nos resistimos a esa derrota. Me explicaré.

A lo largo de las páginas de este ensayo uno tiene la sensación de vivir ya dentro de un metaverso. Cada uno de nosotros apenas sería ya unos dedos para pulsar y unos ojos para ver la pantalla. Y el mundo apenas un lugar para recibir información y entretenimientos.

A eso podría llegarse en un futuro no lejano pero, de momento —y como nos recordó la pandemia— necesitamos cosas físicas como vacunas o equipos de respiración para no morir, así como personas para gestionar un gigantesco dispositivo social. Para esto, para muchas otras cosas y para todo lo digital necesitamos energía que sólo es posible con cosas como generadores, molinos, placas, turbinas, transformadores, etc. Y como tras cada sesión de entretenimiento puede sobre venir el hambre necesitamos alimentos que se producen y llegan desde todas partes del mundo. Muchas cosas. Por no hablar del tejado y la vivienda que nos acoge. Cosas.

Muchas de ellas nos colocan ante dificultades serias si no circulan (por el mar por ejemplo en gigantescos portacontenedores) en caso de una pandemia o de una guerra. Bloqueos de cosas que se pueden convertir en más letales que el big data. Y eso: en una guerra también muchas cosas (por ejemplo, armas) se ponen en primer plano.

No hablar de todo esto porque en el mundo actual estarían casi muertas me parece una concesión a los anarco capitalistas de Silicon Valley que ni ellos mismos se tomarán en serio. Por más que Amazon haga ya más negocio en la nube que moviendo millones de paquetes (cosas).

En este ensayo pareciera que ya el homo ludens habría dejado atrás al homo faber: "producimos y consumimos más información que cosas". Afirmación que no es cierta salvo en un sentido: que de forma imparable todas las cosas que necesitamos (aún) están cayendo bajo el control de datos digitalizados para su producción y distribución. O de artilugios (robots) conducidos con una mal denominada inteligencia artificial.

Que en el ocio (ficción, juegos,…), en la información o en cierto tipo de relaciones todo transcurra en el aire (aunque con cosas—aparatos desde el emisor al receptor y con energía consumida), no nos debiera hacer olvidar que en todo lo demás (y son muchas cosas como acabo de recordar) lo digital y el big data lo que hacen es gestionarlas bajo su poder (por ejemplo, publicitario). En esto acierta nuestro filósofo: "Facebook o Google son los nuevos señores feudales… en un capitalismo neoliberal de la vigilancia".

Capitalismo y poder sobre todas las cosas que necesitamos. Y en este punto modulan la resiliencia, la autodeterminación y una necesaria no subordinación social de forma más que preocupante.

Pensemos en el teléfono. De estar anclado en el lenguaje oral, en contactos de cercanía, subordinado a la relación personal se ha metamorfoseado en un ping—pong en la pantalla, en mirar, en relaciones al margen del espacio físico. Muchas personas están padeciendo consecuencias poco edificantes de todo eso.

O pongamos el sentido de la comunidad: de lo real (cerca) a lo virtual (no—lugar). En ambos casos se corroen otras cosas que nos son imprescindibles. Sobre todo en un shock social (pandemia, guerra, desabastecimientos, etc.): la capacidad de auto gestionar entre nosotros lo que estamos dejando en manos de los dueños del big data. 

Si seguimos divididos, pereceremos

Ver más

Me temo que del poder sobre las cosas es de lo que no quieren que hablemos los gurús de las no-cosas.

__________________

Albino Prada es ensayista e investigador.

No-Cosas

Más sobre este tema
>