Un total de 72.540 españoles de nacimiento en edad de trabajar han salido del país en los dos últimos años en edad de trabajar . Aunque la cifra puede considerarse mínima porque son sólo aquéllos que se han inscrito en los consulados españoles en el extranjero y aparecen registrados en el Padrón de Españoles Residentes en el Extranjero (PERE). El 65,1% de los nuevos inscritos tiene entre 16 y 64 años; es decir, han contribuido al descenso de la población activa española durante la crisis. Son la emigración del paro y el desánimo.
En cualquier caso, el país ha perdido al menos 112.347 nacidos en España en los dos últimos años, de todas las edades (o sea, incluyendo a menores y a mayores de 65), de acuerdo con los mismos registros. Y la tendencia es creciente. En 2014 la fuga aumentó un 9,3% respecto al año anterior. Si la lupa se coloca sobre los emigrantes en edad de trabajar, el alza es superior: un 11,2%.
Todas estas cifras se refieren sólo a los emigrantes nacidos en España. Excluyen a los extranjeros que, una vez nacionalizados como españoles, 344.717 personas, han vuelto a sus países de origenhan vuelto a sus países de origen en 2013 y 2014. Así, en estos momentos figuran inscritos en el Padrón de Residentes en el Extranjero un total de 2,18 millones de españoles, tanto nacionalizados como nativos. Desde 2009 ese registro ha crecido un 48%, el resultado de una doble fuga provocada por la crisis y la falta de trabajo: la de los inmigrantes que regresan a sus países de origen sumada a la de los españoles a la búsqueda del empleo que aquí no encuentran. El 33,6% de los inscritos, 733.387, son españoles nacidos en España, 100.000 más de los que se hallaban registrados en 2009.
En consecuencia, los mayores aumentos porcentuales de inscritos en el último año corresponden a países de América Latina: Ecuador (27,6%), Bolivia (23,4%) y Colombia (20,9%). Pero en términos absolutos, a excepción de Argentina (18.895 nuevos registrados), el mayor número de emigrantes corresponde a Estados Unidos (10.028 personas, un 9,7% que en 2013) y a países europeos: 9.797 se han trasladado a Reino Unido (un 12% más que en 2013), 8.453 a Francia (un 3,9% más), 8.061 a Alemania (un 6,6% más que el año anterior). A Brasil se mudaron en 2014 un total de 5.743 personas, un 4,9% más que en 2013. A Suiza, 3.769, un 3,7% más.
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Galicia, aún a la cabeza de la emigración
El Padrón de Residentes en el Extranjero también proporciona una fotografía de cómo ha sido históricamente la emigración en España. La comunidad autónoma emigrante por excelencia es Galicia. Su número de inscritos en consulados extranjeros supera a los de las comunidades más pobladas. Son casi medio millón, contando nacionalizados y nativos. Los procedentes de la Comunidad de Madrid no llegan a 320.000.
Lo mismo ocurre si se cuentan sólo los nacidos en España. Galicia sigue liderando el ránking de emigrantes, con 158.133 inscritos, seguida de Andalucía, con 100.640. Andalucía supera los 8,4 millones de habitantes; Galicia sólo tiene 2,78 millones. En el último año han abandonado España 21.772 gallegos, 27.298 catalanes y 35.014 madrileños. Cataluña suma 7,5 millones; la Comunidad de Madrid, 6,4 millones.
Un total de 72.540 españoles de nacimiento en edad de trabajar han salido del país en los dos últimos años en edad de trabajar . Aunque la cifra puede considerarse mínima porque son sólo aquéllos que se han inscrito en los consulados españoles en el extranjero y aparecen registrados en el Padrón de Españoles Residentes en el Extranjero (PERE). El 65,1% de los nuevos inscritos tiene entre 16 y 64 años; es decir, han contribuido al descenso de la población activa española durante la crisis. Son la emigración del paro y el desánimo.