El director general de la Caja de Ahorros de Navarra, Enrique Goñi, propuso en febrero de 2011 el nombre de Amancio López Seijas, propietario del grupo Hotusa y amigo de la infancia de Mariano Rajoy, como consejero independiente de Banca Cívica, resultado de la fusión de esa entidad con Cajasol, Cajacanarias y Caja Burgos, luego absorbida por Caixabank.
Fuentes financieras consultadas por infoLibre explican que fue Moncloa quien sugirió el nombre del empresario gallego, con quien el presidente del Gobierno compartió pupitre en el colegio de los jesuitas de León. Enrique Goñi no quiso hacer declaraciones a este periódico, pero fuentes del entorno del exdirector de Caja Navarra lo niegan: “López Seijas encajaba en el perfil que queríamos para los consejeros independientes: un empresario de implantación nacional e internacional, sin connotaciones regionales, dueño de su propia compañía, no un directivo, y discreto, nada mediático”. Además, atribuyen a Goñi –ahora responsable de las empresas participadas de Criteria Caixaholding– una relación personal “de hace muchos años” con el dueño del grupo Hotusa.
López Seijas gestiona el Gran Hotel La Toja donde Mariano Rajoy celebró la Nochevieja. Un vídeo que circuló por las redes sociales las Navidades pasadas muestra al empresario y al presidente bailando la canción de Raphael Mi gran noche. Moncloa no ha querido aclarar a este periódico quién pagó la cena y si Rajoy y su mujer, Elvira Fernández, pasaron la noche en el hotel de cinco estrellas. Pero, según publicó El Mundo, la pareja fue vista en la recepción del establecimiento la mañana de Año Nuevo.
Además de en el consejo de Banca Cívica, Amancio López Seijas entró en el de la empresa semipública AENAempresa semipública AENA, tras ser avalado por la ministra de Fomento, Ana Pastor, de la que también es amigo. Pastor, a su vez, integra el círculo íntimo de Mariano Rajoy, junto con su marido, José Benito Suárez, presidente de la Autoridad Portuaria de Marín (Pontevedra).
“No es un empresario de relaciones y de pelotazo”
El consejo de administración de Banca Cívica aprobó el nombramiento de López Seijas junto con los de Rafael Cortés Elvira, ex secretario de Estado para el Deporte; Pedro Pérez, ex secretario de Estado de Economía; Ángel Corcóstegui, ex director general del BBVA, y Marta de la Cuesta, vocal del Consejo Estatal de Responsabilidad Social de las Empresas. Todos ellos como consejeros independientes. El consejo de administración de Banca Cívica al completo está imputado por manipular las cuentas de la entidad para su salida a Bolsa.
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La Audiencia Nacional ha obligado al juez Eloy Velasco a reabrir la causa, que había archivado previamente dos veces.
Banca Cívica necesitó una ayuda del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) de 977 millones de euros y salió a Bolsa en una operación que parecía calcada de la seguida por Bankia sólo dos días antes, el 19 de julio de 2011. Y que, como la de aquella, ha terminado en los tribunales.
“López Seijas participó mucho y se responsabilizó mucho en su trabajo como consejero independiente de Banca Cívica”, revela el entorno de Enrique Goñi, que alaba su papel como defensor de los minoritarios. También insiste en desvincular el nombramiento del empresario con su cercanía personal a Mariano Rajoy: “No es un empresario de relaciones y de pelotazo, sino todo lo contrario, un hombre hecho a sí mismo que ha construido un imperio empezando desde cero”.
El director general de la Caja de Ahorros de Navarra, Enrique Goñi, propuso en febrero de 2011 el nombre de Amancio López Seijas, propietario del grupo Hotusa y amigo de la infancia de Mariano Rajoy, como consejero independiente de Banca Cívica, resultado de la fusión de esa entidad con Cajasol, Cajacanarias y Caja Burgos, luego absorbida por Caixabank.