La Fórmula 1 arranca en Madrid con el pufo de casi 300 millones de Valencia en el retrovisor

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Para unos, como el presidente de la Cámara de Comercio, Ángel Asensio, es una “gran oportunidad" y para otros, la amenaza de un nuevo “pufo”. La Fórmula 1 llegará a Madrid a partir de 2026 para quedarse 10 años y no será al Jarama. La presidenta de la comunidad, Isabel Díaz Ayuso, el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, y el presidente y CEO de la Fórmula 1, Stefano Domenicali, han oficializado este martes el desembarco en un acto celebrado en Ifema, después de que el promotor del campeonato, Liberty Media, diera el visto bueno. De acuerdo al anteproyecto, pendiente de homologación por parte de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), el circuito tendrá una longitud de 5,474 km, 20 curvas, ocho pasos elevados, dos túneles, cuatro puntos de adelantamiento, una curva espectacular, una vuelta de clasificación de 1 minuto y 32 segundos y picos de velocidad de hasta 300 kilómetros por hora.

El trazado utilizaría los viales de Ifema, tanto del recinto actual como los futuros de la parcela de Valdebebas, junto a 1,5 km de vía pública, según consta en un comunicado del recinto madrileño, en el que se avanzan además “espacios inéditos” en la F1, como paddock cubierto y climatizado. Confían en que 140.000 espectadores vean la carrera en el quinto año. Y no sólo eso.

Martínez-Almeida ha cifrado en 8.000 los puestos de trabajo que generará el arribo del Gran Premio de Fórmula 1 a la capital, cantidad que Ayuso ha elevado luego a los 10.000 puestos de trabajo directos, “más todos los indirectos, a través de nuevas cadenas de restauración, hoteles y una cantidad enorme de planes de ocio, cultura, compras y espectáculo”. El evento “va a dejar en la región más de 450 millones de euros cada año”, ha aseverado, tras sacar pecho por la entrada de Madrid en “el prestigioso club de los 23: las 23 ciudades que tienen la fortuna y la responsabilidad de recibir y organizarlo".

Desde las administraciones implicadas han manifestado que no habrá inversión de dinero público, sino una promoción a través del consorcio de Ifema, y que será el organizador privado el que asuma los riesgos. Pero la oposición desconfía con la vista puesta en Valencia, ciudad que acogió cinco grandes premios entre 2008 y 2012, en un empeño del ex president de la Generalitat, Francisco Camps, quien también garantizó que el coste para las arcas públicas sería cero y el Ejecutivo valenciano acabó pagando 66 millones. Es más, tuvieron que pedir un crédito de 60 para poder materializar la construcción del circuito, a los que hubo que añadir 111 millones abonados en concepto de canon anual; la asunción de otra deuda de 44 millones ligada a Valmor, la empresa organizadora; o más de 25 en derechos televisivos que tuvo que desembolsar la desaparecida Canal Nou, según apuntan fuentes de la oposición. Al "desastre" económico hay que enlazar que en espacios del antiguo circuito por el que volaban monoplazas, se ha articulado un asentamiento de chabolas en el que la Policía Nacional ha llegado a realizar detenciones.

A Manuela Bergerot, la portavoz de Más Madrid en la Asamblea, la Fórmula 1 le “suena al pelotazo de Camps en Valencia” y no olvida que los valencianos terminaron “pagando 300 millones de euros”. En la misma línea, el líder del PSOE madrileño, Juan Lobato, cree que “es positivo para España y para Madrid” albergar el macroevento, si bien avisa de que se debe “evitar lo que el PP hizo en otras ocasiones", el "caos" y la "ruina económica”. Recuerda los "cientos de millones de los impuestos de las familias valencianas" que fueron "absolutamente desperdiciados en esa mala gestión que se hizo” allí de la competición. Desde esa perspectiva, ha adelantado que su partido “fiscalizará milimétricamente que cada euro que ponga la Comunidad de Madrid en este evento privado se haga con rigor, con total eficacia, y que no se cometan errores que, por desgracia, ya ha habido en otros territorios”.

"Va a llegar antes la Fórmula 1 a algunos barrios de Madrid que una biblioteca"

“La organización de grandes eventos en manos del PP suele acabar en casos judiciales, lo dice la evidencia empírica”, lanza Pablo Padilla, diputado de Más Madrid en la Asamblea. Y engarza: “Es evidente que las administraciones públicas van a acabar poniendo dinero porque el circuito se va a producir en Madrid, por lo que es materialmente imposible que las cuestiones de infraestructuras previas, transportes, mantenimiento de la propia calzada… todo lo que tenga que ver con la ruta en sí, no nos vaya a costar un euro. De hecho, sólo en la gala de hoy se han utilizado infraestructuras públicas, o sea, que algo de dinero nos está costando desde ya”. El acto, con más de 500 invitados, se ha desarrollado en el pabellón número dos de Ifema y ha contado con un espectáculo de luces y música electrónica. 

“No sabemos si entidades como el Real Madrid sacarán tajada, pero el trazado tiene unas implicaciones para la vida de los vecinos y es paradójico porque va a llegar antes la Fórmula 1 a algunos barrios de Madrid que una biblioteca, un colegio o un centro de salud”, hace notar Padilla. A juicio del diputado, "Ayuso y Almeida quieren un macroevento que será un simple escenario para los turistas y no están pensando ni de lejos en las necesidades de Madrid. La Fórmula 1 no lo es a día de hoy". "En cualquier caso -pespuntea- hay una promesa de que el gasto va a ser cero y tenemos las sospechas fundadas de que nos va a costar dinero”, incide. Por eso, Más Madrid ha presentado en la Asamblea una batería de medidas ligadas al trasiego del Gran Premio de Fórmula 1, entre ellas las comparecencias del consejero de Turismo, Cultura y Deporte, Mariano de Paco; la del vicepresidente del Consejo Rector de Ifema, Ángel Asensio y la de Domenicali. Formularán, asimismo, una pregunta en pleno y otra en comisión y han registrado una iniciativa en forma de proposición no de ley para garantizar la transparencia. Buscan en definitiva, “que haya mecanismos de control, mesas de seguimiento, canales abiertos con los vecinos o auditorías independientes”, resume Padilla, e incorpora un cierre irónico: “Pero mucho nos tememos que Ayuso, con su gran fiesta, no va a estar por la labor”. A su entender, la ecuación es simple, existen “dos modelos” enfrentados: “El ‘Madrid decorado’ para los turistas y los grandes eventos, y el ‘Madrid ciudad’ en el que se atienden las necesidades de la gente en vivienda, sanidad…”.

Y no se queda ahí: “También hay una perversión del concepto de deporte porque la Comunidad de Madrid ha recortado 100 millones de euros en inversión en deporte en una década, estamos a la cola, sólo gastamos 6 euros por habitante cuando Navarra gasta 60, Extremadura 20 o La Rioja 23". En ese contexto, afea que pretendan "presentar" el premio automovilístico "como una gran apuesta por el deporte". "La guinda del pastel podría estar bien, cuando hay pastel, pero es que no lo hay”, sentencia. Distingue, en definitiva y para finalizar, entre “un Madrid a dos velocidades: el de la alfombra roja para entidades privadas que vienen un fin de semana, usan a Madrid como escenario y se van; y el de quienes viven en el territorio durante todo el año y carecen aún de servicios básicos”.

Barcelona, en el punto de mira

Alrededor del novedoso acontecimiento deportivo madrileño ha surgido incluso una polémica territorial. Hasta ahora, Montmeló alojaba el Gran Premio de España y, en teoría, el Circuit de Barcelona-Catalunya es el titular hasta 2026, con lo que, al menos en su primera edición en Madrid, coexistirían ambos puntos. Ayuso en esta ocasión ha apostado por la armonía al afirmar que no quiere que "ningún proyecto de ningún tipo se vaya de ninguna región española". Domenicali no ha descartado ninguna opción: "El hecho de que estemos en Madrid no excluye que podamos quedarnos en Barcelona en el futuro", ha indicado. De momento, sólo él conoce el contenido de sus conversaciones con la Generalitat. Desde allí, el presidente Pere Aragonès, ha anotado que el Govern trabaja para "extender más allá de 2026" la celebración Gran Premio de Fórmula 1. El Ayuntamiento de Barcelona, por su parte, ha reafirmado su "compromiso" con el Circuit, que incluye hasta barajar un alza en su aportación económica actual. El tiempo dirá si la capital condal puede continuar como sede en el calendario de la Fórmula 1.

Para unos, como el presidente de la Cámara de Comercio, Ángel Asensio, es una “gran oportunidad" y para otros, la amenaza de un nuevo “pufo”. La Fórmula 1 llegará a Madrid a partir de 2026 para quedarse 10 años y no será al Jarama. La presidenta de la comunidad, Isabel Díaz Ayuso, el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, y el presidente y CEO de la Fórmula 1, Stefano Domenicali, han oficializado este martes el desembarco en un acto celebrado en Ifema, después de que el promotor del campeonato, Liberty Media, diera el visto bueno. De acuerdo al anteproyecto, pendiente de homologación por parte de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), el circuito tendrá una longitud de 5,474 km, 20 curvas, ocho pasos elevados, dos túneles, cuatro puntos de adelantamiento, una curva espectacular, una vuelta de clasificación de 1 minuto y 32 segundos y picos de velocidad de hasta 300 kilómetros por hora.

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