La petrolera estatal mexicana Pemex vuelve a intentarlo. La compañía,que controla un 9,38% de Repsol, apoyó hace dos años el intento de Luis del Rivero, entonces presidente de Sacyr, de sustituir a Antonio Brufau de la presidencia de la petrolera española.intento de Luis del Rivero No lo logró. Ahora, insiste en una pugna que dura ya meses y afecta a los grandes accionistas de Repsol como la Caixa (12,2%) o Sacyr (9,34%).
Pemex quiere que Brufau llegue a un acuerdo con el gobierno argentino de Cristina Kirchner y cierre el pleito por la expropiación de la filial YPF. Los mexicanos quieren participar en el desarrollo del gran yacimiento de gas de YPF llamado Vaca MuertaVaca Muerta (provincia de Neuquén). YPF no puede acometer el proyecto en solitario, pero las reclamaciones de Repsol por la expropiación (10.500 millones de dólares) impiden alianzas entre compañías que mantienen buenas relaciones.
En la pugna, no hay día sin rumor o anuncio. El martes, Pemex registró un documento ante el supervisor del mercado estadounidense, la SEC, en el que incluye como activo disponible para la venta un total de 53,7 millones de acciones de Repsol equivalentes a un 4,12% del capital de la petrolera española.
Más presión
La comunicación podría interpretarse como un movimiento más de presión hacia Brufau. En esos movimientos, pronto rebajados cuando no desmentidos, se incluyen los anuncios en torno a la búsqueda de aliados por parte de Pemex para dar la batalla. Entre esos aliados se menciona al millonario mexicano Carlos Slim. Carlos Slim. O la pronta convocatoria de una junta extraordinaria para echar a Brufau de la presidencia.
La pugna enre bambalinas viene de meses atrás. el 1 de junio de este año, Brufau se reunión en barcelona con Isidro Fainé (caixa) y Manuel Manrique (Sacyr). Ambos le entregaron un plan para poner paz con Argentina. El proyecto había sido cocinado a varias bandas, con encuentros de Fainé en Buenos Aires al más alto nivel e intermediación de Pemex.
El plan que Fainé y Manrique entregaron a Brufau ofrecía a Repsol participar en una empresa conjunta con la filial expropiada YPF, con un 47% de participación para explotar un área equivalente al 6% de Vaca Muerta.
Esa participación, junto con 1.500 millones de dólares en dinero o bonos que deberían ser obligatoriamente reinvertidos en el proyecto, situaban la oferta argentina para acabar con el enfrentamiento en los 5.000 millones de dólares. Plazo para firmas, dos semanas.
Envío de técnicos
Brufau llevó la oferta al consejo, envió un equipo técnico a México para que los mediadores de Pemex lo explicaran (no lo hicieron, según fuentes al tanto del proceso) y decidió finalmente, someterlo a votación. Antes de la tensa reunión preveraniega del consejo, pudo intervenir el responsable del área de exploración de Pemex. Finalmente, hubo votación. resultado: unanimidad en el rechazo al plan de acuerdo con Argentina.
Pemex, teóricamente, quedaba fuera de juego. Pero han pasado unos meses y la pugna se recrudece. Pemex podría convocar una junta extraordinaria para plantear sus demandas. Le basta un 5% del capital para ello. Pero nadie convoca una junta para perderla.
En plena pelea, el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, explicó en el Congreso, según recoge Europa Press, que Pemex no tiene "absolutamente ninguna intención" de ampliar su participación en el capital social de Repsol, sino que antes al contrario pretende incrementar su colaboración con la compañía española.
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Negativa oficial
Soria respondió así al ser preguntado por las informaciones que apuntan a que Pemex estaría buscando un acuerdo con el multimillonario Carlos Slim para incrementar su participación en Repsol, y que la petrolera mexicana estaría además sondeando las posibilidades de reemplazar a Antonio Brufau al frente de la Presidencia de la empresa.
Sin embargo, Soria negó estos movimientos y aseguró que en una reciente reunión mantenida con el secretario de Energía de México, Pedro Joaquín Coldwell, y con el director general de Pemex, Emilio Ricardo Lozoya Austin, "ninguno de los dos manifestó absolutamente ninguna intención de incrementar el porcentaje de capital que actualmente tiene en Repsol".
La petrolera estatal mexicana Pemex vuelve a intentarlo. La compañía,que controla un 9,38% de Repsol, apoyó hace dos años el intento de Luis del Rivero, entonces presidente de Sacyr, de sustituir a Antonio Brufau de la presidencia de la petrolera española.intento de Luis del Rivero No lo logró. Ahora, insiste en una pugna que dura ya meses y afecta a los grandes accionistas de Repsol como la Caixa (12,2%) o Sacyr (9,34%).