Miles de chalecos amarillos han salido este sábado de nuevo a la calle en la 19ª semana consecutiva de movilizaciones esta vez marcadas por el despliegue del Ejército y por la prohibición de acceder al centro de ciudades como París en respuesta a los graves disturbios de la semana pasada en la capital, según informa Europa Press. La jornada se ha desarrollado así con una menor participación y 37 personas detenidas, aunque también ha habido momentos de tensión en el bulevar de Estrasburgo y en la plaza de la República a última hora de la tarde durante la disolución de las concentraciones.
La Prefectura de la Policía parisina ha informado al mediodía de este sábado que al menos 31 habían sido detenidas este sábado en la capital gala. Asimismo anunció que se han realizado 2.322 controles preventivos en el centro de la capital. Sí está autorizada una de las marchas, la que dio comienzo en Denfert-Rochereau y el Sagrado Corazón, en el barrio de Montmartre.
El nuevo prefecto de la Policía de París, Didier Lallement, ha pasado revista a los agentes a primera hora de la mañana en los Campos Elíseos y ha pedido "Firmeza, profesionalidad, pero sobre todo, ¡re-ac-ti-vi-dad!". Lallement ha confirmado la activación de las "brigadas de supresión de acción violenta" y ha justificado su uso para "tener una capacidad de proyección mucho mayor". La reacción de la Policía ha sido criticada por su desproporción y en especial se ha denunciado el uso de pelotas de goma que han causado daños personales en varias ocasiones desde que comenzaron las movilizaciones.
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También la ministra de Justicia, Nicole Belloubet, ha advertido de que "no habrá piedad con los matones". "Cuando los matones te atacan, atacas. Francia está contigo", ha afirmado durante un acto con agentes antidisturbios. "Lo que quieren estas personas no es el diálogo. Su único reclamo es la violencia", ha remachado. Las autoridades han ordenado además el ya habitual cierre de estaciones de metro durante la jornada del sábado, diez en esta ocasión, que permanecerán clausuradas durante ocho horas. Una de las novedades es en cambio el despliegue por primera vez de militares de la Fuerza Antiterrorista Sentinel para proteger los edificios oficiales y los sitios sensibles.
Fuera de París hay noticias de concentraciones en ciudades como Niza, donde los manifestantes se han concentrado en la plaza de Garibaldi y han sido rápidamente cercados por la Policía y poco después los agentes han cargado para disolver la protesta. Al menos seis personas han sido detenidas y hay noticias de una mujer de 75 años herida grave por un golpe en la cabeza recibido durante la carga policial, informa la televisión BFMTV.
Las movilizaciones de los chalecos amarillos comenzaron en noviembre chalecos amarillos para protestar contra la subida de los impuestos al diésel y en diciembre alcanzaron su punto álgido con las protestas contra la represión de las manifestaciones hasta el punto que el presidente francés, Emmanuel Macron, anunció un paquete de medias económicas para mejorar las condiciones de vida de la clase media y trabajadora.
Miles de chalecos amarillos han salido este sábado de nuevo a la calle en la 19ª semana consecutiva de movilizaciones esta vez marcadas por el despliegue del Ejército y por la prohibición de acceder al centro de ciudades como París en respuesta a los graves disturbios de la semana pasada en la capital, según informa Europa Press. La jornada se ha desarrollado así con una menor participación y 37 personas detenidas, aunque también ha habido momentos de tensión en el bulevar de Estrasburgo y en la plaza de la República a última hora de la tarde durante la disolución de las concentraciones.