El exprimer ministro italiano Romano Prodi no ha logrado este viernes obtener los 504 votos necesarios para ser elegido, en la cuarta votación, como presidente de la República de Italia, por lo que habrá que celebrar una quinta votación.
El candidato presentado este viernes por el líder del Partido Democrático (PD), Pier Luigi Bersani, ha obtenido 395 votos, lo que supone que se ha quedado a más de 100 papeletas de la mayoría absoluta en la cuarta votación, en la que los parlamentarios del Pueblo de la Libertad (PDL), de Silvio Berlusconi, y de la Liga Norte no han participado, un hecho sin precedentes en la historia política italiana.
Frente a la clara derrota del segundo candidato propuesto por Bersani, la propuesta del Movimiento Cinco Estrellas (M5S), Stefano Rodotá, ha logrado aumentar el número de apoyos recibidos hasta lograr 213 votos, 51 más de los que suponen sus parlamentarios, según ha informado el diario La Repubblica.
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El partido Izquierda, Ecología y Libertad (SEL), liderado por Nichi Vendola, se ha apresurado a desmentir que sus parlamentarios hubieran votado por el candidato del M5S. "Nuestros votos están todos porque todos han votado a Prodi. Basta con contar las papeletas para ver que el problema no es la SEL sino el PD", ha afirmado Franco Giordano, miembro de la SEL.
La ministra del Interior en funciones y candidata a presidenta de Elección Cívica (SC), Annamaria Cancellieri, ha logrado obtener 78 votos en esta cuarta votación, en la que 15 papeletas han sido para el exministro Massimo D'Alema y tres para el expresidente del Senado Franco Marini.
Al término de la cuarta votación, los dirigentes del PD se han dirigido al despacho de Bersani en la Cámara de los Diputados para discutir sobre lo sucedido y analizar la estrategia a seguir. Los dirigentes del PD deben decidir ahora si continúan con Prodi como candidato en la próxima votación, que se celebrará mañana por la mañana, o si proponen un nuevo candidato.
El exprimer ministro italiano Romano Prodi no ha logrado este viernes obtener los 504 votos necesarios para ser elegido, en la cuarta votación, como presidente de la República de Italia, por lo que habrá que celebrar una quinta votación.