La factura eléctrica para un hogar en España se situó en enero en los 40,80 euros para un consumidor medio del mercado regulado (PVPC), una cifra similar a lo que costaba la luz hace dos años, cuando la economía permanecía parada por la pandemia. La ingente generación de energía renovable fue la responsable de que la electricidad haya esquivado los estragos de la guerra de Ucrania, aunque parece que solo se trata de un pequeño respiro. "El recibo de enero no se va a repetir", sentencia José Luis Sancha, especialista en energía de la Universidad Comillas ICADE.
Según los datos recopilados por este profesor, la factura del mes pasado fue la más barata desde febrero de 2021, cuando costó 40,41 euros, y fue similar a la de enero de 2020, antes de la irrupción de la covid. Estos precios corresponden a un hogar que consume al mes 200 kilovatios hora con una potencia contratada de 4 kilovatios, siempre que esté suscrito a una tarifa PVPC.
La medición del precio de la factura de la luz depende de los consumos de cada hogar y la potencia contratada, por eso el coste de la luz puede variar sobre el cálculo de José Luis Sancha. Según la organización de consumidores Facua, una casa con una potencia contratada de 4,4 kilovatios y 366 kilovatios de consumo al mes pagó en enero 67,20 euros de electricidad. En ese caso, según Facua, fue el precio de la luz más bajo en los últimos 14 años y un 50% más barato que en enero de 2022, cuando el recibo fue de 133,06 euros.
El principal responsable de hundir el precio de la luz en enero fue la energía eólica, que generó en enero 7.529 gigavatios hora de electricidad, el segundo mejor dato del histórico desde marzo de 2018 debido a la mayor instalación de molinos y al temporal de frío y viento. También funcionaron mucho mejor que en otoño las centrales hidroeléctricas, que produjeron 4.049 GWh gracias a las lluvias de diciembre y enero. A mediados de noviembre los embalses españoles estaban al 32,5% de capacidad y hoy superan el 51%.
El buen desempeño de estas tecnologías provocó llevó a que el 57,4% de la energía total generada fuese renovable el mes pasado. Ningún mes de enero había registrado un porcentaje tan alto. También se alcanzó otro récord el pasado viernes 27, cuando se generaron un total de 587 gigavatios hora de electricidad renovable, un máximo histórico.
No obstante, en los últimos tres días la fuerza del viento ha caído y las centrales de ciclo combinado que generan electricidad con la quema de gas han vuelto a funcionar con fuerza. En consecuencia, el mes de febrero comienza con precios de la luz superiores a los 100 euros por megavatio hora en el mercado diario y, de continuar a este ritmo, el coste de la electricidad repuntará lo que queda de invierno. Sancha estima que en febrero y marzo la factura –siempre para un hogar medio– será de entre 50 y 60 euros.
"Si la generación aportada por fuentes renovables se reduce, necesitaremos a los ciclos combinados, lo que presiona al alza el precio, incluso aunque el coste del gas se mantenga en el rango actual", incide Natalia Collado, investigadora del Centro de Políticas Económicas Esade.
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Otro de los factores clave que redujeron en enero la producción de energía con gas natural –y que abarató la luz– fue el aumento de la generación hidráulica en Portugal y la recuperación paulatina del parque nuclear francés. De esta forma, España en principio exportó menos electricidad a sus vecinos, aunque este dato no lo ha corroborado aún Red Eléctrica. También participó en la rebaja de enero, por supuesto, el tope al gas, que permitió que el PVPC fuese un 20% más barato que sin la presencia de este mecanismo, según los cálculos del profesor de ICADE.
Para lo que resta de año, el mercado de futuros de la energía pronostica que los precios estarán relativamente contenidos debido a la instalación de nuevas renovables, aunque todo dependerá de la guerra de Ucrania y del coste del gas natural.
El precio del Mibgas, el gas que cotiza en la península ibérica, se sitúa alrededor de los 50 euros para el próximo verano e incluso para 2024, un precio similar al que tiene en este momento. Lo mismo ocurre con los futuros de la luz. "No parece que el mercado esté preocupado", opina José Luis Sancha.
La factura eléctrica para un hogar en España se situó en enero en los 40,80 euros para un consumidor medio del mercado regulado (PVPC), una cifra similar a lo que costaba la luz hace dos años, cuando la economía permanecía parada por la pandemia. La ingente generación de energía renovable fue la responsable de que la electricidad haya esquivado los estragos de la guerra de Ucrania, aunque parece que solo se trata de un pequeño respiro. "El recibo de enero no se va a repetir", sentencia José Luis Sancha, especialista en energía de la Universidad Comillas ICADE.