Biografías falsas y obras plagiadas, los riesgos de que la IA se convierta en un autor más de Amazon

1

Escribir un libro era un proceso exigente, creativo y largo... Hasta ahora. La llegada de la inteligencia artificial parece haber cambiado -también- el panorama literario. Cualquier persona puede crear, bajo su nombre, una novela de cientos de páginas con una serie de indicaciones y en tan solo unos minutos. El problema comienza cuando estos libros dejan de ser un pasatiempo y pasan a competir en el mercado con las obras escritas por verdaderos autores. Ethan Mollick, un afamado experto en IA y profesor de la Universidad de Pensilvania, denunció el pasado 9 de marzo en la red social X que encontró en Amazon una biografía no autorizada sobre él a la venta creada con esta tecnología. Mollick la definió como "118 páginas de vaguedades repetidas y en bucle sin ningún hecho verdadero".

La plataforma de Jeff Bezos ofrece la posibilidad de que sus usuarios puedan poner a la venta sus productos. Esto permite a los escritores independientes comercializar sus obras sin que se les exija ninguna tasa y sin depender de una editorial. La autopublicación ha servido para que ciertos escritores se hayan dado a conocer, pero la inteligencia artificial está empezando a desvirtuar este espacio, conocido como Amazon Kindle Direct Publishing.

La escritora estadounidense Caitlyn Lynch criticó ya en julio de 2023 que de la lista de los 100 libros electrónicos más vendidos de romance contemporáneo para jóvenes en Amazon "solo puedo ver 19 libros legítimos reales". Ante la polémica generada por las acusaciones de Lynch, la plataforma retiró de la lista de best sellers todas las obras generadas por dicha tecnología, pero siguió permitiendo su venta.

Los límites frente al potencial

Este es un problema que lleva meses afectando al mercado anglosajón y llevó a Amazon a tomar cartas en el asunto. La plataforma de Jeff Bezos limitó a sus usuarios a autopublicar un máximo de tres libros diarios ante la gran afluencia de obras generadas por IA. Guillermo Marco, experto en inteligencia artificial, explica a infoLibre que se trata de "una medida que solamente limita, pero no afronta el problema". Marco detalla que una "verdadera solución" sería implementar algún sistema existente para la detección de texto generado por IA u obligar a los autores a catalogar aquellos textos creados a través de esta tecnología.

Las ultimas versiones de Chat GPT o Gemini (Google) permiten generar textos de miles de palabras y mantener la coherencia entre las páginas del mismo, lo que permite crear un libro. Estos avances posibilitan que la IA pueda desarrollar un argumento coherente bajo unas directrices, pero, según el experto madrileño, el plagio y la mentira siguen siendo sus dos grandes problemas. Marco indica que "como uno de sus objetivos es generar texto parecido al que le han introducido como material de entrenamiento, puede darse el caso de que aquello que generen sea casi una copia de algo que exista". Además, "todos los modelos de IA son capaces de dar la razón al usuario sobre asuntos que son radicalmente falsos", apunta el experto madrileño.

Las posibilidades y el uso de esta tecnología en el mundo literario es otro de los puntos de mayor debate. Lucía Ortiz de Zárate, investigadora en Ética y Gobernanza de la Inteligencia Artificial en la Universidad Autónoma de Madrid, subraya que "hay muchos best sellers que cuentan una historia normal incluso con muchos clichés y tienen éxito, por lo que creo que la IA podría llegar a hacer algo así". Frente a esta capacidad de crear libros comerciales, Marco alerta que el uso de esta herramienta podría generar "una mayor uniformidad en la mayoría de las piezas literarias".

Necesidad de protección

“Un clavo más en el ataúd de un sector precarizado": los artistas gráficos se rebelan contra la IA

Ver más

A pesar de los efectos que está causando esta herramienta en el mundo literario, los editores españoles no la consideran, de momento, una amenaza. Antonio María Ávila, director ejecutivo de la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE), señala a infoLibre que no ve ningún problema en que se comercialicen este tipo de libros si el resultado es bueno. Ávila defiende su publicación "siempre y cuando se indique el origen de la publicación y se respeten los derechos de propiedad intelectual de las obras".

Un argumento que también defiende Manuel González, presidente de la Asociación de Editores de Madrid, al subrayar que "al igual que se persiguen ciertos delitos, lo mismo tendría que hacer Amazon respecto al plagio de la IA". Ante estas sugerencias, la plataforma de Bezos no se plantea implementar por el momento dichos cambios y se ciñe a su política de autopublicación modificada en septiembre.

Aunque existe una falta de protección jurídica, el sector editorial se muestra esperanzado respecto a que los lectores seguirán optando por las obras escritas por personas. González señala que estos libros todavía son "un resultado bastante malo, sin espontaneidad ni creatividad". "Creemos que el sentido común se impondrá y que el lector valorará la creación humana. A lo mejor se convierte en un complemento, pero probablemente se valorará a los autores", apunta Ávila.

Escribir un libro era un proceso exigente, creativo y largo... Hasta ahora. La llegada de la inteligencia artificial parece haber cambiado -también- el panorama literario. Cualquier persona puede crear, bajo su nombre, una novela de cientos de páginas con una serie de indicaciones y en tan solo unos minutos. El problema comienza cuando estos libros dejan de ser un pasatiempo y pasan a competir en el mercado con las obras escritas por verdaderos autores. Ethan Mollick, un afamado experto en IA y profesor de la Universidad de Pensilvania, denunció el pasado 9 de marzo en la red social X que encontró en Amazon una biografía no autorizada sobre él a la venta creada con esta tecnología. Mollick la definió como "118 páginas de vaguedades repetidas y en bucle sin ningún hecho verdadero".

Más sobre este tema
>