La guerra del streaming ya no pasa por ver quién estrena qué serie o cuándo llega lo nuevo de Star Wars: la nueva batalla es lograr salir de los números rojos más que atraer suscriptores. Y Netflix ya no está sola en sus esfuerzos para intentar rentabilizar la burbuja de las plataformas de contenido bajo demanda. Disney+ se ha subido este jueves al carro de la competencia anunciando que explora "activamente" formas para acabar con las cuentas compartidas y también que incorporará el próximo noviembre tarifas con anuncios para intentar maquillar sus cifras. Lo ha hecho durante la presentación de sus resultados del segundo trimestre de 2023 que han arrojado unas pérdidas netas para la compañía de 460 millones de dólares —unos 417,5 millones de euros—.
"Se llevaba ya un tiempo desde el sector y los medios advirtiendo que había una burbuja, que se estaban haciendo series y películas por encima de nuestras posibilidades y que las plataformas tenían que rentabilizar la inversión a través de los anuncios, como las televisiones convencionales, o limitando las cuentas compartidas", explica Juanma Fernández, director de Bluper, la sección de televisión de El Español. ¿Se pincha con estos movimientos de Disney+? "La burbuja estalla por una cuestión purameramente económica después de la pandemia y la guerra de Ucrania. Ahora lo que están buscando es contentar a Wall Street y recuperar elementos a los que renunciaron como vender contenidos a terceros o recuperar la ventana de exclusividad tras los estrenos en cine", asegura Elena Neira, profesora de Estudios de Ciencias de la Información y de la Comunicación de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC).
Con este objetivo, contentar a Wall Street, Disney+ ha optado por una doble jugada. Por un lado, poner fin a la práctica más que habitual de los usuarios de compartir la cuenta. "Es una decisión lógica y que van a seguir otras porque si no el mercado actual no es sostenible", reconoce Neira. En palabras del CEO del gigante audiovisual, Bob Iger, ahora mismo se está valorando "las mejores opciones" para que los suscriptores de pago "compartan sus cuentas con amigos y familiares", pero que el objetivo sería implementar "tácticas para impulsar la monetización", según recoge The Verge.
Aunque Iger no quiso dar cifras exactas sobre cuán extendido está este problema en la casa de Mickey Mouse, según pública Variety, sí que señaló que era un número "significativo" y que acabar con esta práctica supondrá "un crecimiento de suscriptores". "Hemos establecido esto como una verdadera prioridad. Y, de hecho, creemos que aquí hay una oportunidad para ayudarnos a hacer crecer", afirmó.
¿Cuándo podrían llegar los cambios? La empresa apunta a 2024. "Disney+ es una plataforma relativamente nueva con un crecimiento inflado por la pandemia y que se comparta la cuenta les viene mal porque llevaron a cabo políticas comerciales muy agresivas", explica Neira que también señala que la decisión también responde al propio contenido del servicio: "Está pensada para ser familiar y no tiene sentido compartir la cuenta fuera de casa".
A pesar de la propia dicotomía de Disney, el ejemplo de Netflix les sirve para lanzarse a tomar esta decisión porque, a pesar de las críticas y quejas iniciales, la estrategia de acabar con las cuentas compartidas les está funcionando. En julio, durante la presentación de sus resultados del segundo trimestre, anunció que había ganado 5,9 millones de suscriptores, muy por encima de sus previsiones ya que justo coincidía con la puesta en marcha del veto en EEUU.
Por el momento se desconoce cómo aplicarán Disney, Pixar, Star Wars o Marvel esta caza al suscriptor que comparte la contraseña. En el caso de Netflix, llamó "subcuentas" a estos suscriptores extra de pago y, en el caso de España, el precio es de 5,99 euros por cada una que se cree, uno de los precios más altos si se compara con otros países europeos —en Alemania el precio es de 4,99 euros y en Portugal, de 3,99 euros—. Según ha comprobado infoLibre, a estas alturas de la partida aún hay usuarios que siguen compartiendo la cuenta con cualquier persona. Netflix, por su parte, detalla que las cuentas están pensadas para "compartirse entre personas que conviven en un mismo hogar".
El ¿fin? de compartir la cuenta
¿Y el resto de plataformas? Por el momento, ni Amazon Prime Video, Apple TV, HBO Max o Movistar+ hacen referencia a no poder dejar la contraseña a otras personas. Estas cuatro permiten la creación de múltiples perfiles en la misma cuenta y varias reproducciones simultáneas. Apple TV, que deja hasta seis perfiles, precisa que se puede tener en común con "familiares". Matiz que también hace HBO Max: "familiares directos o personas con las que conviven". En el caso de Movistar+ establece que se podrá hacer con "miembros de la familia" y, además, es la única que hace referencia a la localización ya que permite tres reproducciones simultáneas en hogar —dos si es en Movistar Lite— y solo una fuera.
No así la recién aterrizada SkyShowtime, que sí que deja claro que la cuenta no se puede compartir. En sus condiciones de uso, explica que "las personas que viven en el mismo hogar en el que usted pueden acceder a su cuenta de SkyShowtime con su permiso". Y, en el apartado de "algunos ejemplos de cosas que no debe hacer" figura: "compartir sus datos de inicio de sesión con otras personas fuera de su hogar".
¿Se subirán al carro de Netflix y Disney+ ahora que parece que está de moda no dejar compartir la cuenta? "Pensaba que HBO lo iba a hacer antes que Disney, pero lo cierto es que ahora mismo está con el frenesí del estreno de Barbie (su distribuidora, Warner Bros, es la propietaria de HBO Max), ha hecho una subida de precios muy radical y está afianzando aún Max", afirma Neira. Fernández, por su parte, señala que "dependerá mucho de su inversión": "No es lo mismo un Atresplayer o un Filmin, más pequeñas con gastos e ingresos más cuadradas, que compañías tan grandes con miles y miles de millones como Netflix o Disney. La estrategia siempre ha sido atraer al máximo de clientes para subirles la cuota y ahora han encontrado otra manera de rentabilizar la plataforma".
La publicidad llega a Disney+
Pero el plan de Disney+ no pasa sólo por perseguir las cuentas compartidas. Como también hizo Netflix el pasado otoño, la plataforma ha anunciado este jueves que a partir del próximo 1 de noviembre activará en el mercado europeo, incluyendo España, un nuevo plan con publicidad tras el previo y "exitoso lanzamiento" de esta modalidad en EEUU. Según ha explicado en un comunicado el presidente de The Walt Disney Company en Europa, Oriente Medio y África, Jan Koeppen, la llegada de los anuncios es "la siguiente etapa" en la que ofrecerán "más opciones tanto a nuestros suscriptores como a nuestros anunciantes".
En el caso de España, el precio de esta tarifa con publicidad, que se llamará Estándar con anuncios, será de 5,99 euros al mes. Un precio muy similar al de Netflix —5,49 euros/mes— y más bajo que el tiene actualmente Disney+ con publicidad en EEUU —7,99 dólares—. "Es bastante más competitivo y, por el contenido, que es familiar, es perfectamente soportable", reconoce Neira. "Son conscientes de que en EEUU están acostumbrados a pagar esas tarifas. El precio que queda en España está bastante bien porque tiene un catálogo bastante grande y es una plataforma que al tener la parte infantil hace que las familias no se echen tanto para atrás", sostiene Fernández.
¿Qué se encontrarán los usuarios que decidan apostar por esta nueva tarifa? Además de los anuncios, que dejará dos dispositivos a la vez y que no permitirá descargas, similar a lo que hace Netflix, en su caso el catálogo no estará limitado y ofrecerá todas sus series de televisión, taquillazos y originales exclusivos de sus seis marcas: Disney, Pixar, Marvel, Star Wars, National Geographic y Star. Netflix, en cambio, no tiene disponible parte de sus series y películas en su plan con anuncios por restricciones de licencias.
El movimiento tanto el de Netflix como Disney+ no pilla por sorpresa al consumidor ya que el streaming ha visto cómo poco a poco la publicidad se inyectaba en sus servicios. En España, Movistar+ y Rakuten TV incorporan anuncios antes de la reproducción de cualquiera de sus contenidos. Pero del otro lado del Atlántico esta táctica está mucho más extendida y HBO Max, Peacock, Paramount+ o Discovery+ ya cuentan con ellos.
La trampa de las nuevas tarifas de Disney+
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La llegada de este nuevo plan supondrá además cambios en sus tarifas. Si hasta el momento Disney+ contaba con una única modalidad de suscripción con un precio de 8,99 euros al mes o de 89,90 euros al año, ahora pasará a tener tres. Además del Estándar con anuncios, habrá dos más sin publicidad: Estándar — 8,99 euros al mes o 89,90 euros al año— y Premium —11,99 euros al mes o 119,90 euros al año—.
¿Y qué pasará con los suscriptores actuales? Pues aquí está la trampa de Disney+ ya que los usuarios verán que su plan pasa automáticamente a ser Premium, es decir, que se les cobrará 11,99 euros al mes a partir de su primer ciclo de facturación, después del 6 de diciembre. No obstante, según detalla la compañía en su comunicado, "tendrán la opción de cambiar al plan Estándar o al plan Estándar con anuncios".
¿Es una subida de precios encubierta? "Sí", responde Neira que, no obstante, matiza que "es una plataforma excesivamente barata y tiene sentido que intente subir los márgenes" aunque, si que es cierto, que no cuenta con "una gran cantidad de estrenos, sobre todo ahora con la huelga de guionistas y actores". Menos tajante es Fernández: "Habitualmente el usuarios no está pendiente de que suba dos o tres euros porque lo tenemos asumido por las subidas en la factura del teléfono o del gas, y no te vas a echar para atrás sobre todo porque una de las patas de Disney es la infantil y es algo en lo que los medios no incidimos suficiente".
La guerra del streaming ya no pasa por ver quién estrena qué serie o cuándo llega lo nuevo de Star Wars: la nueva batalla es lograr salir de los números rojos más que atraer suscriptores. Y Netflix ya no está sola en sus esfuerzos para intentar rentabilizar la burbuja de las plataformas de contenido bajo demanda. Disney+ se ha subido este jueves al carro de la competencia anunciando que explora "activamente" formas para acabar con las cuentas compartidas y también que incorporará el próximo noviembre tarifas con anuncios para intentar maquillar sus cifras. Lo ha hecho durante la presentación de sus resultados del segundo trimestre de 2023 que han arrojado unas pérdidas netas para la compañía de 460 millones de dólares —unos 417,5 millones de euros—.