El 10% de los diputados y senadores con derecho a tarjeta de taxi renunciaron a ella, según los datos facilitados a infoLibre por ambas cámaras tras elevar una petición oficial mediante los correspondientes portales de la transparencia. Según los reglamentos internos de Congreso y Senado, los parlamentarios tienen derecho a una tarjeta anual de taxi para sus desplazamientos por la comunidad de Madrid con un saldo de 3.000 euros. En el caso de legislaturas tan atípicas como la XI, que se ha extendido entre el 13 de enero y el 2 de mayo, las cantidades se prorratean.
Determinados grupos parlamentarios, como el de Podemos, aterrizaron en las Cámaras con la promesa de renunciar a algunos "privilegios" entre los que se contaba la tarjeta de taxi, de ahí que uno de los focos de esta cortísima legislatura se haya puesto en los conceptos que forman parte del régimen de retribuciones de sus señorías.
La pregunta al Congreso de los Diputados fue planteada el 13 de abril de 2016. Y la respuesta fue facilitada el día 28. Por aquellas fechas, todavía no se habían disuelto las Cámaras para la convocatoria de las generales el 26-D. El cómputo general arroja un saldo de 299 diputados que disponían de tarjeta frente a 51 que no disponían de ella. En total, suman los 350 diputados que componen en hemiciclo. Traducido a porcentaje, el 85,4% de los diputados aceptaron esta tarjeta, frente al 14,6% que no lo hicieron.
Por grupos, el reparto de parlamentarios que han contado con este medio de pago es el siguiente: 116 del Popular, 89 del Socialista, 40 de Ciudadanos, 17 de Podemos-En Comú Podem-En Marea, 14 del Mixto, 9 de Esquerra Republicana, 8 del Catalán y 6 del Vasco.
Según esta información facilitada por la Secretaría General del Congreso, sólo 51 diputados renunciaron a la tarjeta de taxi. De estos, 48 pertenecían al grupo liderado por Podemos y 3 al PP. En el momento de recoger las actas, desde la formación liderada por Pablo Iglesias se señaló que, como norma general, iban a renunciar a la cobertura de este gasto, pero en el Congreso, según datos de la propia Cámara, 17 de 65 parlamentarios sí recurrieron a este servicio. También los 4 de Compromís.
Más allá de la tarjeta para los taxis, el reglamento del Congreso y del Senado establece que los miembros de la Mesa, el órgano de Gobierno –nueve miembros en la Cámara Baja y siete en la Alta–, tienen derecho a coche con chófer, así como los portavoces de los diferentes grupos parlamentarios. Tras arrancar la legislatura, desde Podemos y Ciudadanos se avanzó que no recurrirían al coche oficial y desde el PSOE se aseguró que los chóferes quedarían al servicio de todo el Grupo y no adscritos a parlamentarios concretos.
El caso del Senado
La petición a la Cámara alta fue realizada a tavés del formulario habilitado a estos efectos en el portal de la transparencia también el 12 de abril. Y la pregunta también era la misma: el "listado de parlamentarios que han renunciado a la tarjeta de servicio de taxi en la XI legislatura".
La respuesta llegó el 4 de mayo y la encargada de facilitarla fue la Mesa de la Diputación Permanente. Fue así porque el 4 de mayo las Cortes ya estaban disueltas al haberse cumplido dos días antes el plazo legal máximo para la investidura de un presidente del Gobierno. Antes de facilitar un cuadro con más detalle que el Congreso, el órgano de Gobierno de esta institución señala que "en la XI Legislatura 238 [de 266] han dispuesto de la tarjeta de taxi, doce senadores han renunciado a la misma y dos no la han retirado". Los 12 pertenecen al grupo integrado por Podemos-En Comú-Compromís-En Marea. En este caso, a diferencia del Congreso, ningún senador de este grupo aceptó la tarjeta de taxi.
Ver másPodemos afirma que sus diputados deberán renunciar a la tarjeta para taxis, Internet y la pensión para exparlamentarios
Además, recuerda que "los miembros de la Mesa, los portavoces de los grupos parlamentarios y dos portavoces adjuntos, uno del Grupo Parlamentario Popular y otro del Grupo Parlamentario Socialista, no disponen de tarjeta-taxi ya que pueden hacer uso de coches oficiales".
El Senado también informa de que en la legislatura ya agotada, la Mesa, "en sus reuniones de 9 de febrero y de 15 de marzo de 2016, acordó aceptar la declaración de voluntad del Grupo Parlamentario Podemos-En Comú-Compromís-En Marea y del Grupo Parlamentario de Esquerra Republicana, respectivamente, y, en consecuencia, admitir su renuncia a la subvención de gastos de locomoción". "Ninguno de estos dos Grupos Parlamentarios ha solicitado la asignación de vehículo oficial", completa.
Teniendo en cuenta que los senadores con derecho a taxi son 252 [de 266] y traduciendo los datos facilitados a porcentaje, en la XI Legislatura, el 95,3% de los parlamentarios han disfrutado de este servicio, frente al 4,7% que renunciaron.
El 10% de los diputados y senadores con derecho a tarjeta de taxi renunciaron a ella, según los datos facilitados a infoLibre por ambas cámaras tras elevar una petición oficial mediante los correspondientes portales de la transparencia. Según los reglamentos internos de Congreso y Senado, los parlamentarios tienen derecho a una tarjeta anual de taxi para sus desplazamientos por la comunidad de Madrid con un saldo de 3.000 euros. En el caso de legislaturas tan atípicas como la XI, que se ha extendido entre el 13 de enero y el 2 de mayo, las cantidades se prorratean.