En torno a las 9:30 de la mañana de este viernes, un total de 10 activistas de la organización ecologista Greenpeace trepaban por la fachada principal de la Sagrada Familia para descolgar pancartas con las caras de los activistas que llevan detenidos 51 días en Rusia.
Según ha informado Luis Ferreirím, portavoz de Greenpeace, se ha elegido la basílica de la Sagrada Familia por el reconocido prestigio del monumento, con el fin de hacer llegar el mensaje a “nivel internacional”.
Así mismo, Ferreirim ha aclarado que en ningún caso se ha entorpecido el normal funcionamiento del monumento, y que los turistas están realizando sus visitas sin problemas. Según Ferriarim, no está en la finalidad de Greenpeace impedir la entrada, sino en hacer llegar el mensaje.
Durante la protesta, los bomberos han instalado colchonetas para prevenir posibles caídas de los activistas. Así mismo, miembros de la policía se han desplazado al monumento sin que de momento se haya producido ninguna detención, según ha informado Ferreirím a infoLibre.
En relación a cuándo terminará la protesta, Ferreirín no ha indicado ninguna hora, y ha aclarado que estarán el tiempo suficiente como para que el mensaje sea escuchado a nivel internacional.
Una protesta para exigir la libertad de Artic 30
Los miembros de Greenpeace se han colgado de la fachada de la Sagrada Familia para exigir la libertad de los 28 miembros de la organización, un cámara y un fotógrafo el pasado 19 de septiembre en Rusia por el asalto a la plataforma petrolífera del Ártico.
Las historias del “Sí, se pudo”
Los activistas de la organización, que llevan 51 días detenidos, viajaban en a bordo del barco de bandera holandesa 'Arctic Sunrise', y tras la protesta junto a la plataforma Gazprom, perteneciente a una de las compañías petrolíferas más importante del mundo, fueron abordados por las autoridades rusas y acusados de piratería.
Según Ferreirín, el objetivo de los activistas detenidos era alertar sobre los 'graves riesgos' que supone la explotación petrolífera en el Ártico de verter residuos al mar. Según informa el portavoz, la empresa Gazprom tiene interés está profundizando cada vez más en el Ártico, lo que aumenta las posibilidades de fugas.
El portavoz de Greenpeace, ha destacado que los miembros de Artic 30 cuentan ya con el apoyo de diversos mandatarios. Y ha nombrado como dirigentes internacionales destacados a la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, el primer ministro británico David Cameron y la canciller alemana Ángela Merkel. Así mismo, ha reseñado que la exigencia de liberación de los activistas encarcelados, cuenta con el apoyo de al menos dos millones de personas que habrían escrito a la embajada Rusa para demandar la liberación de los Artic 30, y también de diversos premios nobel.
En torno a las 9:30 de la mañana de este viernes, un total de 10 activistas de la organización ecologista Greenpeace trepaban por la fachada principal de la Sagrada Familia para descolgar pancartas con las caras de los activistas que llevan detenidos 51 días en Rusia.