Afines a la extrema derecha activan en las redes sociales una potente maquinaria de bulos sobre el covid-19

La movilización de sectores afines a la extrema derecha ha activado una potente maquinaria de bulos sobre el covid-19 que opera como un ataque feroz al Gobierno. Un día después de que la Policía cifrase en más de un millón y medio las cuentas detectadas en redes sociales con perfiles "dirigidos exclusivamente a manipular" información sobre la pandemia, con referencia específica a contenidos pseudocientíficos, Unidas Podemos (UP) formuló este lunes una segunda denuncia ante la Fiscalía General por dos nuevos bulos, pero estos de claro significado político. Con imágenes falsas, ambos remiten a lo peor de la crisis sanitaria: la muerte.  

Lo que empezó con falsedades como la que, dándole voz a un supuesto conductor de ambulancia, señalaba que en la puerta del domicilio de Pablo Iglesias e Irene Montero hacían guardia permanente dos UVI móviles, extremo desmentido por la Comunidad de Madrid, y continuó con la historia de que la exalcaldesa de Madrid Manuela Carmena había conseguido un respirador en su domicilio, la  escalada ha ido subiendo de grados. Y de magnitud. Qué hará la Fiscalía constituye todavía una incógnita. Sus portavoces no facilitaron este lunes ninguna información más allá de que ya se está estudiando la primera de las dos denuncias cursadas. ¿Hay otras interpuestas por ciudadanos de a pie o por alguna entidad del signo o rango que sea? ¿Cabe la opción de que la institución que dirige Dolores Delgado inicie actuaciones de oficio por la multiplicación de bulos que incrementan la alarma social? De momento, no se sabe.

Si el jueves UP puso en manos del ministerio público datos sobre el vídeo que muestra un falso cargamento de guantes a punto de salir hacia Francia por culpa del Gobierno, ahora el grupo confederal ha desmenuzado un segundo archivo audiovisual que muestra bolsas de cadáveres hacinadas en el suelo. "Dicho vídeo  –señalan los denunciantes– también se ha enviado de forma masiva a través de la App de mensajería WhatsApp". Y ha llegado a los destinatarios con el siguiente texto: "¿Quieres ver la realidad que te oculta el Gobierno? Pues es esta. Grabado hoy con cámara en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid". A renglón seguido y en versales, aparecen dos frases: NO SON 1.000 MUERTOS DIARIOS. SON MUCHOS MÁS". Y tras otro punto y seguido, sus autores incorporan el colofón que transmite la imagen de un Ejecutivo abyecto: "Tirados por el suelo, en bolsas, como perros".

La denuncia ha aportado también pruebas de un segundo fake, por utilizar el anglicismo más frecuente ya para las falsedades de gran difusión, que a través de una foto enseña decenas de ataúdes alineados en un almacén.

Basándose en informaciones ya publicadas, los denunciantes, los diputados Enrique Santiago y Martina Velarde, remarcan en el texto enviado a la Fiscalía que lo primero, las imágenes de las bolsas en el suelo, es un vídeo grabado en un hospital de Guayaquil (Ecuador) y no en ningún centro sanitario español. Subrayan asimismo que la imagen de los ataúdes proceden de las tomadas tras un naufragio sufrido en 2013 por refugiados cerca de la isla italiana de Lampedusa. 

Esas foto "son –exponen los denunciantes– radicalmente falsas, es decir, se trata de lo que en términos jurídico se denomina una falsedad ideológica". Porque las fotografías en sí no han sido manipuladas, "pero se corresponden a otra época, lugar e incidente, extremos que se falsean en las infografías denunciadas”. Que tras su difusión hay una intencionalidad inequívoca lo demuestra el texto que las acompaña en tuits localizados antes de la interposición de la denuncia:  "La foto por la que están investigando a decenas de policías y sanitarios". 

La denuncia recalca que expandir informaciones falsas "no tiene otra intencionalidad que injuriar, calumniar y desestabilizar la institucionalidad y los servicios públicos sanitarios de España", para lo cual se utilizan "recursos criminales, no escatimando recursos para utilizar políticamente el dolor de las familias que están perdiendo a sus seres queridos con esas imágenes que faltan gravemente a la verdad". Por ello, pide que se incoen diligencias de carácter penal de forma "urgente" para esclarecer los hechos y, en su caso, sancionar a los responsables, ya que considera que es "del todo incomprensible que las conductas relatadas queden impunes".

Quiénes exactamente se sitúan tras la creación de vídeos, fotos trucadas en cuanto al contexto, noticias que nunca fueron tales, todo eso es todavía una incógnita. Pero la coalición que encabeza el vicepresidente Pablo Iglesias sostiene la existencia de una "organización criminal" con un fin determinado ya esbozado en el párrafo anterior: "Difundir graves infundios y falsedades a sabiendas, mentiras que –en estos momentos en los que vivimos la más grave emergencia sanitaria de la historia reciente de España–, buscan causar alarma social, desestabilizar la situación política y debilitar la actuación de las instituciones del Estado, es decir, que buscan dañar a la sociedad española, a las instituciones y a todas las personas que viven en nuestro país".

La denuncia ejemplifica lo sucedido detallando una de las cuentas de Twitter que han expandido la foto de los ataúdes. En este caso no hay problema en reproducir el tuit porque ni siquiera se sabe a quién pertenece esa cuenta, abierta a nombre de @palcampomevoy, y a cuyo titular resulta imposible localizar. La fotografía del perfil es la de un joven con barba... que ha sido extraída de un anuncio alojado en ebay sobre una loción que ayuda a que esa barba crezca. El único dato biográfico que este lunes por la tarde desvelaba ese perfil se condensa en el siguiente aserto: "Razonable y español... o sea, de Vox".

Esa información falsa, la de la foto de los ataúdes, "ha sido divulgada al menos por el titular de la dirección de Twitter usuario @palcampomevoy", señala la denuncia, que reproduce la respuesta que tal usuario dio al portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique: "¿Esperabais aplausos para el gobierno? No lo tendréis #GobiernoDimisión". Dicha afirmación, agregan los denunciantes, "pone de manifiesto que el citado individuo participa activamente en la puesta en práctica de la campaña de difusión de este bulo o fake news". Pero es más, este periódico ha localizado otro tuit sobre el mismo asunto pero de aún mayor dureza: "Sois unos asesinos y una desgracia para este país. La derecha es nuestra única esperanza. Si os molesta es porque lo están haciendo bien. #GobiernoDimision". Ese hashtag que cierra el mensaje de @palcampomevoy coincide al milímetro con el eslogan de una "manifestación online" convocada para el 8 de abril a través de una web cuya titularidad resulta de difícil rastreo.

Las webs de la extrema derecha

¿Es fruto de la casualidad que todas esas noticias falsas de la peor crisis sanitaria vivida por España en el último siglo encuentren respaldo y difusión en webs ideológicamente adscritas a la derecha extrema? Ese es otro de los interrogantes. Pero lo cierto es que distintos canales de youtube y algunos supuestos digitales informativos están lanzando en cadena noticias cuya producción, aunque nadie se moleste en confirmarlas, requiere tiempo y medios: humanos y materiales. Es decir, económicos. Este periódico ha obtenido varios ejemplos de bulos alentados por webs de tal índole pero omite detallar cuáles son porque no ha logrado contactar con sus responsables ni recabar por tanto su versión.

Entre los ejemplos más señeros localizados por infoLibre figura el audio de un –también supuesto– transportista cuya narración de hechos acusa a "políticos" de quedarse con parte del cargamento de test y equipos protectores. El narrador lo hace sin ofrecer ni un solo dato de localización ni fechas ni ninguna pista que apunte a quiénes son esos beneficiarios. Pero el medio digital que reproduce el audio abre su titular con un adjetivo: "Escandaloso". "Resulta –se oye en la cinta– que llegamos a Madrid con dos trailers y nos damos cuenta de que en cada palé hay dos cajas con unos puntos rojos puestos. ¿Sabéis para quiénes iban, cuántos coches oficiales estaban esperando en el almacén? Para que nuestros putos políticos (…), son para ellos, para que tengan sus respiradores, sus mascarillas, sus test (…) esto es una puta vergüenza. Fíjate lo indignado que estoy".

Si identificar a los titulares de esas webs y canales de youtube resulta difícil –los dominios de internet han sido registrados sin que se desvele la identidad del titular en muchos casos–, también lo es detectar quién hay detrás de una cuenta de Twitter para la que se utiliza un perfil sin datos personales inequívocos y adobado, por ejemplo, con una foto extraída de las miles de páginas de imágenes que ofrece Google. Suponiendo que haya alguien de carne y hueso detrás. El responsable de redes de Podemos, Julián Macías, publicó hace días en Twitter un hilo –es decir, varios tuits encadenados– de cómo el fallo de un supuesto tuitero le llevó a descubrir "miles de cuentas" que "automatizan respuestas y tuits de odio y mentiras".

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A modo de ejemplo, Macías hizo una búsqueda al alcance de cualquier tuitero sea cual sea su grado de conocimiento técnico: la frase "tiempo de rojos, hambre y piojos". Inusual en el lenguaje común del siglo XXI, una sencilla búsqueda trae a primer plano centenares de tuits que la incluyen. Es, exactamente la que en octubre de 2019 pronunció en un pleno el portavoz municipal de Vox en la localidad almeriense de El Ejido. Y la que hace dos meses apareció grabado en el memorial que el municipio murciano de Águilas dedica a los vecinos que fueron deportados al campo de concentración nazi de Mauthausen. 

En línea con el mensaje lanzado el domingo por la Policía, que no señaló a ningún potencial culpable y mencionó de forma expresa bulos relativos a ficticios medicamentos, expertos en redes consultados por infoLibre y que piden mantenerse en el anonimato creen que en los últimos tiempos han experimentado un crecimiento exponencial los denominados bots, programas informáticos preparados para realizar tareas repetitivas a través de internet como explica esta entrada de Wikipedia a la que puedes acceder pinchando aquí.

Los bots ganaron popularidad política cuando, en septiembre de 2019, el diario El País desveló que Twitter y Facebook habían cerrado 359 cuentas atribuidas al PP para las últimas generales. Hasta la fecha, no se han localizado cuentas falsas ni del PSOE ni de la formación morada.

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