"Pienso asistir. Puede usted ponerlo bien grande". Así daba respuesta este martes en rueda de prensa Esperanza Aguirre a la pregunta de si el sábado, día 14, tenía en mente asistir a la manifestación contra el aborto convocada por la asociación ultraconservadora Foro de la Familia. Con este acto, la presidenta de los conservadores madrileños y candidata del Partido Popular al Ayuntamiento de Madrid, entra en campaña para asegurarse los votos de un sector del electorado que en los últimos meses, a cuenta de la retirada de la reforma de la ley del aborto de Alberto Ruiz-Gallardón, se ha distanciado de la formación de Mariano Rajoy.
La candidata subrayó que, para ella, el aborto "no es un derecho, sino un fracaso de la mujer". "Desgraciadamente, lo que tenemos que hacer es evitar que con leyes como la anterior a la última que puso el señor Zapatero en el tiempo de Felipe González, que era la ley vigente, cuando se produjeron lo que yo llamo asesinatos de bebés de ocho meses con el famoso doctor Morín en Barcelona, puedan volverse a producir".
"Hay que dejar claro que el aborto no es un derecho, porque si no, los médicos y los enfermeros no podrán tener derecho, ellos, a la objeción de conciencia. Y ese sí me parece un asunto importante", recalcó.
Con este anuncio, además, Aguirre marca distancias con Cristina Cifuentes, candidata del PP a la Comunidad de Madrid. La todavía delegada del Gobierno en Madrid es partidaria de la ley de plazos, la que está ahora en vigor, en lugar de una ley de supuestos, que fue lo que propuso en su día el exministro de Justicia.
Va a ser muy difícil que la presidenta del PP de Madrid no escuche en esta manifestación cánticos y consignas contra la política del Gobieno de Rajoy en esta materia. Tras la polémica con la ley de Gallardón, el Ejecutivo ha encargado al Grupo Parlamentario Popular que lidere en el Congreso de los Diputados una proposición de ley que modifica ligeramente la ley de Zapatero para evitar que las menores de 16 y 17 años aborten sin con conocimiento parterno.
En su rueda de prensa, Aguirre dejó claro que uno de sus principales objetivos va a ser recuperar el voto tradicional del PP. Y dejó claro cuáles serán los ejes de su campaña: "La libertad, la vida, la propiedad y el imperio de la ley". Para esta misión, la dirección de campaña del PP de Madrid ha sido encomendada al portavoz del PP en la Asamblea de Madrid, Iñigo Henríquez de Luna. Y la redacción del programa, a David Pérez, alcalde de Alcorcón. Su campaña, la del Ayuntamiento, la llevará Inmaculada Sanz, una de sus más fieles colaboradoras.
Pérez y Henríquez de Luna
parecen destinados a ocupar el puesto de hombres de confianza que en su día ocuparon Ignacio González, apeado de la candidatura por Rajoy, y Francisco Granados, encarcelado en el marco de la operación Púnica.
El portavoz del PP en la Cámara regional fue el promotor de la campaña a favor de las primarias en el PP que se desarrolló en los meses previos al XVI Congreso Nacional del PP de 2008, cuando Aguirre, González y Granados se abonaron a la estrategia de minar el liderazgo de Mariano Rajoy.Génova ayuda a Cifuentes
Aguirre deja claro con estos nombramientos su bloqueo a la dirección nacional del partido. Todo lo contrario de lo que hace Cifuentes. La candidata a la Comunidad ha elegido al diputado Juan Carlos Vera, uno de los hombres de máxima confianza de Rajoy en la sede nacional del partido, para que le dirija la campaña. Vera es, además, subdirector de la campaña nacional.
La presidenta del PP de Madrid aseguró que aceptó que se retiraría de este cargo orgánico si gana la Alcaldía porque no hay tradición en el PP de que el alcalde sea el presidente del partido. Pero advirtió de que el relevo se hará con un congreso. Y que a ese cónclave, gracias a los estatutos del partido, se puede presentar cualquier militante siempre que reúna 100 firmas como aval. Lo que no quiso precisar es para cuándo se prevé ese congreso, si para después de las elecciones o para más adelante.
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Sobre González, se mostró convencida de que ha existido una "trama" contra su delfín. "No le quepa a usted la menor duda", dijo al periodista que le preguntó.
La presidenta del PP de Madrid, abogó, además, por suspender la Copa del Rey de fúltbol y que se celebre a puerta cerrada si se silva o se producen pitidos contra el himno, el rey o la bandera.
“Como dijo Sarkozy cuando era presidente de Francia, si silban a la Marsellesa, se suspende el partido y se celebra a puerta cerrada”, recordó Aguirre. "Yo creo que es lo que hay que hacer”, añadió.
"Pienso asistir. Puede usted ponerlo bien grande". Así daba respuesta este martes en rueda de prensa Esperanza Aguirre a la pregunta de si el sábado, día 14, tenía en mente asistir a la manifestación contra el aborto convocada por la asociación ultraconservadora Foro de la Familia. Con este acto, la presidenta de los conservadores madrileños y candidata del Partido Popular al Ayuntamiento de Madrid, entra en campaña para asegurarse los votos de un sector del electorado que en los últimos meses, a cuenta de la retirada de la reforma de la ley del aborto de Alberto Ruiz-Gallardón, se ha distanciado de la formación de Mariano Rajoy.