El consejero de Políticas Sociales, Igualdad, Familias y Natalidad de la Comunidad de Madrid, Alberto Reyero, presentó este viernes su dimisión deseando "suerte y acierto" a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y apelando a la "unidad de las instituciones como el camino más acertado para vencer al virus". La salida del consejero se produce tras una semana delicada dentro del Ejecutivo de coalición, con desautorizaciones públicas al vicepresidente naranja, Ignacio Aguado, que mantiene un perfil propio y rechaza abiertamente la estrategia del Gobierno madrileño de dar la batalla en los tribunales por las nuevas restricciones en la capital.
En la misiva, el consejero sostiene que "no se trata de una decisión apresurada sino meditada". "Creo necesario cerrar una etapa, dar un paso al lado y volver a mi trabajo en la Asamblea, desde donde seguiré defendiendo los derechos de las personas más vulnerables", señala Reyero, que ha recibido el respaldo público del propio Aguado a través de su cuenta de Twitter: "He conocido a pocas personas tan honestas, íntegras y trabajadoras. Ha sido un placer compartir contigo este año de gobierno y es un orgullo que continúes a nuestro lado".
Reyero apunta que la situación en las residencias "está en la actualidad bastante controlada". No obstante, añade que "es necesario no bajar la guardia y mantenerse alerta". "En esta segunda oleada, a diferencia de la anterior, nos enfrentamos mejor equipados, sabemos más del virus, todos los centros cuentan con planes de contingencia y nuestros residentes tienen un porcentaje de inmunidad elevado", asegura en la misiva. Y afirma que en esta segunda ola "está funcionando adecuadamente la coordinación socio sanitaria y la derivación hospitalaria es fluida".
Una de las "mayores enseñanzas" de la crisis sanitaria, prosigue, es que el modelo de cuidados "necesita ser cambiado", tanto en el Ejecutivo regional como también en toda España. "Es algo que ya sabíamos antes de la crisis pero que ahora se hace ineludible acometer", asevera Reyero antes de agradecer el respaldo a sus compañeros y desear "mucha suerte y acierto" a Ayuso en la tarea que tiene por delante. Tras su salida, el cargo lo ocupará su número dos, Javier Luengo.
Reyero ha sido el consejero de Cs que de forma más abierta se ha enfrentado al equipo de Isabel Díaz Ayuso. En plena pandemia, cuando el número de muertes en las residencias era ya un drama, la presidenta regional le quitó las competencias en centros de mayores para entregárselas a Enrique Ruiz Escudero, su consejero de Sanidad. También alzó la voz para desvincularse de los protocolos con los que la Comunidad de Madrid impidió que los mayores de las residencias fueran trasladados a los centros sanitarios en los peores días de la pandemia.
Fuentes de la Presidencia de la Comunidad de Madrid consultadas por infoLibre preferían poner el acento en que Reyero había tomado la decisión por motivos personales. La desvinculaban, pues, de todas las tensiones de las últimas semanas a cuenta de las reticencias del equipo de Ayuso a la hora de endurecen las medidas para hacer frente a los rebrotes de la pandemia.
¿Es la marcha de Reyero un punto de inflexión? ¿Anticipa una ruptura entre PP y Cs en el Gobierno de la Comunidad de Madrid? Fuentes de la dirección del partido naranja siguen negando que por la mente de Ignacio Aguado pase la posibilidad de sumarse a la moción de censura a los grupos de la izquierda le animan con insistencia.
Siete bajas entre mayo y septiembre
En los últimos meses, desde el levantamiento del estado de alarma, uno de los rumores más extendidos en círculos políticos madrileños era el de que Ayuso iba a esperar a la vuelta del verano para hacer una crisis de Gobierno que podía pasar por prescindir de los consejeros de Sanidad y Políticas Sociales, los más golpeados por la pandemia. Pero, al final, celebró el debate del estado de la región a mediados de septiembre y optó por no hacer ningún cambio en el Ejecutivo regional.
Entre mayo y septiembre se han producido siete bajassiete bajas en puestos clave de la Comunidad de Madrid. La última marcha, y la más importante hasta la fecha, ha sido la del consejero Reyero.
La semana pasada cayó Ignacio García Mostazo, Director General de Medios de la Comunidad de Madrid. Le precedieron la directora general de Salud, el director general de Coordinación Socio-Sanitaria, el secretario general técnico de Políticas Sociales, el jefe de gabinete del consejero Reyero y el gerente de la Agencia Madrileña de Atención Social (AMAS). Estas marchas abarcan los campos de la comunicación, salud pública y residencias de mayores.
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Y aunque no puede considerarse una víctima política al no integrar la estructura de la administración autonómica, el pasado sábado renunció a su cargo como portavoz del Grupo covid-19 Emilio Bouza. Lo hacía dos días después de su nombramiento y sin haber protagonizado ni una sola comparecencia.
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El consejero de Políticas Sociales, Igualdad, Familias y Natalidad de la Comunidad de Madrid, Alberto Reyero, presentó este viernes su dimisión deseando "suerte y acierto" a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y apelando a la "unidad de las instituciones como el camino más acertado para vencer al virus". La salida del consejero se produce tras una semana delicada dentro del Ejecutivo de coalición, con desautorizaciones públicas al vicepresidente naranja, Ignacio Aguado, que mantiene un perfil propio y rechaza abiertamente la estrategia del Gobierno madrileño de dar la batalla en los tribunales por las nuevas restricciones en la capital.