Las reformas del Gobierno
Los barones del PP ven peligrar sus territorios a partir de 2015
No han pasado todavía ni dos años desde que el PP conquistara gran parte del poder territorial en las autonómicas del 22 de mayo de 2011 y la opinión más extendida entre los barones del PP es que repetir ese resultado está cada vez más lejos. A mediados de 2015 toca repetir esta cita electoral, antesala de las generales. Si en 2011 fueron estas elecciones las que pusieron la alfombra roja de Mariano Rajoy hacia la Moncloa, en esta ocasión pueden suponer lo contrario. A la hora de explicar los motivos del porqué de este pesimismo, las fuentes consultadas por este diario apuntan hacia una misma dirección: el Palacio de la Moncloa.
"Primero vienen las elecciones europeas [25 de mayo de 2014], pero justo después nos toca a nosotros ejercer de banco de pruebas de lo que puede pasar meses después en las generales y el panorama no pinta nada bien", reflexiona un dirigente regional que no oculta su malestar por la forma en la que el Gobierno ha manejado la presentación del segundo paquete de reformas y ha reaccionado a los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), que habla de más de 6,2 millones de parados. "Echamos de menos que se expliquen más y mejor las medidas que se están tomando", añade.
El pasado viernes, el Consejo de Ministros dio luz verde a una segunda tanda de reformas y a unas nuevas previsiones macroeconómicas. Estos últimos datos dispararon las alarmas entre el poder territorial de los conservadores. De todas las cifras, la más alarmante apunta a que al paro se mantendrá en el 27,1% este año y bajará al 26,7% en 2014. Y que, en el mejor de los escenarios, la tasa de paro será en 2015 del 25,8%. Es decir, que cuando sólo han transcurrido 16 meses de legislatura, el Gobierno de Mariano Rajoy reconoce que será incapaz de mejorar las cifras de desempleo que se encontró tras las generales del 20 de noviembre de 2011.
"El mensaje fue muy pesimista. Frío, lleno de números. Dio la sensación de que nos hemos rendido. ¿Con qué cara vamos ahora a nuestros ciudadanos y les contamos que todo va a mejorar, que hay muestras de que todo va a ir a mejor?¿Les podemos decir que van a bajar los impuestos? ¿Nos van a creer cuando desde el Gobierno se ha pintado un escenario tan negro?", añade un diputado regional. Después de meses insistiendo en que el Gobierno no pensaba subir de nuevo los impuestos, el viernes quedó claro que, de momento, no subirá el IVA, pero que sí habrá subida de otras tasas y que habrá una prórroga de la última subida del IRPF en 2014, un año más de lo prometido.
En el Ejecutivo insisten en que los datos son lo más "conservadores posibles", que se irán modulando a medida que el escenario nacional, y sobre todo el europeo, lo permitan. Y que el próximo miércoles 8 de mayo el presidente del Gobierno explicará todas estas medidas en el Congreso de los Diputados, donde solicitó comparecer el viernes después de la reunión del Consejo de Ministros.
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Entre los críticos a la forma en la que el Gobierno está manejando la situación económica hay un grupo que considera que un cambio de equipo daría un "impulso" a la situación. Este "impulso" que reclaman al presidente del Gobierno no es, de momento, inminente tal y como dejó claro Rajoy el pasado domingo en una rueda de prensa desde La Alhambra (Granada).
Otro de los motivos de desconfianza de las comunidades hacia el Gobierno tiene que ver con el nuevo marco de financiación autonómica que está sobre la mesa de los grupos de trabajo creados en el marco del Consejo de Política Fiscal y Financiera. Ahora que el Gobierno ha flexibilizado también el objetivo de déficit para las autonomías, algunas temen la llegada de lo que denominan el "régimen a la carta" y no ven con buenos ojos los últimos contactos entre Rajoy y el presidente de la Generalitat, Artur Mas.
Otro sector del PP, los más próximos a Mariano Rajoy, sostienen que en este momento toca que el partido esté "unido como una piña". "Toca responsabilidad y no ponerse nerviosos. Estamos persuadidos de que no se puede hacer nada más de lo que ya estamos haciendo y de que estamos poniendo las bases para la recuperación. En 2015 veremos que todos los esfuerzos han merecido la pena y estaremos mejor que ahora. Y el optimismo también llegará a la gente", apunta un diputado.