El Ayuntamiento de Cádiz ha acordado dejar de organizar el concurso de las ninfas y la diosa del carnaval, un certamen tradicional para mujeres jóvenes en el que se valoran virtudes ligadas a la simpatía y el saber estar, por considerar que es machista y da a la mujer un rol decorativo. La iniciativa ha partido de colectivos sociales, grupos feministas y personalidades vinculadas al carnaval, impulsores de una campaña de la que forman parte los populares autores de coplas Juan Carlos Aragón y Antonio Martínez Ares, así como figuras del ámbito universitario, sindical y educativo. La decisión acordada por el pleno celebrado este jueves, a la que se opuso el PP, es una victoria del movimiento feminista gaditano, que lucha por terminar con el papel secundario, cuando no marginal, que desempeñan las mujeres en determinadas esferas del carnaval. Los grupos que han promovido el fin de esta tradición describen este certamen como "una mezcla extraña entre concurso de belleza, de gracia, de dotes para el baile por tanguillos, saber estar y urbanidad".
La moción original, elaborada por la Iniciativa Social por un Carnaval Igualitario, fue asumida íntegramente por el equipo de gobierno, integrado por marcas locales de Podemos e Izquierda Unida. Dicha moción, que entró en el apartado de urgencias del pleno, recogía tres puntos: "no organizar ni participar en modo alguno en la organización" del concurso de ninfas y diosas; fomentar la figura de la Bruja Pitti en el carnaval; y crear una comisión de mujeres para desarrollar estas medidas. El PP intentó evitar el debate con una enmienda para que no se abordase en el pleno, sino en el patronato del carnaval, que se encarga de su organización. "Esto no va de la organización del carnaval. Va de igualdad", expuso la concejal de Fiestas y Participación, María Romay.
La enmienda del PP fue tumbada. Con el rechazo de los diez concejales conservadores a la moción ciudadana garantizado, la clave estaba en la posición de los cinco ediles del PSOE, que son los que vienen dando estabilidad al gobierno en minoría liderado por José María González, conocido como Kichi. El PSOE se opuso a la moción tal y como estaba redactada: no estaba de acuerdo con fomentar a la Bruja Pitti, ni tampoco con que la comisión fuera sólo integrada por mujeres. Y presentó una enmienda de sustitución, que fue la que se aprobó con todos los votos a favor salvo los del PP. Esta enmienda también acuerda acabar con este concurso municipal. Ciudadanos se sumó a la iniciativa, centrando su discurso en el "respeto" a las mujeres que han participado en este tipo de concursos.
Dicha moción establece que "el concurso de ninfas y diosas del carnaval deje de estar bajo la organización del Ayuntamiento de Cádiz". Hipotéticamente, el concurso podría organizarse de forma privada, pero ya no formaría parte de la programación del carnaval. El PSOE prefirió esa redacción, que deja abierta la posibilidad de una improbable celebración extraoficial del concurso, porque en rigor "el Ayuntamiento no es quién para prohibir ni las diosas ni las ninfas", según dijo la concejal socialista María José Rodríguez. "Estaría feo que actuáramos como figura coercitiva", afirmó. De paso, el PSOE evitó que el Gobierno local de Podemos e IU se apuntara el tanto de la aprobación de una moción de iniciativa ciudadana.
Origen en las reinas y sus damas
El concurso de las ninfas y la diosa del carnaval tiene sus antecedentes en las reinas de las fiestas y sus damas, típicas en numerosos pueblos españoles y frecuentemente criticadas por otorgar a las mujeres un papel ornamental. Este certamen se instauró en 1954, en pleno franquismo. La tarea de las mujeres jóvenes elegidas era la de recibir sonrientes a las autoridades, por ejemplo. También la de posar y figurar. Básicamente, dejarse ver. En muchas ocasiones las ganadoras eran miembros de la clases acomodadas de Cádiz, según se recoge en la exposición de motivos de la moción de la Iniciativa Social por un Carnaval Solidario. En la década de los 80, ya en democracia, el Ayuntamiento cambió el nombre al carnaval y pasó a ser de las ninfas y la diosa.
De las bases han desaparecido los méritos explícitamente vinculados a la belleza, pero éstos no han sido suplidos por otros. "El concurso adolece de unas bases poco concretas y genera no pocas polémicas en torno a su elección por la arbitrariedad acerca de los méritos evaluados. En algunas ocasiones, dichas críticas incluso han venido acompañadas de acusaciones de favoritismo por los padrinos de las candidatas. Esta ausencia de criterios objetivos en la elección ha generado la impresión de que se trataba de una mezcla extraña entre concurso de belleza, de gracia, de dotes para el baile por tanguillos, saber estar y urbanidad o una especie de cuestionario básico sobre cultura general y gaditana", señalaba la moción de los colectivos, que ha sido firmada por más de 2.000 personas, según el afirmó el alcalde durante el pleno.
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"¿Te lo ha escrito un hombre?"
El debate dio para evidenciar el descontento político de las fuerzas progresistas con el papel de la mujer en la principal fiesta gaditana. "El carnaval de Cádiz es machista", dijo con todas las letras la concejal socialista María José Rodríguez. "No queremos ser adornos de ninguna fiesta. No es que las mujeres de Cádiz tengamos menos arte. Es que nos ha puesto delante un espejo equivocado", afirmó la concejal de Fiestas, María Romay. Eva Tubío, de Ganar Cádiz (IU), afirmó: "Cuando las mujeres escribimos para el carnaval, lo primero que nos preguntan es: '¿Te lo ha escrito un hombre?'. De jóvenes las niñas éramos ninfas y diosas, mientras nuestros compañeros se iban a escribir y cantar". Tubío recordó al pleno que en el concurso del carnaval la presencia de mujeres es del 1,5%. La Iniciativa Social por un Carnaval Igualitario también describe en su moción la falta de igualdad en el carnaval, a pesar de la "avanzadilla" de la presencia femenina primero en coros y luego en comparsas mixtas.
Vicente Sánchez, concejal del PP, afirmó que "el papel de ninfa del carnaval no tiene por qué ser contradictorio con ningún otro". "No es un papel obligatorio, sino voluntario", dijo. A su juicio, los grupos políticos que apoyaron la supresión de esta celebración oficial incurren en "paternalismo" e "insultan" a las mujeres que participan en el concurso. "Dejen ya de insultar a estas mujeres. No son floreros", afirmó. Sánchez expuso que las mujeres que participan en estos concursos lo hacen porque quieren, no obligadas, y que por lo tanto suprimirlo es tomar decisiones por ellas. "Claro, como usted no piensa bien con 18 años, ya pienso yo por ustedes, ¿no?", afirmó para expresar el que, a su parecer, es el razonamiento de las fuerzas políticas que aprobaron la moción. En Cádiz hay una asociación de ninfas, llamada La Piconera, que defiende este certamen.
El Ayuntamiento de Cádiz ha acordado dejar de organizar el concurso de las ninfas y la diosa del carnaval, un certamen tradicional para mujeres jóvenes en el que se valoran virtudes ligadas a la simpatía y el saber estar, por considerar que es machista y da a la mujer un rol decorativo. La iniciativa ha partido de colectivos sociales, grupos feministas y personalidades vinculadas al carnaval, impulsores de una campaña de la que forman parte los populares autores de coplas Juan Carlos Aragón y Antonio Martínez Ares, así como figuras del ámbito universitario, sindical y educativo. La decisión acordada por el pleno celebrado este jueves, a la que se opuso el PP, es una victoria del movimiento feminista gaditano, que lucha por terminar con el papel secundario, cuando no marginal, que desempeñan las mujeres en determinadas esferas del carnaval. Los grupos que han promovido el fin de esta tradición describen este certamen como "una mezcla extraña entre concurso de belleza, de gracia, de dotes para el baile por tanguillos, saber estar y urbanidad".