La actual tesorera-gerente del PP, Carmen Navarro, imputada junto al partido por la destrucción de los discos duros de su antecesor en el cargo Luis Bárcenas, cerró este jueves con su comparecencia la Comisión de investigación sobre la presunta financiación ilegal de la formación conservadora. Aunque el orden del día recogía también la declaración del responsable de la Tesorería Nacional entre 1993 y 2008, Álvaro Lapuerta, el extesorero no asistió a la Cámara baja al padecer "un deterioro neurocognitivo", según el escrito que presentó el miércoles su abogado ante la mesa.
Durante su intervención en el Congreso, Navarro aseguró que bajo su mandato "se están haciendo las cosas bien" y aseguró que en ningún momento ha tenido constancia de operaciones ilegales hechas en su partido. "No me consta, pero desconozco hechos relación con periodos anteriores. He venido a gestionar el presente, no a investigar el pasado. Y no lo voy a hacer nunca", aseveró la tesorera-gerente del PP. Algo en lo que insistió en algún otro momento de su comparecencia: "Asumo el pasado de mi partido, lo que pasa que no lo voy a investigar", respondió, minutos después, al portavoz de ERC, Joan Tardá.
Donaciones, auditoría y sobresueldos
Navarro comenzó siendo cuestionada por la declaración de Luis Bárcenas ante el juez Pablo Ruz en julio de 2013. cuando su antecesor aseguró que el empresario Juan Miguel Villar Mir había entregado 300.000 euros al partido, una donación de la que, según dijo, era conocedor el actual presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. "No se recibió ningún donativo en efectivo de ninguna manera", dijo la responsable de las cuentas de la formación conservadora desde la salida, en el año 2012, de José Manuel Romay Beccaría, actual presidente del Consejo de Estado y padre político de Rajoy.
También se le preguntó por la auditoría interna que realizó entre enero y febrero de 2013 en la formación conservadora. Un análisis que, según señaló el portavoz del PSOE en la comisión, Artemi Rallo, ninguna empresa había querido realizar porque no se atrevía "a blanquear unas cuentas ennegrecidas desde hace 20 años". En este sentido, la auditoría, dijo Navarro, no era una "investigación exhaustiva sobre donaciones". "Solo se dedicaba a ver cómo estaban las cuentas del partido, si las retribuciones que constaban se ajustaban a la legalidad y si todas las salidas de caja tenían su correspondiente recibo y factura".
Navarro también fue cuestionada por los sobresueldos otorgados a algunos de los cargos públicos de la formación. Unos pluses que la tesorera-gerente ha definido en todo momento como "abonos" por su trabajo y gastos de representación. En este sentido, afirmó que en todos esos casos se habían abonado las correspondientes retenciones fiscales. Sin embargo, rechazó, escudándose en la protección de datos, responder a las preguntas sobre el número de cargos que los cobraban y las cantidades de dinero que percibían.
Ver másEl PP pide que se aplique la 'doctrina Botín' para no sentarse en el banquillo por el borrado de los ordenadores de Bárcenas
Los discos duros de Bárcenas
Antes de comenzar su intervención, Navarro aseguró que asistía "con plena disposición" de contestar las preguntas "en relación con el objeto de la comisión" y con las cuestiones referidas a sus años como "gerente o tesorera", así como dejó claro que no iba a responder a cualquier pregunta "incursa en ningún procedimiento penal abierto". Por ello, no quiso responder a ninguna pregunta planteada por los diputados sobre la destrucción de los discos duros de los ordenadores de Bárcenas, que según declaró el extesorero del PP guardaban "información de interés".
Lo intentó Joan Baldoví, de Compromís, que tuvo que hacer todas las preguntas ante el silencio de Navarro para que constaran en las actas. También formularon sus cuestiones al respecto la diputada de Unidos Podemos Carolina Bescansa y el portavoz del Grupo Socialista en la Comisión de investigación, que definió la destrucción de los discos duros como un "símbolo de rabia y desesperación" del PP "al verse descubierto". Todos ellos recibieron la misma respuesta: "No voy a hablar, por respeto a la justicia, de procedimientos que estén abiertos".
La actual tesorera-gerente del PP, Carmen Navarro, imputada junto al partido por la destrucción de los discos duros de su antecesor en el cargo Luis Bárcenas, cerró este jueves con su comparecencia la Comisión de investigación sobre la presunta financiación ilegal de la formación conservadora. Aunque el orden del día recogía también la declaración del responsable de la Tesorería Nacional entre 1993 y 2008, Álvaro Lapuerta, el extesorero no asistió a la Cámara baja al padecer "un deterioro neurocognitivo", según el escrito que presentó el miércoles su abogado ante la mesa.