El censo definitivo de la primera fase de votaciones para la elección del sustituto de Mariano Rajoy al frente del Partido Popular es de 66.706 afiliados, lo que representa el 7,6% del total de militantes que asegura tener el partido. Estos son, pues, los llamados a votar entre los seis candidatos el jueves, 5 de julio, en las sedes del PP. Sólo pueden pasar dos a la ronda definitiva, la que tendrá lugar en el XIX Congreso Nacional, que se celebrará en Madrid los días 20 y 21 de julio. María Dolores de Cospedal y Soraya Sáenz de Santamaría se han hecho fuertes en los últimos días, mientras Pablo Casado se ha desdibujado al endurecer el tono de su campaña contra sus dos principales rivales.
La baja cifra de inscritos para participar en las votaciones del jueves permite concluir a las fuentes consultadas que se han apuntado los fieles a quienes más capacidad tienen de movilizarse, los más cercanos al aparato –dirección– de las diferentes organizaciones territoriales. A saber: la exsecretaria general, María Dolores de Cospedal, y la exvicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. Y, en menor medida, Pablo Casado. El cálculo es sencillo. El PP tiene uno 23.450 cargos públicos, cifra que representa el 35% de los inscritos para el 5 de julio.
En todo caso, lo inédito del proceso –es la primera vez que se da voz a todos los militantes– hace que los equipos de los principales candidatos opten por la prudencia. "Han pasado tantas cosas en nuestro partido en poco más de un mes, todas inesperadas, que es muy complicado hacer predicciones", resume un diputado.
Con las tablas definitivas de inscritos en la mano, los diferentes actores implicados en este proceso hacen cálculos intentando trasladar al mapa de España una aproximación de los votos con los que creen que cuentan. Es una tarea difícil, destacan, porque el voto es secreto. Pero han detectado una serie de tendencias que les están sirviendo para reforzar sus acciones en estas zonas. Un trabajo que ya tendrán avanzado, dicen, cuando se trate de convencer a los compromisarios que viajarán a Madrid para la votación definitiva.
A continuación, infoLibre repasa los apoyos con los que contarían los tres principales candidatos que optan a liderar el PP. A día de hoy, si nos atenemos a las declaraciones públicas de Cospedal, Santamaría y Casado, sólo es posible una candidatura de integración entre la exvicepresidenta y la ex secretaria general, pese a su declarada enemistad hasta ahora. Esta es la opción preferida de destacados miembros de la dirección nacional y de la del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso. Creen que es la mejor forma de evitar "que se rompa el partido".Andalucía: las dos candidatas, igualadas
Andalucía: las dos candidatas, igualadas
Con 11.658 inscritos Andalucía es la comunidad autónoma donde más afiliados del PP podrán votar, siendo Sevilla, con 3.191, la provincia que lidera el ranking. En los equipos de Santamaría y Cospedal coinciden: la batalla está muy igualada.
A Juan Manuel Moreno, presidente de los conservadores andaluces, se le tiene por un líder muy próximo a Santamaría. Recientemente fichó también al exdelegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz.
Pero la exsecretaria general cuenta con el apoyo de Juan Ignacio Zoido, exministro del Interior y exalcalde de Sevilla y todos sus fieles.
Poco tiene que hacer Casado en Andalucía, señalan las fuentes consultadas. "Sumar todo lo que pueda", dice uno de sus fieles. Los cálculos más optimistas le ubican logrando el 20% de los votos.
Este fin de semana, Casado ha dado prioridad a Andalucía precisamente para arañar apoyos y convencer a indecisos.
Madrid: la mejor opción de Casado
Con 9.944 inscritos, la Comunidad de Madrid es la segunda que más votantes aporta. La de Madrid va a ser una de las batallas más duras.
A priori, los más fuertes en la capital son Pablo Casado y María Dolores de Cospedal. El exvicesecretario de Comunicación contaría con el apoyo de diputados y senadores, con el de los jóvenes de Nuevas Generaciones, con el de sus excompañeros de su etapa liderando a la asociación juvenil y con el de los afiliados de los distritos más conservadores.
Un muy buen resultado en Madrid, creen en el entorno de Casado, le ubicaría casi seguro como finalista para la segunda ronda. Lo contrario, ya ha insistido el propio candidato, le separaría de cualquier otro tipo de funciones. Y esto supone cerrar la puerta a ser candidato a la Comunidad a al Ayuntamiento para mayo de 2019.
Casado quiso dar un portazo a todos los que en el PP creen que todavía no es su momento, que le falta experiencia y que antes de llegar a la Presidencia de su partido sería bueno que ganase elecciones.
La ex secretaria general, por su parte, ha sido apoyada en público por el presidente regional, Ángel Garrido, lo que podría tener un efecto arrastre a la hora de movilizar a alcaldes, concejales y diputados regionales. También ha sumado el apoyo de Pío García-Escudero. El presidente del Senado tomó las riendas del PP de Madrid tras la marcha de Cristina Cifuentes.
En estos esquemas, Santamaría es la que más tiene que perder en Madrid.
Comunitat Valenciana: dividida
La Comunitat Valenciana (8.964 afiliados) sigue a Madrid con el siguiente reparto: Valencia (3.862), Alicante (3.748) y Castellón (1.364). Hasta la fecha, la líder regional, Isabel Bonig, no se ha pronunciado.
En los equipos de los tres candidatos se declaran "fuertes" en esta comunidad y se creen con capacidad de vencer al otro. Casado, destacan, contaría con "buenos apoyos" en la provincia de Alicante, a la que está vinculada familiarmente. Rubén Moreno, exsecretario de Estado de Relaciones con las Cortes, diputado por Valencia y presidente de la gestora de la provincia de Valencia, es un hombre de la máxima confianza de Sáenz de Santamaría. Y Cospedal, dicen los suyos, es "muy apreciada por las bases" por su implicación a la hora de rendir cuentas sobre los escándalos de corrupción que llevan agitando a los conservadores valencianos desde 2009.
Galicia
La comunidad gobernada por Alberto Núñez Feijóo ha registrado un bajo número de inscritos en comparación con su censo oficial: 4.851 afiliados pueden votar el 5 de julio. Las fuentes consultadas achacan esta baja participación –puede ser peor porque no se espera que todos los inscritos acudan a votar– al hecho de que el presidente de la Xunta diese la espantada cuando todos esperaban que se postulase como candidato.
Ahora, los militantes gallegos esperan de su presidente un pronunciamiento, una pista sobre sus preferencias que hasta el momento no ha dado.
No obstante, el grueso de las fuentes consultadas creen que la balanza caerá del lado de Cospedal. En sectores del partido se ha instalado la idea de que Santamaría, en connivencia con el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) que estuvo bajo su competencia en su etapa en la Moncloa, estuvo tras la difusión de las fotografías de Feijóo con el contrabandista Marcial Dorado que publicó el diario El País.
Castilla-La Mancha, Cataluña, Extremadura: feudos de la exsecretaria general
Además de su conocimiento del partido por haber llevado al frente de la secretaría general desde 2008, Cospedal vende como uno de sus principales valores haber ganado elecciones en Castilla-La Mancha, una comunidad tradicionalmente socialista.
Más de 4.800 afiliados se inscribieron para votar en esta comunidad que se considera territorio casi exclusivo de la exministra de Defensa.
En Cataluña pueden votar casi 1.800 afiliados. Y el grueso, consideran todas las fuentes consultadas, apoyaría a Cospedal. La exministra Dolors Montserrat, que suena con fuerza como recambio a Xavier García Albiol al frente de los conservadores de Cataluña, se sumó a la campaña de la ex secretaria general como portavoz.
Esto implica que a Santamaría la operación Cataluña tampoco le salió bien puertas adentro del PP.
Mientras, en Extremadura, donde se inscribieron 1.626 afiliados, los apoyos también se dirigirían mayoritariamente hacia la exministra de Defensa. Lo mismo ocurriría en Aragón, donde han manifestado su deseo de votar 2.105 militantes.
División en Castilla y León: ¿un duelo a tres?
Feudo tradicional de los conservadores, Castilla y León aporta un alto número de afiliados a la votación de jueves: 6.785. Los dirigentes consultados coinciden en que, a priori, Cospedal y Santamaría están muy igualadas. Pero consideran que Pablo Casado, diputado por Ávila y nacido en Palencia, podría dar una sorpresa haciéndose fuerte en estas dos provincias.
También Murcia se dividiría entre quienes apoyan a Santamaría y a Cospedal.
Ver másLa decisión de los afiliados: un vencedor claro o alargar la batalla hasta el congreso
Baleares y País Vasco, más fuerza para Santamaría
2.826 afiliados de Baleares tienen derecho a votar esta semana en la primera ronda. Y 596 del País Vasco. En ambas comunidades se supone más movilizados a quienes creen que el futuro del PP pasa por Soraya Sáenz de Santamaría.
En Euskadi es clave el apoyo que Alfonso Alonso, líder del PP vasco y exministro de Sanidad, presta a la exvicepresidenta. El hecho de que Javier Maroto, exalcalde de Vitoria y responsable de Sectorial del PP, se haya sumado a la candidatura de Casado, sostienen las fuentes consultadas, no alterará mucho los apoyos a Santamaría.
El censo definitivo de la primera fase de votaciones para la elección del sustituto de Mariano Rajoy al frente del Partido Popular es de 66.706 afiliados, lo que representa el 7,6% del total de militantes que asegura tener el partido. Estos son, pues, los llamados a votar entre los seis candidatos el jueves, 5 de julio, en las sedes del PP. Sólo pueden pasar dos a la ronda definitiva, la que tendrá lugar en el XIX Congreso Nacional, que se celebrará en Madrid los días 20 y 21 de julio. María Dolores de Cospedal y Soraya Sáenz de Santamaría se han hecho fuertes en los últimos días, mientras Pablo Casado se ha desdibujado al endurecer el tono de su campaña contra sus dos principales rivales.