En el próximo curso, los estudiantes de grado de cinco comunidades autónomas verán cómo el precio de sus matrículas crece en una proporción superior al IPC. La de Madrid es, sin duda, la comunidad que lleva la delantera en esta subida. Las tasas subirán, de media, un 20%. Este aumento se suma al ya aplicado hace un año, que fue del 38% y que ha provocado que hasta 8.000 universitarios madrileños hayan tenido problemas para abonar las tasas y corran el riesgo de perder el presente curso académico. De hecho, la madrileña es la única comunidad que vuelve a encarecer drásticamente las tarifas por segundo año consecutivo. Otras autonomías que optaron por subirlas en este curso en algunos casos hasta un 66% –Castilla-La Mancha, Cataluña, Canarias o Comunitat Valenciana– han optado ahora por revisarlas conforme a la inflación o incluso congelarlas.
Sin embargo, acompañando a Madrid en el grupo de autonomías que encarecen las matrículas de los grados por encima de la subida de las precios están Baleares (5%), Aragón (3,6%), Cantabria (3,3%) y País Vasco (2,4%). Hay que remarcar que ninguna de estas autonomías experimentaron grandes subidas en el curso 2012-2013. En los másteres es la Comunitat Valencia la que se sitúa en cabeza, con un aumento de las tarifas de un 10%. Los estudiantes, que han pedido el mantenimiento e incluso la bajada de las tarifas, sostienen que estos aumentos en el contexto actual y ante el recorte de las becas que prevé el M inisterio de Educación favorecen la "exclusión social" de algunos alumnos al tiempo que ponen en riesgo la igualdad de oportunidades.
En Baleares, según datos ofrecidos por el Govern, los precios por cada crédito, que varían en función del grado de experimentalidad de la materia, de la carrera y de la reiteración de matrículas, irán de los 12,59 a los 138,79 euros. Esto se traduce en que los estudiantes pagarán entre 120 y 230 euros más por matricularse de un curso completo en la Universitat de les Illes Balears. En Aragón, los precios de los grados de la Universidad de Zaragoza subirán un 3,6% el próximo curso. Y esta variación se aplicará por igual a primeras, segundas, terceras y sucesivas matrículas. Se trata de un aumento similar al sufrido para el presente curso.
Cataluña y Madrid son las únicas comunidades que han subido las tasas hasta el tope que marca la horquilla de precios públicos que el Ministerio de Educación puso a disposición de las autonomías en abril de 2012 y que es del 66%. Para el curso que viene, la primera no encarecerá los precios en la primera matrícula de los grados –en el curso pasado aumentaron entre 151 y 948 euros por curso–. Sí subirán un 2,2% las tasas de las segundas matrículas y de las sucesivas, así como los másteres. No obstante, el decreto de precios universitarios publicados por el Diari Oficial de la Generalitat incluye una excepción relevante. Los alumnos de ingenierías sí verán incrementado el precio de sus matrículas en un 10%. Este aumento se debe a que estos estudios técnicos han pasado de estar en el grupo de coeficiente B al C.
Galicia, Asturias o Extremadura congelan las tarifas para el próximo curso, aunque algunas comunidades sólo lo hacen en la primera matrícula. También mantendrá los precios Canarias que, en el curso 2012-2013, las subió un 42%. Aumentos que rondan el 1% –los mínimos de la horquilla propuesta por el Ministerio de Educación– sufrirán los estudios de grado que ofrecen las universidades públicas de la Comunitat Valenciana (1%), Castilla y León (1,4%), Navarra (1,3%) o Andalucía (1,04%). En Murcia las tarifas subirán un 2%. En el caso de los estudios de posgrado destacan los casos de Aragón y Andalucía, que reducirán los precios un 7 y un 34% respectivamente. En esa última comunidad, según estimaciones de los estudiantes, los precios podrían reducirse en hasta 500 euros.
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Facilidad en los pagos
Para atenuar el impacto del encarecimiento de las matrículas –ya sea por las subidas previstas para el próximo o por las experimentadas en el presente curso– varias universidades han puesto en marcha fórmulas para fraccionar los pagos. En Madrid, la consejera Lucía Figar ha dado autorización de las universidades para poder establecer sus calendarios, los alumnos podrán elegir la forma de pago –único o fraccionado– en función de sus necesidades académicas. Hasta ahora era "obligatorio" pagar parte de la matrícula (50%) en septiembre, otro 25% en diciembre y el 25% en enero. Según la responsable de Educación madrileña "algunas" universidades van a aceptar el tipo de pago mensual.
Los alumnos de las universidades públicas de la Comunitat Valenciana también podrán pagar las tasas de forma fraccionada mes a mes por primera vez el próximo curso. No podrán hacer los mismo los estudiantes de la Universidad de Extremadura después de que el Parlamento de esa comunidad rechazara una propuesta socialista que planteaba aumentar de dos a tres el número de pagos de las tasas.
En el próximo curso, los estudiantes de grado de cinco comunidades autónomas verán cómo el precio de sus matrículas crece en una proporción superior al IPC. La de Madrid es, sin duda, la comunidad que lleva la delantera en esta subida. Las tasas subirán, de media, un 20%. Este aumento se suma al ya aplicado hace un año, que fue del 38% y que ha provocado que hasta 8.000 universitarios madrileños hayan tenido problemas para abonar las tasas y corran el riesgo de perder el presente curso académico. De hecho, la madrileña es la única comunidad que vuelve a encarecer drásticamente las tarifas por segundo año consecutivo. Otras autonomías que optaron por subirlas en este curso en algunos casos hasta un 66% –Castilla-La Mancha, Cataluña, Canarias o Comunitat Valenciana– han optado ahora por revisarlas conforme a la inflación o incluso congelarlas.