Pedro Sánchez se acerca a la encrucijada. El secretario general del PSOE y candidato a la Presidencia del Gobierno deberá elegir en los próximos días si continúa las negociaciones para su investidura con Podemos o con Ciudadanos, ya que las dos fuerzas expresaron de nuevo este martes su rechazo a apoyar una opción en la que participe el otro. El partido de Albert Rivera, incluso, fijó la fecha en la que tendrá que tomarse esta decisión: durante esta semana.
Casi dos meses después de las elecciones generales, el calendario está cada vez más apretado. Este mismo lunes, el presidente del Congreso, Patxi López, hizo público que el debate de investidura de Sánchez se celebrará el próximo 2 de marzo, y aunque la primera votación –en la que necesitaría mayoría absoluta– no se llevará a cabo hasta el día 3 y la segunda –en la que únicamente es necesaria la mayoría simple y que, hoy por hoy, parece la elección clave– tendría lugar el sábado 5, los tiempos del PSOE obligan a Sánchez a alcanzar un pacto, como tarde, el 25 de febrero. En los días posteriores, sería la ejecutiva de los socialistas y también su militancia las que tendrían que dar luz verde al acuerdo.
Este martes, Podemos y Ciudadanos pusieron más presión sobre los hombros de Sánchez con las declaraciones de algunos de sus dirigentes, que emplazaron al líder socialista a que decida con cuál de las dos fuerzas –que se consideran incompatibles entre sí para formar parte de un mismo acuerdo– quiere pactar. Las opciones son dos: o bien un pacto con Podemos, las confluencias, Compromís e IU, que también necesitaría el apoyo del PNV y la abstención de los nacionalistas catalanes –que este martes reafirmaron su rechazo a Sánchez si no apoya el referéndum en Cataluña–; o bien un acuerdo con Ciudadanos que implicara la abstención del PP, toda vez que Podemos ya ha asegurado que no lo apoyaría ni se abstendría.
Los programas de Podemos y Ciudadanos son antagónicos
"Las posibilidades aritméticas no son infinitas, y básicamente conminan al PSOE a elegir intentar la abstención del PP o caminar hacia un Gobierno de coalición" entre PSOE, Podemos, IU y Compromís, sostuvo en esta línea el portavoz de Podemos en el Congreso, Íñigo Errejón. Por su parte, Juan Carlos Girauta, su homólogo en Ciudadanos, aseguró que esta es la "semana decisiva" en la que "el PSOE va a tener que elegir [...] entre optar entre por el reformismo regenerador, europeísta, constitucionalista; o una opción que significa más paro, una subida desbocada de los impuestos a la clase media trabajadora y menos España".
Y es que los dos partidos emergentes llevan semanas advirtiendo de que tienen posturas irreconciliables en aspectos programáticos clave. Pese a la insistencia del PSOE en hacer un frente común con las "fuerzas del cambio", lo cierto es que Podemos y Ciudadanos discrepan seriamente en materias como la fiscalidad, la regulación del mercado laboral, las políticas de vivienda y contra los desahucios y, especialmente, el modelo territorial. “Entiendo que Ciudadanos no tendría espacio en un Gobierno de progreso” porque programáticamente es “asimilable al PP”, dejó claro el pasado lunes el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias. "Hay un momento en que te tienes que definir por contenidos y por proximidad. Estamos a años luz de Podemos", sostuvo por su parte Girauta este martes.
Por el contrario, los documentos para negociar que han presentado los socialistas y el partido morado durante estos días tienen amplias coincidencias a nivel social y también plantean puntos de encuentro en lo económico, como la necesidad de negociar con Bruselas la aminoración del ritmo de reducción del déficit público. Pero el gran tema que los separa es Cataluña, ya que Iglesias sigue considerando "imprescindible" un referéndum en Cataluña y el PSOE lo rechaza de manera "definitiva, meridiana, nítida y clara", en palabras de su portavoz en el Congreso, Antonio Hernando.
Las conversaciones entre PSOE y Podemos, paradas
A ello hay que sumar las desconfianzas presentes entre ambas formaciones. Y es que, pese a que en público las apelaciones al otro partido para que se avenga a negociar son continuas, algunos dirigentes de PSOE y Podemos están convencidos de que su contraparte no quiere ni siquiera entablar conversaciones. "Es la hora de aprovechar la oportunidad, si es que de verdad quiere sumarse al cambio", apelaba Hernando a Iglesias el lunes. "Hay algunos que piensan que Pedro va a preferir pactar con Ciudadanos y con el PP. Yo quiero pensar que no, quiero pensar que es un socialista de corazón que va a preferir pactar con nosotros y con IU antes que con las derechas", barruntaba el propio líder de Podemos este martes.
Mientras tanto, las conversaciones siguen estancadas, y Errejón explicó este martes que hasta que no se produzca una reunión entre los líderes de Podemos y el PSOE, el partido morado no constituirá su comisión negociadora. Las últimas diferencias son de método: Iglesias reclama reunirse con Sánchez para poder presentarle personalmente la propuesta de Podemos, mientras que el líder de los socialistas rechaza este encuentro y asegura que se hará "la foto" con el número uno de Podemos cuando alcancen un acuerdo, aunque también señaló que el PSOE estudiará el documento del partido morado.
En este sentido, Sánchez deploró este martes que Podemos, a su juicio, negocie "a través de ruedas de prensa" y aseguró que el equipo negociador de los socialistas estudiará el documento de propuestas de Podemos y añadirán a su propio escrito las iniciativas que compartan, tras lo que remitirán de nuevo el documento actualizado a Podemos. No obstante, el candidato socialista ya dejó entrever que el incremento del gasto social en 96.000 millones de euros durante la legislatura que plantea Podemos no será una de esas coincidencias, y sostuvo que el partido de Iglesias crea "falsas expectativas" con esta propuesta.
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El PP descarta apoyar un pacto PSOE-Ciudadanos
Mientras tanto, el PP contempla las negociaciones desde la barrera. Sánchez ha rechazado cualquier tipo de acercamiento a los conservadores para pedirles su apoyo, a pesar de que Ciudadanos insiste en que son necesarios para alcanzar un acuerdo. "Ellos están insistiendo en que no" apoyarán un pacto PSOE-Ciudadanos, pero "lo que nos gustaría es que lo digan cuando hayan visto los documentos sobre los que estamos trabajando, los compromisos y las reformas que creemos que son necesarias", señaló el lunes el secretario general del partido naranja en el Congreso, Miguel Gutiérrez.
El PP, sin embargo, sigue apostando por Mariano Rajoy como candidato a la Presidencia del Gobierno, pese a que el presidente en funciones declinó la petición del rey para someterse a la investidura. El portavoz parlamentario de los conservadores, Rafael Hernando, afirmó este martes que Rajoy está "dispuesto" ahora a tratar de obtener apoyos para ser investido si Sánchez no lo consigue, pero descartó de nuevo apoyar con la abstención del PP un acuerdo entre PSOE y Ciudadanos porque su partido no puede estar "permanentemente en el bar". "El problema no es abstenerse en una votación, el problema es que hay que gobernar", zanjó Hernando.
Pedro Sánchez se acerca a la encrucijada. El secretario general del PSOE y candidato a la Presidencia del Gobierno deberá elegir en los próximos días si continúa las negociaciones para su investidura con Podemos o con Ciudadanos, ya que las dos fuerzas expresaron de nuevo este martes su rechazo a apoyar una opción en la que participe el otro. El partido de Albert Rivera, incluso, fijó la fecha en la que tendrá que tomarse esta decisión: durante esta semana.