El Gobierno central está teniendo serios problemas para que su relato se imponga al de los independentistas en la batalla comunicativa que se ha desatado de cara al referéndum del 1 de octubre. Así se lo ha trasladado este lunes el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, a una veintena de corresponsales extranjeros con los que se ha reunido en Madrid. "Ha admitido que quizá el Ejecutivo, que se está dedicando a contar lo que hay y dejar actuar a la justicia, está teniendo dificultades de comunicación a la hora de hacer frente al mensaje de Cataluña, muy claro y fácil de transmitir", sostienen en conversación con infoLibre fuentes conocedoras del encuentro. "Es muy fácil decir que el Gobierno está siendo opresor o que votar es un derecho democrático", ha dicho Dastis, que ha criticado, según otras fuentes, las "mentiras" con las que está jugando el encuentro en los medios el sector soberanista catalán.
La reunión, que arrancó a mediodía en el Palacio de Viana, residencia oficial del ministro, se prolongó durante casi hora y media y giró casi por completo en torno al referéndum del 1-O. Sin embargo, la cita no convenció a los corresponsales. "Nos han dicho que todo en off the record pero, sin embargo, no han contado novedades ni nada mínimamente trascendente", reconoce uno de los asistentes a la cita, que explica que "una gran parte" del encuentro han sido "perogrulladas y evasivas". "Honestamente, no sé ni para qué nos han convocado", añade otro corresponsal en conversación con este diario. "Gran parte del problema se encuentra en el off the record. Cuando sólo tenemos a la Generalitat dando declaraciones on the record, pues entonces se produce cierto desequilibrio en el relato. Si tuviéramos la posibilidad de recoger la versión de las dos partes...", señalan otras fuentes.
La reunión con Dastis a menos de una semana de la hipotética consulta es la tercera que el Ejecutivo conservador organiza con corresponsales extranjeros en las dos últimas semanas. La primera fue el pasado 7 de septiembre con el portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, que mantuvo una conversación a puerta cerrada durante más de una hora. La segunda, tal y como desveló El Confidencial fue con la ministra de Sanidad, Dolors Monserrat, y con el secretario de Estado de relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, el pasado 13 de septiembre. El Gobierno es consciente de las dificultades que está teniendo a la hora de vender su posición de cara al exterior y se está empleando a fondo para intentar remontar la situación. "Aunque es cierto que de vez en cuando nos invitan a este tipo de eventos, no es normal que organicen en dos semanas tres reuniones con nosotros. No es el procedimiento habitual en absoluto", reconocen un asistente.
¿Preocupación en Europa?
Otros miembros del Ejecutivo van incluso más allá que Dastis y admiten en conversaciones privadas que la batalla mediática fuera de las fronteras españolas está perdida definitivamente. Sin embargo, sostienen que Rajoy tiene ganado el enfrentamiento político a nivel internacional. A pesar de que en las últimas dos semanas sólo el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, se ha pronunciado abiertamente sobre la consulta del 1-O, estos miembros recuerdan que en lo que va de año sí que se han producido diferentes muestras de respaldo al Gobierno central. Por ello, el PP ha recogido en su argumentario de este lunes, al que ha tenido acceso infoLibre, declaraciones de cuatro líderes internacionales –Antonio Tajani, Angela Merkel, Emmanuel Macron y Paolo Gentiloni– apostando por la unidad territorial.
Según varios asistentes a la reunión de este lunes, el ministro de Exteriores también fue cuestionado sobre la opinión de los colegas europeos. "Dijo que estaba satisfecho con los apoyos recibidos y que no esperaba más mensajes del entorno europeo", explican las fuentes consultadas por este diario, que añaden que Dastis ha asegurado que ninguno de los socios del Viejo Continente le ha trasladado "preocupación" ni sobre lo que vaya a pasar el 1-O ni tampoco sobre la opción de que la consulta "pueda prender en Europa". Algo que contrasta con las declaraciones que el pasado viernes realizó el jefe de gabinete de Juncker, Martin Selmyr, durante un debate organizado por el think tank Centre por European Policy Studies, donde admitió que la Comisión Europea está siguiendo "con preocupación" la situación en Cataluña.
Ver másVítores y banderas de España para despedir a los guardias civiles que van a Cataluña: "¡A por ellos!"
Votación alternativa y reforma constitucional
Durante más de una hora, ministro y corresponsales estuvieron charlando sobre la crisis catalana. A medida que avanzó la conversación, la pregunta del millón se colocó sobre la mesa: ¿Qué va a pasar el 1-O? Aunque Dastis trató en un primer momento de esquivar la cuestión –"Es difícil hacer predicciones", dijo–, finalmente el titular de Exteriores, según señalan asistentes al encuentro, afirmó que él cree que se organizará una especie de votación alternativa al referéndum. "Dijo que podía haber una especie de jornada festiva en la que se montasen tenderetes en las plazas y un sucedáneo de votación", apunta uno de los corresponsales. El ministro se salió de este modo del guión oficial del Gobierno, que ha repetido por activa y por pasiva que el próximo 1 de octubre no se celebrará ningún tipo de consulta.
El titular de Exteriores, completan las mismas fuentes, rechazó por completo que se vaya a producir una declaración unilateral de independencia –"No creo, aunque muchas locuras se han hecho en el pasado"– y se mostró "preocupado" ante los periodistas por si el próximo domingo "se repiten actos violentos" en Cataluña. Y también dio su opinión sobre la posibilidad de una reforma constitucional. Sin embargo, en este sentido los puntos de vista de los asistentes difieren. Unos señalan que ha apoyado esta vía de salida al conflicto "de manera más clara que otros ministros". Otros, sostienen que ha expresado que aunque la disposición de revisar el sistema autonómico "es sincera" él apuesta por "retoques mínimos" que no entren en la Carta Magna.
El Gobierno central está teniendo serios problemas para que su relato se imponga al de los independentistas en la batalla comunicativa que se ha desatado de cara al referéndum del 1 de octubre. Así se lo ha trasladado este lunes el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, a una veintena de corresponsales extranjeros con los que se ha reunido en Madrid. "Ha admitido que quizá el Ejecutivo, que se está dedicando a contar lo que hay y dejar actuar a la justicia, está teniendo dificultades de comunicación a la hora de hacer frente al mensaje de Cataluña, muy claro y fácil de transmitir", sostienen en conversación con infoLibre fuentes conocedoras del encuentro. "Es muy fácil decir que el Gobierno está siendo opresor o que votar es un derecho democrático", ha dicho Dastis, que ha criticado, según otras fuentes, las "mentiras" con las que está jugando el encuentro en los medios el sector soberanista catalán.