En toda disputa electoral, importan tanto los números como los golpes psicológicos al adversario. Y la carrera por la sucesión del PSOE lo es, y los aspirantes a la Secretaría General lo saben. Por eso tanto Pedro Sánchez como Eduardo Madina compitieron en su particular guerra de avales. El primero intentó este jueves tomar la delantera a su principal contrincante. Anunció que ya tiene los 9.874 avales necesarios para ser proclamado candidato. No quiso decir la cifra exacta, pero sí que superaba ese listón con holgura.
Por la tarde, Madina respondió con números. Su equipo llevó a la sede federal del partido un total de 15.020 firmas. A esta cifra, según explicó su jefa de campaña, Imma Aguilar, se sumarán todos los que vayan llegando, porque el plazo para entregar todos los apoyos concluye mañana viernes, a la medianoche. Aguilar dijo a las puertas de Ferraz que les ha "sorprendido" el número de avales que se han ido enviando, especialmente a última hora. Fuentes próximas al diputado señalaron que es posible que se supere el umbral de los 20.000 respaldos, más del doble de los necesarios, aunque no hay ningún objetivo fijado, informa Europa Press.
Aguilar incidió en que no quieren entrar en una competición por ver quién tiene más rúbricas. "No estamos haciendo una guerra con el número de avales, pretendemos ir a una campaña de votos. Nos dirigimos a todos los militantes de este partido y el número de avales nunca lo hemos considerado una cifra para competir, sino un requisito que hemos cumplido con la entrega de esta tarde". La mayor parte de ellos proceden de la Comunitat Valenciana, aunque hay algunas grandes federaciones aún no han enviado sus hojas. No dijo si entre las avalistas está Elena Valenciano, la vicesecretaria general, a quien se sitúa cercana a Madina. La jefa de campaña agradeció a los militantes el "empeño, el esfuerzo y la muchísima ilusión" con que están ayudando al equipo.
Los avales llegaron a Ferraz en seis cajas que portaban Aguilar, los diputados Ignacio Sánchez-Amor, Laura Seara, Patricia Hernández y el ex secretario general de la Presidencia con José Luis Rodríguez Zapatero, Bernardino León.
Madina habló desde Salamanca, adonde se desplazó desde Madrid para un acto con militantes. Allí dijo que es "un honor" contar con los avales. La votación del 13 de julio, añadió, puede dar lugar "al proyecto de cambio más valiente y más profundo del partido desde 1982" gracias a un congreso "histórico, especial y distintos a todos", ya que la elección se hará con voto directo, informa Europa Press.
Los avales, "la encuesta más fiable"
Horas antes, Sánchez hacía el anuncio. "Hoy puedo confirmar que tengo más de los 10.000 avales y en consecuencia puedo decir que pasaré ese corte y competiré por la Secretaría General del PSOE. No sé exactamente la cifra, pero es bastante elevada", adelantó. El parlamentario insistió en que, no obstante, "lo importante" es la votación de los 197.468 militantes del partido el 13 de julio, en voto directo, secreto y en urna. A la vez, deslizó este recordatorio a su rival: que el número de avales será, por ahora, "la encuesta más fiable de lo que puede ser el resultado". Sánchez lo decía porque el entorno del diputado vasco celebraba la semana pasada un sondeo de El Mundo que le colocaba como favorito entre los votantes socialistas.
Pedro Sánchez atiende a los periodistas en el patio del Congreso, este jueves | EFE
Sánchez agradeció el apoyo de los militantes que han apostado por él, y subrayó que su "aval" es el "trabajo" que está haciendo y continuará desarrollando. Así, ha hecho más de 12.000 kilómetros desde que comenzó el periodo de recogida de rúbricas, y ha protagonizado 40 actos por toda España. Su objetivo, dijo, es un PSOE "cambiado, unido y fuerte", para "hacer frente a una derecha que está causando mucho dolor".
Se daba por descontado que tanto él como Madina lograrían las firmas necesarias. Más dudoso es que pueda alcanzar ese umbral José Antonio Pérez Tapias, el tercer rival más fuerte. Pero hasta hoy ninguno de los dos diputados lo había confirmado con rotundidad. Una vez entregados los avales, será la Comisión Federal de Garantías la que valide los apoyos y ofrezca el recuento definitivo. El 2 de julio los aspirantes al trono del PSOE serán proclamados definitivamente.
Sánchez matiza sobre Cataluña
Sánchez aprovechó sus declaraciones a los medios en el Congreso para salir al paso de la polémica que ayer él mismo suscitó en Barcelona. El candidato abogó por un "trato fiscal especial" para Cataluña y su reconocimiento como nación, y también defendió el federalismo asimétrico, que podría materializarse en competencias "exclusivas" como cultura y lengua. Hoy, para hacer frente a la "confusión" suscitada, Sánchez aclaró que él "siempre" ha defendido la Declaración de Granada pactada por los socialistas hace casi un año. "La España federal por la que apuesto es la España de la Declaración de GranadaDeclaración de Granada, el acuerdo que fue aprobado por todos los secretarios generales y también por la actual ejecutiva federal, a la que no pertenezco, pero me reconozco en esa declaración", dijo. Ello implica defender que la soberanía nacional reside en el pueblo español y que se fundamenta en la igualdad de todos los ciudadanos, la solidaridad y la diversidad.
Respecto a la cuestión fiscal, señaló que se está en la "antesala" de la reforma de la financiación autonómica, en el que se deberían reconocer "las especificidades de todos y cada uno de los territorios de España". ¿Cataluña merece un trato diferente". Lo que quiere es que "todos los sistemas de financiación, respetando la igualdad y la solidaridad de todos los españoles, garanticen un sistema acorde con todos y cada uno de los pueblos de España, Cataluña, Andalucía, Madrid, País Vasco, Canarias, etc". Y, como gesto contra Madina, reivindicó que "nunca" ha defendido un "referéndum legal ni acordado", sino "la reforma constitucional, la España federal y el referendo por parte de todos los españoles".
En el equipo del diputado vasco no daban crédito a las declaraciones de Sánchez de ayer. "Si él hubiera dicho eso, le habrían curtido por todos lados, le mandan en barco desde Cartagena", ilustraban, con evidente enfado.
En toda disputa electoral, importan tanto los números como los golpes psicológicos al adversario. Y la carrera por la sucesión del PSOE lo es, y los aspirantes a la Secretaría General lo saben. Por eso tanto Pedro Sánchez como Eduardo Madina compitieron en su particular guerra de avales. El primero intentó este jueves tomar la delantera a su principal contrincante. Anunció que ya tiene los 9.874 avales necesarios para ser proclamado candidato. No quiso decir la cifra exacta, pero sí que superaba ese listón con holgura.