La pérdida de influencia del sector errejonista en Podemos quedó certificada el pasado sábado en la reunión del nuevo Consejo Ciudadano de la formación morada, en la que la nueva dirección del partido decidió que Íñigo Errejón dejase de ser número dos de Podemos y que su corriente únicamente cuente con tres de los 15 puestos de los que consta la nueva ejecutiva. Pero, más allá de los dirigentes más visibles, el errejonismo también ha retrocedido posiciones en la estructura de áreas de trabajo, ya que ha perdido el control de equipos como Igualdad, Argumentario o Redes Sociales.
La incontestable victoria de las tesis y la lista encabezadas por el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, en el congreso de Vistalegre II, ha dejado manos libres al sector pablista para reorganizar el partido a su gusto. El pasado sábado se ejecutó la parte fundamental de este cambio de roles. Irene Montero sustituyó a Errejón como portavoz en el Congreso, se eligió la nueva ejecutiva con una amplia mayoría absoluta de partidarios de Iglesias y también se escogieron los miembros del gobierno en la sombra de Podemos, donde igualmente los afines al secretario general son mayoría.
El Consejo Ciudadano tuvo una cuarta tarea: elegir a los integrantes de cada área de trabajo, el esqueleto interno de la estructura estatal de Podemos. En ese reparto puede comprobarse cómo Errejón y los suyos han perdido buena parte de la influencia y el poder orgánico que mantenían hasta ahora, más allá de la desaparición de la Secretaría Política que controlaba el hasta el sábado número dos de Podemos. Esa supresión ha sido uno de los golpes más duros para el errejonismo, pues de ese departamento dependían asuntos tan relevantes como la estrategia del partido.
De esta manera, en el nuevo esquema, el área de Argumentario dependerá directamente de Iglesias. A Jorge Moruno –el destacado errejonista que coordinaba el departamento– lo sustituye Pedro Antonio Honrubia, militante del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) y uno de los integrantes de la Unidad de Análisis de la Secretaría General, el grupo de asesores más próximo a Iglesias, que desde hace meses se encargaba de prepararle un argumentario diferente al recibido por el resto de los dirigentes del partido.
Moruno, por su parte, pasa de ser el coordinador del mensaje público de Podemos a ocupar puestos en dos áreas de menor relevancia pública: Economía, Energía y Modelo Productivo y Soberanía alimentaria, mundo rural y sostenibilidad. En ellas trabajará junto a una mayoría de dirigentes próximos a Iglesias: en la primera de las áreas compartirá espacio con los líderes de Podemos en Baleares y Cantabria, Alberto Jarabo y Julio Revuelta, y la eurodiputada Estefanía Torres, mientras en la segunda tendrá como compañeros a dirigentes como Diego Cañamero, Ariel Jerez o Irene de Miguel, también afines al secretario general.
Redes Sociales, Igualdad y Finanzas
Al área de Redes Sociales, hasta ahora otro de los puntales del errejonismo que coordinaba Eduardo Fernández Rubiño, diputado en la Asamblea de Madrid, también acceden los dirigentes pablistas. En la nueva estructura, el área se denominará Estrategia e Innovación en Redes Sociales, dependerá de la Secretaría de Comunicación –dirigida por Juanma del Olmo, uno de los colaboradores más estrechos de Iglesias– y en ella trabajarán dirigentes como Héctor Juanatey –elegido miembro del Consejo Ciudadano en la lista de Iglesias– o Julián Macías, próximo a las tesis del secretario general. Rubiño, por su parte, queda reubicado en las áreas de LGTBI y Educación, mientras colaboradores suyos como Guillermo Paños o Nagua Alba –secretaria general de Podemos Euskadi– desaparecen de la estructura estatal.
Igualdad era otra de las áreas controladas que el errejonismo controlaba hasta el sábado pero en las que a partir de ahora estará en minoría. Su antigua responsable, Clara Serra, ni siquiera estará presente en el espacio –que pasa a tomar la denominación de "Feminismos"–: la dirigente pasa al área de Políticas Autonómicas, que compartirá con dos dirigentes próximas a Errejón (Jéssica Albiach y Loreto Arenillas) y cuatro pablistas (Pablo Fernández, José García Molina, Pilar Garrido y Álvaro Jaén). Feminismos, de esta manera, quedará integrado por Sofía Castañón –que coordinará el departamento con un asiento en la ejecutiva–, Pilar Lima, Esther Sanz, Beatriz Gimeno, Ángela Rodríguez e Inma Ramos. Las tres primeras son próximas a Iglesias, mientras Gimeno –histórica militante feminista– pertenece a la corriente anticapitalista y Rodríguez es errejonista.
Finanzas y Transparencia, igualmente, estaba controlada por el errejonismo en la anterior etapa y ahora pasará a manos pablistas. El anterior coordinador, el diputado Segundo González, concurrió en Vistalegre II encuadrado en la lista promovida por Errejón, pero no consiguió asiento en el Consejo Ciudadano; su puesto al frente del área de Finanzas será ocupado por Daniel de Frutos, que hasta el sábado era uno de los miembros del equipo de González y que fue elegido miembro de la dirección en la candidatura de Iglesias.
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Cultura o Exteriores siguen en manos errejonistas
Por su parte, la portavoz en el ayuntamiento de Madrid, Rita Maestre, sí seguirá integrada en el equipo de Municipalismo –nombre que adquiere el antiguo área de Políticas Municipales–, aunque pasará de coordinarlo a defender las tesis errejonistas en minoríaerrejonistas . Compartirá equipo con cuatro dirigentes próximos a Iglesias –el líder de Podemos en la Comunidad de Madrid, Ramón Espinar; su homólogo extremeño, Álvaro Jaén; Esther Sanz y David Soto– y una cercana a Errejón, Ángela Rodríguez.
Por el contrario, el errejonismo sigue manteniendo la mayoría en áreas como Cultura o Exteriores. En el primero de los casos, el equipo está formado por cinco errejonistas –Jorge Lago, Daniel Iraberri, Clara Nieto, María Serrano y Pepe Viyuela– y cuatro pablistas –Sofía Castañón, Ana Domínguez, Belén Guerra y Héctor Juanatey–. En el segundo, de entre los próximos a Errejón están presentes Pablo Bustinduy –que además lidera el área con un puesto en la ejecutiva–; la exsecretaria de Coordinación, Àngela Ballester; la eurodiputada Tania González y Pedro de Palacio; del sector más cercano a Iglesias trabajarán en el equipo el diputado Txema Guijarro y la senadora Idoia Villanueva. También estará presente Esperanza Jubera, hasta ahora representante de los círculos de Podemos en el extranjero.
La pérdida de influencia del sector errejonista en Podemos quedó certificada el pasado sábado en la reunión del nuevo Consejo Ciudadano de la formación morada, en la que la nueva dirección del partido decidió que Íñigo Errejón dejase de ser número dos de Podemos y que su corriente únicamente cuente con tres de los 15 puestos de los que consta la nueva ejecutiva. Pero, más allá de los dirigentes más visibles, el errejonismo también ha retrocedido posiciones en la estructura de áreas de trabajo, ya que ha perdido el control de equipos como Igualdad, Argumentario o Redes Sociales.