Madrid, 1 de diciembre de 2020. Un grupo de sanitarios se agolpa en plena avenida Manuel Fraga Iribarne, en el barrio de Valdebebas, frente a un paso de peatones que cierra a cal y canto un cordón policial. Frente a ellos, un edificio de reciente construcción enfocado en todo momento por decenas de cámaras. En su interior, un grupo de periodistas permanece sentado en una gran habitación cuya cristalera permite divisar algunos de los carteles que sobre sus cabezas sostienen las médicas, enfermeros o celadoras –"Menos hospitales y más profesionales"– agolpadas al otro lado de la vía. Los plumillas esperan a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. Al fin y al cabo, en el programa de inauguración del Hospital Enfermera Isabel Zendal, la joya de la corona de su gestión sanitaria, está previsto que atienda a los medios. Sin embargo, es el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, quien, a media mañana, entra sonriente y toma asiento en la gran mesa que preside la llamada sala de prensa. Una gran pieza de color blanco por la que el Ejecutivo regional ha desembolsado algo más de 4.500 euros.
Tras la primera ola de la pandemia y el apagón de Ifema, el centro ubicado al norte de la capital junto al aeropuerto, se convirtió en una de las piedras angulares de la propaganda que salía desde la Puerta del Sol. Fuera cual fuera el discurso de la presidenta, siempre encontraba unos segundos para introducir menciones a su hospital milagro. Ese que la oposición ha definido en todo momento como un descomunal agujero de dinero público. Aunque se presupuestó por unos 50 millones de euros, el coste final –solo el esqueleto del edificio, no su contenido– terminó superando los 140 millones. La ristra de contratos alrededor del Zendal se cuenta por decenas. Están los de las constructoras, los de equipamiento médico o los centrados en el suministro de determinados servicios. Y, entre todos ellos, los de las llamadas salas "polivalentes". Como la de prensa, para la que el Ejecutivo madrileño ha desembolsado 369.759 euros –IVA incluido–.
Esta licitación, aunque se concretó a mediados de noviembre de 2020, no fue publicada en el Portal de la Contratación Pública hasta el pasado mes de marzo. Y, por supuesto, sin detallar el equipamiento concreto que se adquirió a El Corte Inglés, la empresa que se hizo con el contrato por la vía de la emergencia, ni el coste de cada uno de los objetos comprados para la estancia ubicada en la primera planta del edificio principal. Una información que ahora pone sobre la mesa tras una petición de Más Madrid, el principal grupo de la oposición.
En total, el albarán de entrega de suministro refleja casi un centenar de conceptos agrupados en cuatro capítulos diferentes: equipamiento, iluminación, audiovisuales y "varios zonas anexas". También deja constancia del coste que tuvo el montaje, instalación y puesta en funcionamiento de los materiales adquiridos, cuyo coste se incluye sin IVA. "Invertir estas enormes cantidades en hacer ruedas de prensa muestra sus prioridades. Priorizan la propaganda a la salud", se han quejado desde la formación verde.
2.780 euros por pantallas de doce pulgadas
El mayor desembolso se ha hecho en lo relativo a medios audiovisuales: algo más de 184.000 euros. Siempre según el albarán, se ha comprado un mezclador de vídeo multicapa y conmutador de presentación sin interrupciones valorado en 17.105,90 euros, un iPad de 32 gigas de capacidad por 1.015,53 euros, tres cámaras PTZ valoradas cada una en 2.481,47 euros –7.444,41 euros en total– o un micrófono con un coste de 1.505 euros. Y gran cantidad de pantallas. Por ejemplo, el Gobierno regional ha pagado por tres monitores de 12 pulgadas integrados en mesa 8.340 euros –2.780 cada uno– o por nueve pantallas videowall de 55 pulgadas 39.222 euros –4.358 euros cada una–.
"No hemos conseguido encontrar monitores de estas características en el mercado por encima de 2.500 euros cada una", ha señalado este martes durante la Comisión de Vigilancia de las Contrataciones la diputada de Más Madrid Alodia Pérez, quien ha criticado que la información facilitada sea "demasiado general" y no detalle la marca y el modelo concreto de todos estos aparatos.
También consta, en este mismo capítulo, un pago de 40.200 euros en concepto de "instalación de elementos". Una partida que figura, del mismo modo, en el apartado de iluminación, por la que abonaron a El Corte Inglés alrededor de 22.000 euros. Solo el montaje de las diferentes luminarias o líneas de iluminación de la estancia salió al Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso por algo más de 6.000 euros.
Mil euros para una alfombra redonda
Y luego está todo el equipamiento: 60.541 euros. Preside la sala de prensa una mesa de 4.540 euros y un sillón de 317 euros. Junto a ellos, tres banderas –Unión Europea, España y Comunidad de Madrid–, un pack por el que se desembolsaron 1.197 euros. Más de 2.500 euros costaron dos armarios y 752 euros el atril.
Para la sala de prensa, el Gobierno de Díaz Ayuso también se hizo con un sofá, un par de sillones, una lámpara de pie y una mesa de centro, con un precio de 273 euros. Además, adquirió una alfombra redonda, pagando por ella 1.103 euros. Sin embargo, los importes más importantes correspondieron a todos aquellos elementos decorativos: celosía, 17.650 euros; tarima, 4.706 euros; papel vinílico, 6.085 euros...
La factura se completa con varios elementos que no se corresponden estríctamente con dicha estancia, sino que forman parte de algunas de las zonas anexas. Así, por ejemplo, se incluyen en dicho capítulo monitores para el Summa 112 o dos mostradores instalados en la planta baja del edificio de entrada al centro sanitario.
Usada "un par de veces" por la prensa
El Gobierno de Ayuso comienza a retirar sanitarios del Zendal nueve meses después de su puesta en marcha
Las licitaciones de la sala de prensa y la de "crisis" del Zendal, esta última con un coste de 323.958,14 euros, marcaron este lunes parte de la sesión de la Comisión de Vigilancia de las Contrataciones. "Estamos hablando de un hospital que no tiene sanitarios propios pero sí una estancia para que la presidenta pueda seguir haciendo propaganda", ha dicho durante su intervención la portavoz de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid, Carolina Alonso, quien ha afeado el "abuso" que el Ejecutivo regional hace de la "contratación de emergencia" y ha mostrado su hartazgo por ver cómo siempre son "las mismas empresas" las que se llevan las contratas. "¿Qué tiene El Corte Inglés que no tengan las pequeñas y medianas empresas madrileñas? Conexiones, contactos", ha dicho la diputada morada. Por el momento, tal y como ha señalado la socialista Carmen López, la compañía presidida por Marta Álvarez se ha hecho ya con contratos de este centro de nueva construcción por un total de "tres millones de euros".
En relación con estas adjudicaciones, los grupos de la oposición habían pedido la comparecencia del consejero de Sanidad. Sin embargo, ha sido el director general de Hospitales e Infraestructuras Sanitarias y exresponsable del Zendal, Fernando Prados, quien se ha sentado en la Cámara regional para responder a las preguntas. "¿Otros hospitales tienen también sala de prensa y sala de crisis?", ha comenzado planteando la parlamentaria de Más Madrid. "No, pero tienen otras salas polivalentes para hacer otras actividades que, evidentemente, les pueden servir exactamente igual que las que se tienen en el Hospital Enfermera Isabel Zendal", ha respondido Prados durante su primera intervención, en la que ha remarcado que son estancias de "absoluta necesidad".
Y lo son, ha querido recalcar el director general, porque, a pesar de su nombre, se utilizan para muchas otras tareas. Es decir, son "multiusos". De hecho, el también médico ha reconocido que a la estancia no se le ha dado aún demasiado uso desde el punto de vista mediático. "Es cierto que la prensa ha venido un par de veces, pero también es cierto que esa sala se ha usado más de trescientas", ha apuntado. Por ejemplo, ha querido concretar, "para sesiones clínicas" o para "presentaciones de personal". Desde la Consejería de Sanidad también explican que ha servido como "apoyo" para los diferentes eventos que ha acogido el Zendal –el Congreso Internacional sobre Covid, el Primer Encuentro de Alternativas Asistenciales a la Pandemia o una reunión de la Federación Madrileña de Municipios–, para encuentros de enfermería o para sesiones del Laboratorio Regional de Salud Pública, ubicado en el mismo edificio.
Madrid, 1 de diciembre de 2020. Un grupo de sanitarios se agolpa en plena avenida Manuel Fraga Iribarne, en el barrio de Valdebebas, frente a un paso de peatones que cierra a cal y canto un cordón policial. Frente a ellos, un edificio de reciente construcción enfocado en todo momento por decenas de cámaras. En su interior, un grupo de periodistas permanece sentado en una gran habitación cuya cristalera permite divisar algunos de los carteles que sobre sus cabezas sostienen las médicas, enfermeros o celadoras –"Menos hospitales y más profesionales"– agolpadas al otro lado de la vía. Los plumillas esperan a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. Al fin y al cabo, en el programa de inauguración del Hospital Enfermera Isabel Zendal, la joya de la corona de su gestión sanitaria, está previsto que atienda a los medios. Sin embargo, es el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, quien, a media mañana, entra sonriente y toma asiento en la gran mesa que preside la llamada sala de prensa. Una gran pieza de color blanco por la que el Ejecutivo regional ha desembolsado algo más de 4.500 euros.