Los partidos que componen IU tendrán garantizada la representación en los órganos de la federación. Así, al menos, lo recoge la propuesta de estatutos que planteará este fin de semana en la Asamblea Federal de IU el más que previsible futuro líder de la organización, Alberto Garzón, que también tratará de integrar en su ejecutiva a los dos principales sectores críticos: el liderado por la eurodiputada Paloma López y el que comanda el llamazarista Tasio Oliver.
En la Asamblea Federal de este fin de semana el acto central será la elección formal de Garzón como coordinador federal en sustitución de Cayo Lara. Pero el cónclave también servirá para acordar tanto la hoja de ruta a nivel político de IU para los próximos cuatro años como el modo de organización interno que regirá la federación. Garzón planteó en sus tesis reducir el tamaño de los órganos y poner en marcha una organización más ágil en la toma de decisiones, y su documento reunió el 76,6% de los votos emitidos por militantes y simpatizantes en la votación que tuvo lugar durante los días 26, 27 y 29 de mayo.
Eso implica que los estatutos que se aprobarán este fin de semana estarán, esencialmente, basados en este documento, si bien las minorías habían reclamado que se garantizase su presencia en los órganos. Por ello, la propuesta de estatutos del sector mayoritario establece que dentro de la Asamblea Político y Social –el antiguo Consejo Político Federal, el máximo órgano entre congresos de IU– se reservarán dos asientos para cada uno de los partidos y corrientes que integran IU –el PCE, Izquierda Abierta o la CUT, entre otros–, y otros veinte que sólo ocuparán los partidos: dos serán para cada formación integrada en IU y el resto se repartirán proporcionalmente.
Las bases, que eligen 90 de los 150 asientos de este órgano, han decidido que el sector de Garzón cuente con 66 sillones, por 20 de López y cuatro de Oliver. Los otros 60 asientos se repartirán en base a los cupos que corresponden a cada federación territorial. El funcionamiento de la nueva Asamblea Político y Social, no obstante, tiene varias diferencias con respecto al del antiguo Consejo Político Federal, ya que el borrador de estatutos establece que se reunirá únicamente tres veces al año de manera ordinaria, y una de esas reuniones servirá como evaluación del trabajo de IU a lo largo del año.
Además, el órgano tendrá la competencia de ratificar el resultado de las elecciones primarias para elegir al candidato a la Presidencia del Gobierno y las listas electorales, y se le otorga la capacidad de "desarrollar el Movimiento Político y Social tomando cuantas iniciativas y acuerdos sean necesarios para su consecución", un planteamiento amplio que será clave para cumplir la hoja de ruta de Garzón, que apuesta por trascender IU y crear una organización más amplia junto a otras fuerzas a la izquierda del PSOE.
Garzón también prevé en su propuesta mecanismos similares para que las minorías se integren en la Coordinadora Federal –la antigua Presidencia, el órgano intermedio de dirección–, ya que se establece que cada partido de los que componen IU tendrá dos representantes y las corrientes y organizaciones de menor rango contarán con un asiento cada una. Este órgano se reunirá cada 45 días –ocho veces al año– y en él tendrán presencia, además, los coordinadores territoriales de IU y el líder a nivel federal.
Integración en la ejecutiva
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Las normas para la Comisión Colegiada –la antigua Comisión Ejecutiva Federal, el órgano ejectuvo –no establecen, por el contrario, cupos para las minorías, pero Garzón tratará de incluir a las dos más representativas en ese órgano. Según fuentes cercanas al que será el sustituto de Cayo Lara al frentede la organización, el nuevo coordinador tiene previsto ofrecer a Paloma López y Tasio Oliver que integrantes de sus corrientes se unan al nuevo órgano ejecutivo, que será elegido este domingo por la Coordinadora Federal a propuesta de Garzón.
Ambas candidaturas saludan el ofrecimiento del nuevo líder, aunque con reservas. Oliver explica en declaraciones a infoLibre que únicamente ha mantenido una "conversación informal" con Garzón sobre el tema, y si bien no "renuncia" a que Izquierda Abierta tenga representantes en la nueva Comisión Colegiada, Oliver afirma que lo que los llamazaristas buscan por encima de todo es que la dirección entrante lance el mensaje de que el partido tiene "espacio en el proyecto de IU". El dirigente de Izquieda Abierta no concreta qué puestos de la ejecutiva podría negociar el partido, aunque afirma que podrían ser útiles en áreas que se ocupen de poner en marcha mecanismos de "democracia participada", así como en la creación de "frentes amplios".
Por su parte, fuentes del sector liderado por Paloma López ven con simpatía la opción de entrar en la ejecutiva, aunque condicionan su participación en ese órgano a alcanzar un acuerdo con la mayoría sobre los estatutos. Y es que López y los suyos entienden que reformar los estatutos sin un debate previo de las asambleas de base sobre la propuesta concreta es contrario a las normas internas de IU, por lo que plantearán este sábado una enmienda a la totalidad de la propuesta de Garzón y propondrán retrasar la aprobación de estos estatutos hasta que se celebre una conferencia exclusivamente para ello.
Los partidos que componen IU tendrán garantizada la representación en los órganos de la federación. Así, al menos, lo recoge la propuesta de estatutos que planteará este fin de semana en la Asamblea Federal de IU el más que previsible futuro líder de la organización, Alberto Garzón, que también tratará de integrar en su ejecutiva a los dos principales sectores críticos: el liderado por la eurodiputada Paloma López y el que comanda el llamazarista Tasio Oliver.