El juez que instruye el accidente del Alvia en Santiago, Luis Aláez, ha pedido a Renfe toda la documentación relacionada con el informe del jefe de maquinistas de Orense que alertaba, en diciembre de 2011, de la peligrosidad de la curva de Angrois.
Por su parte, la operadora ferroviaria está recabando los documentos y preparándolos para remitírselos al magistrado. Así, estima que podrá entregarlos "bastante rápido".
La seguridad de la curva de Angrois en la que descarriló un tren Alvia el pasado 24 de julio provocando la muerte de 79 sigue en el centro de la investigación. Frente a la versión oficial de Adif y Renfe, que aseguran que no había advertencias previas que permitieran evitar la catástrofe, el abogado del maquinista sostiene que el jefe de conductores de Ourense advirtió a sus superiores del peligro de esa curva y que lo hizo apenas dos semanas desués de inaugurarse el trazado.
Así, y según informa el diario El País este jueves, José Ramón Iglesias Mazaira, jefe de maquinistas de la provincia de Ourense, habría remitido a sus superiores en Renfe un correo electrónico un año y siete meses antes del siniestro de Santiago, el 26 de diciembre de 2011. En ese texto, advertía de que tomar la curva requería de un frenazo efectuado de forma "brusca", sin que hubiera "aviso previo por señalización de la vía" y sin que ningún sistema que controlase la velocidad del convoy.
"Esa transición –apuntaba Iglesias– ocurre en una zona de máxima atención y riesgo por (...) la señalización lateral que hay que respetar. Únicamente existe una señal de velocidad descendente (...) pero de poco vale puesto que de no haber reducido previamente la velocidad nada se podrá hacer ya”. Precisamente así ocurrió el accidente del Alvia: aunque el maquinista Francisco José Garzón intentó reducir la velocidad, comenzó a frenar demasiado tarde.
Más aún, el jefe de maquinistas realizó ya en 2011 algunas recomendaciones: "Parece importante respecto al punto anterior estudiar la posibilidad de solicitar la implantación en la vía de señales de limitación permanente a 80 km/h, que podrían facilitar el cumplimiento de las velocidades máximas”. Aunque no se instalaron de forma previa al accidente, sí hubo señales temporales puestas por Adif tras el accidente.
Las excusas de Renfe y Adif
De probarse la veracidad del correo electrónico aportado a la causa por la defensa del maquinista, la versión de las empresas públicas Renfe y Adif quedaría en entredicho. En septiembre, cuando el instructor intentó la imputación de cargos públicos de esta última, Adif recurrió alegando que exigirle prever la posibilidad de un accidente en ese punto equivalía a requerirar una "sobrehumana capacidad predictiva, prácticamente adivinatoria y omnisciente".
En esa misma línea, la defensa sostuvo que el juez Aláez venía a exigir "una especie de capacidad visionaria que les hubiera permitido representarse y prever la posbilidad de que existiera un comportamiento imprudente". Por contra, el instructor defendía que el perjuicio provocado por un exceso de velocidad al abordar la curva era "previsible previamente".
Sin embargo, la Audiencia de A Coruña contradijo esa hipótesis y consideró "tolerable" el riesgo asumido por Adif, levantando la imputación de los técnicos de la empresa pública.
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Vuelvo en la investigación
El abogado del maquinista, considerado hasta ahora responsable de la tragedia, estima que este documento podría provocar un vuelco en la investigación. La causa, ha dicho "cambiará a medida que vaya saliendo toda la realdiad del tema". "La responsabilidad del accidente es difenrete a la que se considera", ha añadido.
El letrado de Francisco José Garzón se ha mostrado convencido también de que "habrá informes periciales" que constaten estas circunstancias, en la línea de la defensa de su cliente, y ha añadido que, de acuerdo con su información, los peritos "están trabajando" y desarrollan una labor "muy completa" con el objetivo de "emitir su informe", que ha esperado que pueda estar listo "en seis meses".
El juez que instruye el accidente del Alvia en Santiago, Luis Aláez, ha pedido a Renfe toda la documentación relacionada con el informe del jefe de maquinistas de Orense que alertaba, en diciembre de 2011, de la peligrosidad de la curva de Angrois.