Este jueves está convocada una nueva jornada de protesta por las Marchas de la Dignidad, la segunda en lo que va de año tras la cita del pasado marzo. Aunque la manifestación conserva su lema, "Pan, trabajo y techo", pierde la esencia de aquel 22-M de 2014: las columnas con miles de ciudadanos llegados a Madrid desde todas partes del país. Esta vez, los actos se repartirán por más de una treintena de ciudades, y solo en la Comunidad de Madrid habrá caminatas hasta la capital.
Ginés Fernández, miembro de la organización, explica a infoLibre que este cambio se acordó así al entender que las marchas "tenían que tener reflejo en los territorios porque también las comunidades y los ayuntamientos son responsables de realizar políticas que no vayan contra los ciudadanos". Para la mañana del jueves se han previsto actos reivindicativos a las puertas de aquellos edificios institucionales que han tomado parte en el recorte de derechos y libertades.
Por ejemplo, los manifestantes se encerrarán en una sucursal bancaria para protestar contra los desahucios y se reunirán frente a la Seguridad Social en apoyo a los pensionistas. Ya por la tarde tendrán lugar las manifestaciones, que recorrerán el centro de las principales capitales, entre ellas Madrid, en la que dará comienzo a las 19.30 en la Puerta del Sol.
El 22 de marzo de 2014 las Marchas de la Dignidad consiguieron colapsar el corazón de la capital española. Cientos de miles de personas (dos millones según los organizadores y 50.000 según la Delegación del Gobierno) se sumaron en la plaza de Colón a las 2.000 personas que habían llegado hasta Madrid caminando desde otras comunidades. Un año después, las marchas volvieron a la calle, pero en este caso lo hicieron sin el éxito esperado.
Para Ginés Fernández esto fue consecuencia de dos circunstancias: "el mal tiempo que acompañó, porque a las cinco de la tarde cayó 'la mundial' de agua, y esa nueva sensibilidad que se ha ido introduciendo y que dice que lo electoral lo va a solucionar todo". Desde las Marchas de la Dignidad, señala, "combatimos ese discurso y hacemos hincapié en que el cambio político solo será posible si hay movilización en la calle y unidad popular".
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Victoria judicial para las marchas
El pasado 24 de septiembre la justicia consideró "contraria a derecho" la apertura de un expediente a las Marchas de la Dignidad por parte de la Delegación del Gobierno en Madrid, que por entonces estaba a la orden de Cristina Cifuentes. Añadió el juzgado que en el expediente no se contemplaba la presunción de inocencia y que faltaban "elementos probatorios".
La Delegación del Gobierno pretendía sancionar con 3.0000 euros a los convocantes por los incidentes que hubo casi al término de la manifestación. Sin embargo, explica Ginés Fernández, la justicia reconoce que "no hay datos de que incumpliéramos nuestro compromiso dado de garantizar el orden" y que "los incidentes no surgieron en el marco de la manifestación sino a 200 metros, en la calle Génova".
Este jueves está convocada una nueva jornada de protesta por las Marchas de la Dignidad, la segunda en lo que va de año tras la cita del pasado marzo. Aunque la manifestación conserva su lema, "Pan, trabajo y techo", pierde la esencia de aquel 22-M de 2014: las columnas con miles de ciudadanos llegados a Madrid desde todas partes del país. Esta vez, los actos se repartirán por más de una treintena de ciudades, y solo en la Comunidad de Madrid habrá caminatas hasta la capital.