“Conmoción”. Con esta palabra describe una persona con despacho en el Palacio de La Moncloa lo que se está viviendo ahora mismo en el complejo presidencial y en la calle Ferraz. Los socialistas siguen en shock. El mutismo del jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, es total. Está en su despacho, pero no ha comunicado ni a sus colaboradores más cercanos qué piensa hacer el lunes: “Sólo está en su cabeza”.
Ni estrategia planificada ni golpe de efecto. Nadie lo sabía, él escribió en soledad su carta y entregó por sorpresa la misiva a su gabinete poco antes de que se lanzara a la ciudadanía. Todos los dirigentes comprenden la situación de Sánchez, entienden esa línea roja que se ha cruzado con la esposa del presidente, respetan absolutamente ese plazo que se ha dado.
Y en la cúpula socialista y entre los principales barones dominan varias sensaciones, según distintas fuentes consultadas por infoLibre. La primera: hay una posibilidad muy real de que Sánchez pueda dejar la Presidencia. Está harto, no es un enfado pasajero, no es una llamada de atención. ¿Cómo está la situación? “Mal”, contesta un miembro del Consejo de Ministros ante la posibilidad de que el jefe del Ejecutivo se aparte ante el “acoso y derribo” que vive su familia. Por lo tanto, es una posibilidad muy real que barajan entre miembros del Gobierno y de la Ejecutiva del partido.
"Hay que convencerlo"
Pero eso lleva a otra línea de actuación: hay que convencerlo. Sánchez es el principal activo del PSOE, el hombre que lleva todas las riendas, una figura difícil de recambiar ahora mismo. Un político con control total sobre el partido, pero, sobre todo, con un ascendente moral sin parangón en el partido. “Sólo él pudo conseguir lo que pasó el 23 de julio”, señalan fuentes socialistas. Nadie quiere hablar de sucesión, nadie se mueve para planificar otro horizonte.
Ahora mismo los referentes del partido se mueven entre el respeto a la decisión que se tome y palabras de apoyo y señales de que quieren que continúe. Esa sensación se verá plasmada de manera total en la reunión del próximo sábado del Comité Federal del PSOE en Madrid. Esa cita estaba diseñada para aprobar la lista de las elecciones europeas del próximo 9 de junio, que estará liderada por Teresa Ribera, celebrar los resultados del 21-A por el ascenso del PSE-EE y, sobre todo, dar un impulso caluroso a Salvador Illa y al PSC de cara al 12 de mayo.
Pero el guion se ha cambiado totalmente y los principales dirigentes del partido quieren mostrar su apoyo a Sánchez para que se quede en La Moncloa. Él no participará al cancelar su agenda pública, por lo que no habrá el tradicional discurso en abierto del líder. Se ha replanteado el formato y será la ‘número dos’ del partido, María Jesús Montero, la que haga la principal intervención, según fuentes socialistas, y tomarán la palabra también Eneko Andueza (PSE-EE) y Salvador Illa.
Centenares de autobuses, un Comité Federal en abierto
Aunque los dirigentes no llaman oficialmente a la movilización, las agrupaciones de toda España bullen en estos momentos. Hay llamadas de militantes rasos a sus federaciones y a las casas del pueblo que quieren evidenciar su apoyo total al secretario general y pidiendo hacer algo. Los grupos de Whatsapp echan chispas a lo largo y ancho de toda España. Las federaciones están fletando autobuses para ir el sábado a la calle Ferraz para exhibir el respaldo a Sánchez y para pedirle de esta manera que siga al frente del partido a pesar de los momentos duros familiares y personales. Se están citando a las 11 de la mañana frente a la sede, que fue la casa del fundador Pablo Iglesias.
Muchas federaciones están comunicando a Ferraz el traslado de militantes. Y fuentes socialistas explican que ante esta situación se han tomado varias decisiones: se pondrá una pantalla gigante a las puertas para que los congregados puedan seguir en directo la reunión del Comité Federal, el máximo órgano entre congresos. Además, se ha decidido que se emitirá en directo toda la reunión, algo que nunca ha sucedido porque sólo era público el discurso del secretario general y luego el resto de intervenciones eran a puerta cerrada.
Zapatero llama a la movilización
De esta manera se plasmará un apoyo cerrado y sentido de todo el partido. La voz que está liderando ese respaldo a Sánchez como gran referente moral del PSOE es el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, que en una entrevista en la Cadena Ser este jueves pidió la movilización de las bases: “Tenemos que reaccionar democráticamente. Todos los que queremos al PSOE y a la democracia hagamos de aquí al lunes, que se imponga la democracia al odio”.
“Hay que comprender y respetar al presidente, pero a los compañeros y compañeras, a los simpatizantes les pido que se movilicen en favor de la democracia y el respeto en favor de la justicia y de la tarea de Pedro Sánchez. Hay que apoyarle y arroparle”, lanzó Zapatero, cuyas palabras siempre remueven al partido. Pero, además, alertó de que hay que evitar que suceda como en Portugal: “No puede pasar aquí, no nos podemos quedar quietos ni callados”.
También se escucharon con especial atención las palabras de María Jesús Montero. Ella es la vicepresidenta primera del Gobierno y la vicesecretaria general del PSOE, la persona con más poder después del presidente y a la que todos señalan como posible sucesora. Su mensaje fue claro y directo: “Estamos centrados en mandarle energías positivas. Lo necesitamos para que España siga avanzando”.
Unidad total: del PSC a García-Page
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Y también llegaron unas declaraciones muy especiales por parte de Salvador Illa, el candidato del PSC en el arranque de la campaña. Es una persona con conexión directa con Sánchez, con quien convivió en La Moncloa durante la pandemia. El respeto político, intelectual y personal es máximo entre los dos. El exministro de Sanidad, en el acto en Sabadell donde debía haber estado el jefe del Ejecutivo, clamó: “Vamos a levantar una resistencia colectiva ante este tipo de políticas. Una resistencia que dice ‘no’ a la destrucción del adversario y ‘no’ al insulto y que dice ‘sí’ a la política noble”. “Y te decimos, Pedro, que de tu resistencia individual hacemos un llamamiento a levantar una resistencia colectiva. El PSC está contigo”, impulsó.
El apoyo también ha llegado hasta de los sectores más alejados a Sánchez dentro del partido como Javier Lambán (Aragón) y Emiliano García-Page (Castilla-La Mancha). El primero no podrá acudir el sábado por problemas de salud, pero el segundo, que ha evitado ir en las últimas reuniones, sí se desplazará hasta Madrid.
Este respaldo también en forma de movilización “política y ciudadana” está siendo planteado por los propios socios de Sumar. El portavoz en el Congreso, Iñigo Errejón, hizo esta llamada al entender que es la propia democracia la que está en juego en estos momentos. También partidos del bloque de investidura como ERC y EH Bildu han dejado claro que no dejarán la puerta abierta a que la derecha se haga con La Moncloa, mientras que el PNV apremia a que Sánchez anuncie ya su decisión. Las mayores dudas en estos momentos vienen por parte de Junts, aunque Carles Puigdemont apuntó en X a la vía de una moción de confianza.
“Conmoción”. Con esta palabra describe una persona con despacho en el Palacio de La Moncloa lo que se está viviendo ahora mismo en el complejo presidencial y en la calle Ferraz. Los socialistas siguen en shock. El mutismo del jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, es total. Está en su despacho, pero no ha comunicado ni a sus colaboradores más cercanos qué piensa hacer el lunes: “Sólo está en su cabeza”.