¿Agotará el mandato? La pregunta es recurrente para la actual presidenta de la Junta de Andalucía y líder regional del PSOE, como lo era antes para su antecesor, José Antonio Griñán. Susana Díaz emite señales de que puede que no se lleve a término la legislatura, cuyo final teórico llegaría en marzo de 2016. "Hay una voluntad del PSOE e IU de hacerlo [de culminar el mandato], pero los primeros compases no me lo han puesto fácil. La elaboración del Presupuesto y la exigencia del objetivo de déficit por parte del Gobierno [central] incumpliendo lo que acordamos en la Conferencia de Presidentes, donde yo estuve, no lo pone fácil. Pero es mi voluntad, porque Andalucía necesita estabilidad política", responde en una entrevista publicada este domingo en ABC.
Díaz no ha ocultado que el PSOE debe buscar mayorías sociales amplias, y ambicionar a volver a gobernar "sin hipotecas". Esto es, sin Izquierda Unida –liderada desde junio de 2013 por Antonio Maíllo y no por el vicepresidente del Gobierno regional, Diego Valderas–, por mucho que el Ejecutivo de la Junta esté funcionando sin estridencias. Y ella, como presidenta, se guarda el as en la manga de poder convocar anticipadamente las elecciones para validarse en las urnas y, de paso, hundir a un PP que no encuentra ni candidato en Andalucía.
En otro orden de cosas, la jefa del Ejecutivo regional asegura que está "haciendo frente a la corrupción. "Que es lo que tengo que hacer y lo que esperan los ciudadanos". Así, defiende que está "dando muestras de transparencia y de recuperar hasta el último euro de los fondos públicos. Espero que todos los partidos lo hagan". De la misma manera, preguntada por el caso de las presuntas facturas falsas de UGT-A, Díaz sentencia que va a cumplir "escrupulosamente la ley de la contundencia que exigen los ciudadanos", y que el Gobierno andaluz ha trasladado toda la documentación pertinente al Gabinete jurídico, cuya decisión al respecto acatará y llevará a cabo la Junta.
Sobre el caso de los ERE, la socialista dice que le ha "abochornado mucho", a ella y al PSOE. Defiende que "cuanto antes se aclaren las responsabilidades judiciales mejor, porque si algo falla es este país es que la Justicia es lenta, y cuando la Justicia es lenta es menos justa". Entretanto, Díaz afirma que el modelo económico de Andalucía "hay que abrirlo en canal", un debate que debe hacerse "viendo lo que ha funcionado y lo que no". "Es el momento de pararnos y reflexionar sobre los instrumentos adecuados para un nuevo tiempo", sostiene. Algo que ya trasladó hace dos semanas, en el congreso del PSOE andaluz que la eligió secretaria general por un 98,63%.
En la semana del 35º aniversario de la Constitución, la presidenta andaluza se muestra partidaria de reformar la Carta Magna, "con el consenso del 1978", porque "sería un error" modificarla "limitando el apoyo a dos partidos". Así, entiende que "hay que buscar un consenso mayoritario en el que esté también el Partido Comunista y en el que estén aquellos nacionalistas no independentistas, como en el 78". Hace falta una "amplia mayoría social que permita a una generación como la mía y a dos tercios de la población española volver a identificarse con la Carta Magna", señala. Añade que "hace falta diálogo, mucho diálogo y consenso, y un proyecto común en el que todos nos sintamos cómodos, reconociendo pluralidades pero defendiendo la unidad de España en la que yo creo".
En este punto, aboga por un cambio en la Carta Magna que refuerce la defensa de la sanidad y la educación públicas, así como que, en el ámbito de la construcción del Estado, "hay que reconocer las diferencias con dos límites: ni agravios ni privilegios", y este proyecto, en opinión de Díaz, "lo tiene que liderar el presidente del Gobierno".
"No soy quién para recomendarle nada a Rubalcaba"
Preguntada por el cambio de postura del PSC respecto al referéndum de autodeterminación, la socialista andaluza indica que ha sido "una reflexión de los socialistas catalanes, que saben que cuentan con el apoyo de todos los socialistas españoles". "Han tenido una actitud responsable que no es reconocida en el corto plazo", añade.
Ver másSusana Díaz compone una ejecutiva paritaria y renovada
A nivel orgánico, Díaz apuesta por que las primarias en el PSOE se celebren después de las elecciones europeas, y rehúsa posicionarse sobre que Alfredo Pérez Rubalcaba vuelva a presentarse como candidato: "No soy quién para recomendarle nada a Rubalcaba, ni a Rubalcaba ni a nadie".
La presidenta insiste en que no piensa en ser jefa del Gobierno español porque su "compromiso" es "con Andalucía". Y tampoco adelanta su apoyo a ningún compañero para las primarias. Esperará al momento en que den el paso para dar su opinión. Con Carme Chacón asegura que no ha hablado y no sabe qué piensa hacer.
El diario le pregunta si cree, como Griñán, que la generación que ha dirigido el PSOE en las últimas décadas es un "tapón" para las siguientes. "Siempre he creído en la alianza de generaciones, he creído en la lealtad, el compañerismo, y en que en un proyecto común todos podemos aportar. Pero es evidente que en los últimos procesos internos he defendido el cambio, tanto en los congresos en los que ha habido una mayoría que lo han avalado como cuando he perdido, como en el congreso federal del partido [en Sevilla, en 2012]. Creo que el PSOE tiene que cambiar, tiene que reencontrarse, y ser un partido más atractivo para los ciudadanos", replica.
¿Agotará el mandato? La pregunta es recurrente para la actual presidenta de la Junta de Andalucía y líder regional del PSOE, como lo era antes para su antecesor, José Antonio Griñán. Susana Díaz emite señales de que puede que no se lleve a término la legislatura, cuyo final teórico llegaría en marzo de 2016. "Hay una voluntad del PSOE e IU de hacerlo [de culminar el mandato], pero los primeros compases no me lo han puesto fácil. La elaboración del Presupuesto y la exigencia del objetivo de déficit por parte del Gobierno [central] incumpliendo lo que acordamos en la Conferencia de Presidentes, donde yo estuve, no lo pone fácil. Pero es mi voluntad, porque Andalucía necesita estabilidad política", responde en una entrevista publicada este domingo en ABC.