Después de que Vox anunciara este martes que rompen las negociaciones con el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida (PP), (PP),para cerrar la forma en la que el partido de extrema derecha forma parte de la estructura municipal, la formación liderada por Santiago Abascal, puso sus condiciones para acordar un candidato a la Comunidad de Madrid.
La encargada de hacerlo fue la cabeza de lista de Vox a la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, en una rueda de prensa convocada en la institución a las 10 de la mañana. Si bien aseguró que el PP ha dejado de ser "socio preferente", el documento presentado por el partido de Abascal está elaborado sobre la base de que la única alianza posible es PP-Cs-Vox. Una especie de continuidad del pacto alcanzado cuando se constituyó la Asamblea de Madrid con el que las bautizadas por la izquierda como "las tres derechas" se hacían con el control de la Mesa del parlamento regional. Así queda claro en uno de los párrafos del documento presentado por Vox: "Las tres partes firmarán un programa único común".
¿Es necesario que las tres partes se sienten en la misma mesa? preguntaron a Monasterio los periodistas. "No es indispensable sentarse en la misma mesa las tres partes, es indispensable un programa único", respondió.
Además, advirtió de que no va a aceptar que sus posibles socios insulten a Vox o impongan "cordones sanitarios". Y de que en Vox no están dispuestos a las "injerencias extranjeras", en alusión a las relaciones entre el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el presidente de la formación naranja, Albert Rivera.
"Vox se compromete decididamente a guardar y proteger el orden constitucional y la Unidad de España, manteniendo siempre la máxima lealtad hacia la Corona y la Carta Magna. Abrimos un periodo de negociaciones con todos los partidos para la investidura, en julio, del candidato a la presidencia de la Comunidad de Madrid. Este período de negociación durará hasta el día 2 de julio a las dos de la tarde. En Vox venimos a defender ideas. Tenemos como prioridad evitar políticas del consenso socialdemócrata", arranca el documento.
El partido de extrema derecha habla de "tres condiciones de negociación: respeto, compromiso y lealtad". Y tres principios para un acuerdo: "prosperidad, libertad, legalidad".
Dentro del cumplimiento de la legalidad el grueso se lo llevan las medidas dedicadas a la inmigración, como ya ocurrió en las negociaciones que culminaron con la investidura de Juanma Moreno como presidente de la Junta de Andalucía.
Lo mismo ocurre con su apuesta por derogar artículos de las leyes de LGTBI y Transexualidad.
"Repatriación de los Menas"
"Colaborar, desde todos los organismos de la Comunidad de Madrid, incluidos los pertenecientes al ámbito de la Sanidad, con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la identificación de todos los inmigrantes que se encuentren en la Comunidad de forma ilegal, con especial atención a la identificación y repatriación de los Menas", puede leerse.
Y añaden: "Dado que los recursos de los madrileños no son infinitos, requerir al país de origen el pago de la factura sanitaria tanto de los inmigrantes ilegales como de los comunitarios o visitantes que se hayan beneficiado de la sanidad pública madrileña, evitando el turismo sanitario".
También aboga Vox por "suprimir las subvenciones destinadas a financiar chiringuitos, entes públicos, sindicatos, patronales o empresas públicas dependientes de la Comunidad de Madrid que tengan carácter ideológico, que no respondan a criterios razonables de uso del dinero público, o que supongan una duplicidad de competencias".
"Se cerrarán aquellas entidades que no justifiquen su existencia bajo estos criterios y no se creará ninguno nuevo. Se eliminará la ayuda al exterior, que deben ser competencia exclusiva del Estado. Así suprimiremos gasto público innecesario", mantienen.
El líder de Vox estuvo a sueldo de uno de estos "chiringuitos".
¿Y si no hay acuerdo?
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El próximo martes es la fecha tope para que el presidente de la Asamblea, Juan Trinidad (Cs), proponga un candidato a la investidura, que debe lograr en primera votación mayoría absoluta. En la segunda, 48 horas después, ya se requiere más votos a favor que en contra. Si el 11 de septiembre no hay candidato investido, se convocarán de nuevo elecciones autonómicas.
Monasterio aseguró que su idea es trabajar para llegar a un pacto, pero que si eso no ocurre no pasa nada por que los políticos trabajen en verano porque también cobran un sueldo en verano.
En el Partido Popular optan por la prudencia pero, en privado, los dirigentes consultados no ocultan su malestar con el partido de Abascal. Y recuerdan que Isabel Díaz Ayuso, su candidata, dispone de un documento firmado tanto por el Cs como por Vox en el que el primer punto establece que ella es "la única candidata" a la investidura. En principio, Vox no reclama entrar en el Gobierno regional. De hecho, en este caso el PP nunca se comprometió a ello, pero los conservadores no se fían de que esto no vaya a ocurrir en el último tramo de la legislatura.
Después de que Vox anunciara este martes que rompen las negociaciones con el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida (PP), (PP),para cerrar la forma en la que el partido de extrema derecha forma parte de la estructura municipal, la formación liderada por Santiago Abascal, puso sus condiciones para acordar un candidato a la Comunidad de Madrid.