Hace ya casi un año que Carme Portaceli (Valencia, 1955) ganó el concurso público para dirigir el madrileño Teatro Español, un espacio donde ha querido conjugar la tradición y la contemporaneidad. La creadora, que lleva dirigiendo espectáculos desde 1984, es capaz de representar una adaptación de Una habitación propia de Virginia Woolf y una obra sobre el drama de los refugiados en el mismo espacio. Saca tiempo para todo, como ella misma revela: "Me encanta mi trabajo, me ilusiona cada día". A lo largo de su dilatada trayectoria, Portaceli ha conciliado su faceta creativa (directora, escritora) con labores más institucionales y organizativas como su condición de fundadora de la Factoría Escénica Internacional desde 2005 o su puesto en el comité organizador de los Premios Max de las artes escénicas.
Desde que en 1982 entró en el Teatro Lliure como ayudante de dirección su vida ha estado ligada a las tablas, un lugar donde ha recibido numerosos galardones como el Premio Butaca 2002 a la mejor dirección por Cara de Foc o el Premio Ade 2001 de la misma categoría por Solness, el constructor. Este 2017, la directora teatral ha puesto voz ala tragedia Troyanas de Eurípides, unrelato sobre las mujeres como ciudadanas de segunda categoría castigadas, no solo por la guerra, sino por el mero hecho de ser mujeres.La obra se presentóen el tercer estreno de la 63 edición del Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, con Aitana Sánchez Gijón en el papel protagonista. Portaceli aprovecha esas ansiadas vacaciones, con las que confiesa que tanto sueña, para seguir preparando los próximos textos escénicos.
Pregunta. ¿Está ya de vacaciones, sueña con ellas o se queda de Rodríguez?Rodríguez
Respuesta. ¡Sueño con ellas! Aunque amo lo que hago, pero necesito descansar, nadar en el mar, leer ficción, dormir.
P. ¿Cuál es su canción del verano particular? ¿Por qué?
R. Pues no tengo ninguna, la verdad. No soy de canciones del momento.
P. ¿Y cuáles fueron las primeras vacaciones que pudo permitirse por sí sola?
R. Hace algunos años ya, por suerte para mí. Pero yo siempre he creído que, aunque no tengas mucho dinero, hay que organizarse para cambiar de paisaje, porque hemos estado todo el año currando muchísimo y debemos cambiar de lugar para sentirnos mejor.
P. ¿Qué libros echa a la maleta?
R. Me encanta leer novelas y este año tengo preparadas El cuento de la criada, de Margaret Atwood; Patria, de Fernando Aramburu; Gala-Dalí, de Carmen Domingo; y Todo esto te daré, de Dolores Redondo, porque la Trilogía del Baztán ya la leí y me entusiasmó.
P. ¿Una serie para la hora de la siesta?
R. La siesta la paso en el mar. La serie, por la noche. Big little lies, por ejemplo. The handmade’s tale…
P. ¿Se puede crear en pleno agosto o es mejor rendirse al calor?
R. Yo lo hago, he preparado muchos textos en vacaciones, en medio del campo, de la naturaleza. Dramaturgias, eso es maravilloso porque tienes otro tempo.
P.¿Qué noticia querría encontrarse en los informativos este verano?
R. Que las mujeres y los hombres cobran lo mismo por el mismo trabajo por ley.
Celia de Molina: "Agosto es el mes de la creatividad"
P. ¿Es de los que teme la vuelta al cole?
R. No, me encanta mi trabajo, me ilusiona cada día. Eso sí, siempre digo que el verano es corto, ¡necesitaríamos cuatro meses de vacaciones!
Hace ya casi un año que Carme Portaceli (Valencia, 1955) ganó el concurso público para dirigir el madrileño Teatro Español, un espacio donde ha querido conjugar la tradición y la contemporaneidad. La creadora, que lleva dirigiendo espectáculos desde 1984, es capaz de representar una adaptación de Una habitación propia de Virginia Woolf y una obra sobre el drama de los refugiados en el mismo espacio. Saca tiempo para todo, como ella misma revela: "Me encanta mi trabajo, me ilusiona cada día". A lo largo de su dilatada trayectoria, Portaceli ha conciliado su faceta creativa (directora, escritora) con labores más institucionales y organizativas como su condición de fundadora de la Factoría Escénica Internacional desde 2005 o su puesto en el comité organizador de los Premios Max de las artes escénicas.