El periodista malagueño Ángel Munárriz (Cortes de la Frontera, 1980) es uno de los periodistas de la redacción de infoLibre. Cubre la información política en Andalucía, un territorio que parece configurarse como el próximo foco de atención de la batalla política en España. En el próximo año, se celebrarán unas elecciones autonómicas que marcarán el inicio de la fase final de la presente legislatura. Es autor del libro Iglesia S.A., en que desentraña el papel de la Iglesia católica en nuestro país. Entre sus especialidades se encuentra el seguimiento del fenómeno de la ultraderecha. Tal y como señala, “que Andalucía haya sido la puerta de entrada de la extrema derecha en España es un fenómeno que, sin duda, llama a la reflexión”.
La Iglesia y el franquismo
“La posición de la Iglesia con respecto a las misas en las que se reza por Franco es que Franco era un fiel, era un cristiano y, como tal, si se pide un rezo por su alma se lo da. El problema de todo eso es que viene envuelto en una relación complicada de la Iglesia con su propia historia durante el franquismo. La Iglesia fue un pilar central de la dictadura franquista, que fue una dictadura nacionalcatólica y no hay hecha una suficiente autocrítica de la Iglesia en relación a su papel con el franquismo que llevaría inevitablemente a un cuestionamiento de parte de sus privilegios, que los mantiene todavía a día de hoy en democracia. En cuanto a la presencia de Pablo Casado en la misa homenaje a Franco en Granada, es un error que hubiera entrado, aunque lo hiciera sin saberlo. Fue una decisión desgraciada e insuficientemente explicada”.
El conflicto del metal en Cádiz
“Lo que ha explotado en Cádiz en torno al convenio del metal no se ciñe exclusivamente a la discrepancia en torno a los números de la subida salarial, ni de la duración del convenio. Hay una sensación muy extendida entre los trabajadores del metal de miedo a alzar la voz y de miedo a reivindicar sus condiciones laborales porque el sistema de subcontratación que impera en el sector del metal en Cádiz deja a los trabajadores en una situación de mucha indefensión. Una pregunta que debemos hacernos es: si salen así a quejarse con ese desgarro y con esa preocupación los trabajadores del metal, en qué situación no estarán los trabajadores de otros sectores más precarios como el comercio y los servicios. Por otra parte, si cada conflicto que surja va a ser leído en clave de responsabilidad del Gobierno, cuando son conflictos empresariales, yo creo que nos perdemos una parte muy significativa de la comprensión del problema”.
Adelanto electoral
“No sé cuándo va a haber elecciones en Andalucía, nadie lo sabe. No considero productivo ni interesante especular en torno a esa cuestión. Lo que sí me parece relevante es contar, más que lo que va a pasar, que no lo sé, lo que sí ha pasado. Lo que sí ha pasado es que los términos en los que se ha desarrollado la legislatura se han agotado. Esta ha sido una legislatura de mayoría de la derecha, en la que PP y Ciudadanos han gobernado muy cómodamente gracias al apoyo de Vox, a cambio de contrapartidas en temas muy sensibles como la educación, la memoria histórica y el género. Se han puesto de acuerdo en lo esencial: educación, sanidad, impuestos, economía... y PP y Ciudadanos le han dado a Vox concesiones de tipo simbólico para reivindicar ante su electorado. Esto ha reforzado al PP, ha matado a Ciudadanos y parece que ha consolidado Vox. Ese ha sido el reparto”.
La mayoría conservadora en Andalucía
“El Partido Socialista tuvo un papel clave, digamos, en la forja de la autonomía andaluza. Manuel Chaves sacó 2,2 millones de votos en 2008 en unas autonómicas. Al PSOE, lo votaron un millón de personas, en las autonómicas de 2018. A Juan Manuel Moreno es muy frecuente verlo aferrado a la bandera andaluza, a las reivindicaciones de Andalucía frente a Madrid, y eso funciona. Es de manual, funciona y seguirá funcionando siempre. Ayer lo hacía el PSOE, hoy lo hace el PP. A corto plazo, lo que se ha producido es una rápida consolidación del PP en Andalucía y una desactivación de la idea del miedo a la derecha. Creo que Moreno ha tenido muy de cara la legislatura y creo que está en una buena posición para afrontar el período electoral”.
El voto en las generales y en las autonómicas
“Hay entre 400.000 y 500.000 votos que Pedro Sánchez ha levantado del sofá y Susana Díaz no levantó. ¿Se van a levantar esos votos del sofá para votar a Juan Espadas? Pues ahí está parte de la respuesta a la pregunta de si el PSOE tiene opciones o no tiene opciones electorales en Andalucía. ¿Con qué se puede movilizar ese electorado? Tienen tarea porque se enfrentan a un Gobierno que ha estado durante solo tres años y, además, lidiando con una pandemia que permite al PP, ante prácticamente cualquier crítica, responder con: ¿y tú qué hacías? Eso llega mucho. De todas maneras, presumir que el PP se ha consolidado y que las elecciones son suyas y que en Andalucía no hay partido, yo creo que es muy precipitado. Ahora, las circunstancias objetivas que tiene el PSOE para recuperar el poder son complicadas”.
La figura política de Juanma Moreno
“Juan Manuel Moreno ha jugado hábilmente la carta de su contraste con la estridencia de Isabel Díaz Ayuso. Él es un hombre de formas muy templadas, muy moderadas. Le gusta situarse, digamos, en la órbita de Alberto Núñez Feijóo. La moderación en las formas y el talante templado de Juan Manuel Moreno son indiscutibles, como lo son, también, que en su trayectoria está sí o sí y es innegable y, a veces, no se le presta la suficiente atención, el hecho de que fue el primer líder autonómico en pactar con la extrema derecha en España. Él ha jugado muy hábilmente sus cartas y, a pesar de ese problema de origen, ha consolidado una imagen de hombre moderado, que yo creo que es uno de sus mejores activos de cara al período electoral”.
Juan Espadas como alternativa
“Juan Espadas se alza con la secretaría general y con la candidatura del PSOE de Andalucía en un momento complicado con el partido. Tiene dificultades objetivas: tiene poco tiempo, es alcalde de Sevilla, se tiene que dar a conocer en toda Andalucía, es un hombre de cocción lenta, es un hombre que da la sensación de tener proyectos a medio-largo plazo. Lo tiene difícil. En Sevilla consiguió hacerse con la alcaldía al segundo intento. Su desafío es sacar a 400.000 votantes que se quedaron en casa en 2018 y llevarlos a las urnas. Yo diría que Juan Espadas lo tiene difícil, pero no imposible y que también dependerán sus posibilidades de llegar a convertirse en presidente de la Junta de Andalucía, el vigor que consigan mostrar sus potenciales aliados, los restantes partidos en el ámbito de la izquierda y del andalucismo”.
La presencia de Vox
Ver másPedro Simón: "Con la salud mental somos un país bastante indecente"
“En cuanto a Vox, es difícil saber cuál va a ser su comportamiento electoral en Andalucía. Yo creo que Vox, en Andalucía, tiene un suelo en torno al 10% y creo que puede tener un techo algo más alto. Además de un partido, es un estado de ánimo. Creo que con una buena candidata —se especula sobre la hipótesis de Macarena Olona—, puede ser una fuerza política que se consolide o crezca. Yo creo que Vox conecta con una parte del estado de ánimo, con una determinada identidad de la gente en entornos rurales, con un determinado votante que antes votaba al PP sin entusiasmo y ahora vota a Vox con júbilo y creo que ese fenómeno ha llegado a Andalucía para quedarse. De la misma manera que creo que tiene suelo, también creo que tiene techo”.
A la izquierda del PSOE
“El espacio progresista andaluz al margen del PSOE está, en Andalucía, especialmente dividido. Desde el punto de vista de las opciones electorales, no es especialmente ineficiente que haya dos papeletas a parte del PSOE en la izquierda. La provincia que menos escaños reparte en Andalucía reparte once. Hay sitio para todos, si hay voto. Por mucho que ahora haya un movimiento que tienda a la cohesión de las fuerzas de lo que fue inicialmente Podemos, que está capitalizando a nivel estatal Yolanda Díaz, yo creo que ese impulso no pasa el filtro de los grandísimos malos rollos que hay entre Unidas Podemos y Adelante Andalucía. La primera cita electoral a la que se va a enfrentar la izquierda va a ser Andalucía y ahí esa idea de unidad de Yolanda Díaz no se va a dar. Tengo curiosidad por ver qué hace Yolanda Díaz en la campaña andaluza”.
Andalucía en la era post-covid
“A nivel sanitario, Andalucía escapó bastante bien de la primera ola, entre comillas, y mucho peor de la segunda. Va a ser clave, como en el resto de España, el uso que se dé a los fondos europeos, las apuestas que se hagan y que salgan bien. Andalucía tiene un problema de marginalidad económica, tiene un problema de poca calidad del empleo y tiene un problema de precariedad muy grave y tiene un problema de desigualdad. No nos va bien en los indicadores, aparecemos mal en los índices de Eurostat sobre pobreza y desigualdad y privación material, hemos dejado de converger... Yo creo que hay que hacer replanteamientos. Yo creo que el peso excesivo del sector servicios y el sector turístico está entre los motivos que explican la poca calidad del tejido económico andaluz. Quienes toman las decisiones deberían tener en cuenta que perseverar en lo que no ha funcionado no suele ser una buena idea”.
El periodista malagueño Ángel Munárriz (Cortes de la Frontera, 1980) es uno de los periodistas de la redacción de infoLibre. Cubre la información política en Andalucía, un territorio que parece configurarse como el próximo foco de atención de la batalla política en España. En el próximo año, se celebrarán unas elecciones autonómicas que marcarán el inicio de la fase final de la presente legislatura. Es autor del libro Iglesia S.A., en que desentraña el papel de la Iglesia católica en nuestro país. Entre sus especialidades se encuentra el seguimiento del fenómeno de la ultraderecha. Tal y como señala, “que Andalucía haya sido la puerta de entrada de la extrema derecha en España es un fenómeno que, sin duda, llama a la reflexión”.