Rajoy calla sobre Bárcenas

Los dirigentes del PP que acudieron este lunes a la sede nacional del partido con la intención de escuchar un mensaje contundente y tranquilizador sobre el último terremoto que afecta al partido se fueron con las manos vacías. Fiel a su estilo, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha evitado pronunciar el nombre de Bárcenas en la reunión del Comité Ejecutivo Nacional. Fuentes conocedoras del contenido de la reunión sostienen que el presidente del Gobierno se ha limitado a asegurar que el PP colaborará con la justicia. El extesorero del PP, Luis Bárcenas, ingresó en prisión hace cuatro días, un hecho que mantiene en vilo a un sector de la formación conservadora temeroso de lo que pueda desvelar ahora sobre la contabilidad del PP.

El líder de los conservadores dedicó el grueso de su intervención a hacer un repaso de las últimas medidas económicas aprobadas por el Gobierno y a insisitir en la idea de que España está ahora mejor que hace un año. "Ya estamos viendo claros resultados positivos", sostuvo, según contaría después la secretaria general, María Dolores de Cospedal, en rueda de prensa. 

No fue hasta el final de su intervención cuando lanzó su mensaje relacionado con el encarcelamiento del hombre al que aupó a la tesorería del partido. Fuentes presentes en este comité destacan que en ningún momento salió de su boca la palabra Bárcenas. Se limitó a decir que sobre las informaciones que se están publicando "en los últimos días", el partido colaborará con la Justicia. Además, recalcó que su formación no critica las decisiones de los jueces. Todo, pese a que hace una semana, uno de los hombres fuertes del partido, el vicesecretario de Organización, Carlos Floriano, denunció la existencia de una "causa general contra el PP".

El presidente del Gobierno recordó a los suyos que la instrucción del caso Gürtel lleva ya más de cuatro años y les alertó de que esto continuará, pero que el PP tiene que seguir adelante.

Junto a Rajoy, intervinieron la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal y el líder del PP andaluz, José Ignacio Zoido. La número dos de los conservadores dedicó su discurso a repasar su gestión de los últimos meses. Recopiló los actos de partido, los foros celebrados, agradeció la presencia de varios ministros en los mencionados foros temáticos y fijó el mes de octubre como el más posible para la celebración de la convención.

Minutos después de la celebración del Comité Ejecutivo Nacional, la número dos del PP, ofreció una rueda de prensa en la que insistió en que el partido colaborará con la justicia y en que el ejercicio de transparencia del PP es “único” y “también es apreciado por los ciudadanos”. ¿Nerviosismo o miedo en el PP por el hecho de que Bárcenas pueda tirar de la manta? Según mantuvo, no. "Tenemos total tranquilidad".

Cospedal no quiso entrar a valorar el fondo de las declaraciones de hace una semana de Floriano, cuando denunció la existencia de una "causa general" contra el PP. Sí quiso, no obstante, quejarse de la lentitud de la instrucción judicial. Al igual que había hecho minutos antes Mariano Rajoy a puerta cerrada, recordó que este caso dura ya cuatro años y que "la justicia es más justa cuando es más rápida".

Los ERE de Andalucía

Por su parte, Zoido aprovechó su intervención para analizar la situación en Andalucía después de que José Antonio Griñán anunciara que no volverá a presentarse a unas elecciones. El líder del PP andaluz consideró que a Griñán le ha podido el personalismo. Y ligó su marcha con el escándalo de los ERE. Además, criticó su "irresponsabilidad" por decir ahora que no volverá a ser candidato.

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Aguirre, "abochornada"

La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, ha confesado por su parte llegar "absolutamente abochornada" a la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del partido por "las informaciones sobre la corrupción del PP" y ha considerado que el presidente del Gobierno y de la formación, Mariano Rajoy, estará "igual de abochornado" que ella.

"El presidente de mi partido supongo que está igual de abochornado que yo", ha dicho Aguirre a su llegada al encuentro en la sede nacional del PP en Madrid. La dirigente conservadora ha asegurado que cuando su partido llegó al poder en 1996 lo hizo "con un estandarte de lucha contra la corrupción por lo que estaba pasando en el PSOE", y que, precisamente, una de las "señas de identidad" del partido era esta "lucha contra la corrupción".